Antes que llamar la atención de las autoridades, el dirigente del Partido Revolucionario Institucional en Tijuana Alberto Nava López sólo abonó a las expresiones de rechazo hacia los migrantes con sus opiniones en contra de que se asentara un campamento para centroamericanos en la Plaza de la Constitución, ubicada a un costado de la sede local de ese instituto político.
Ante la presencia de quienes se valieron de casas de campaña para alojarse en “el predio que pertenece a la propiedad del partido”, el líder partidista recurrió a su cuenta de Facebook en un afán de señalar que entre ellos había consumidores de marihuana, así como de drogas intravenosas y reclamó que “no se pueden invadir los espacios ajenos sólo porque sí” y que “en Tijuana merecemos respeto”.
A propósito de ese posicionamiento, algunos internautas adhirieron comentarios de carácter antiinmigrante. “Hay que decirles que se retiren, muy fácil están invadiendo nuestro México”, fue una de las voces de repudio, a la cual se sumaron otras: “que en las instalaciones no hagan de las suyas como hacen en nuestra Tijuana” y “esta gente tiene más garantías que nosotros, primero que el gobierno arregle los problemas que tenemos en el país”.
De la instalación de las carpas, el priista acusó a la agrupación Ángeles sin Fronteras, encabezada por Sergio Tamai Quintero. A decir de Nava López, si el activista mexicalense hubiera solicitado autorización, acaso habría accedido a que se dispusiera de esa explanada. Finalmente, anunció que recurriría al munícipe panista Juan Manuel Gastélum para ver si el Revolucionario Institucional contaría con apoyo oficial ante la contingencia; petición que según hizo saber no fue atendida