Baja California Sur.-Durante la noche del viernes y madrugada del sábado 6 de octubre, las calles de la Delegación de Cabo San Lucas en el municipio de Los Cabos, fue el escenario de una persecución poco común.
Un taxista del sitio SUSHPACA fue impactado por una patrulla de las recién entregadas a la Policía Ministerial, sin embargo, la unidad y su conductor se dieron a la fuga, lo que generó una persecución del chofer, quien se comunicó vía radio con sus compañeros transportistas; así inició la persecución por varias colonias.
“…Va a salir por lado de don Chema, el de los burritos; por acá por lado del tianguis. Es un carro de la Policía Ministerial, es Ministerial el que me chocó, como que se están dando a la fuga. Aquí vengo por él, vamos rumbo a la delegación”, comunicó a sus compañeros.
Una vez que fue detenido el oficial, en el lugar había decenas de taxistas apoyando a su compañero, pero para suerte del agente, otro policía a bordo de una camioneta RAM de la misma institución, llegó en su “rescate”.
El Policía Ministerial fue grabado en el interior de la patrulla en aparente estado de ebriedad y cubriéndose el rostro.
“Policías Ministeriales ahogados, miren. Armida (Castro), aquí están tus policías ”, refieren los testigos a la alcaldesa de Los Cabos, aunque los oficiales son estatales.
Los taxistas comenzaron a realizar algunas bromas al momento en que el oficial descendía balanceándose de la pick up.
“¡Mira, nomás! Un solito, un solito; haz un cuatrito, que se aviente un cuatro”, decían los testigos.
Momentos después, fue revelado que el taxi del Sitio SUSHPACA contaba con diversos orificios, al parecer producidos por proyectil de arma de fuego.
La Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) de Baja California Sur expuso a ZETA que “se investiga el caso y que la institución no permitirá actuaciones por encima de la ley de parte de servidores públicos”.