“Una sinaloense en la historia de Tecate”, es una antología de las publicaciones de la luchadora social en diversos medios de comunicación, entre éstos ABC y ZETA, que elaboró el escritor y cronista Ernesto Parra Flores
Nació hace 94 años en Mocorito, Sinaloa. El gusto por la escritura y la poesía lo trae en la sangre. Quienes conocen a Concepción Vizcarra de Arámburo la describen como una mujer firme, sensible, prudente, comprometida; sobre todo, como una incansable luchadora social.
“Doña Coty”, como cariñosamente la llaman, arribó a Tecate, Baja California, con su esposo e hijos hace más de 65 años. Sus primeras publicaciones en medios de comunicación fueron en La Semana, bajo la dirección del periodista Alberto Ahuja Cosío; luego en el extinto ABC de Tijuana, dirigido por los periodistas J. Jesús Blancornelas y Héctor Félix Miranda; después continuó en Semanario ZETA, donde en febrero de 2018 escribió su última publicación.
Sus primeras líneas informadas en La Semana iban dirigidas al entonces Presidente de la República, Luis Echeverría. A través de una carta, Vizcarra denunciaba el problema de la falta de agua en su llamado “Tecate bonito”, y expresaba la indignación por la complicidad de las autoridades para favorecer a una empresa cervecera en detrimento de la población del ahora Pueblo Mágico.
“Mi opinión no le pareció al entonces presidente municipal Arturo Guerra. No le gustó que denunciara lo del agua, que el servicio estaba restringido para la comunidad y en cambio la cervecera Tecate siempre tenía agua. El alcalde contestó a través de otra carta y fue como se dio un altercado de publicaciones. Así empecé a involucrarme con líderes de las colonias y los movimientos sociales que les afectaban. Luego comencé mi labor periodística colaborando en el periódico ABC y luego en Semanario ZETA, en la sección Opinionez”, rememoró Concepción Vizcarra de Arámburo.
Sin importar amenazas y hostigamientos, a través de sus escritos denunció el caso del Orfanato Fundación para Niños de Tecate, donde se perpetraban malos tratos y abusos sexuales a los menores; defendió a toda costa el Parque Los Encinos, inició distintas causas sociales y, con voz firme, exigió respuestas a temas sensibles para la comunidad.
“Mi esposo era muy temeroso, cuando estaba escribiendo me decía: ‘Concha, ten cuidado’, pero mi denuncia era darle voz a toda esa gente que confiaba en mí. Sólo una vez me siguieron, pero hasta ahí, no pasó nada”, comentó.
En el marco del 17 Festival de Octubre, realizado el sábado 6 en la Sala de Usos Múltiples del Centro Estatal de las Artes Tecate, se realizó la presentación del libro “Una sinaloense en la historia de Tecate”, compilación de los escritos de “Coty”; en el acto participaron el profesor Ernesto Parra y la codirectora de ZETA, Adela Navarro Bello.
“Este libro es una satisfacción. Ver lo escrito y publicado en ZETA es muy bonito. Agradezco a mi familia por estar siempre apoyándome”, expresó Vizcarra de Arámburo.
Por su parte, Ernesto Parra, cronista de El Fuerte, Sinaloa, señaló que hace aproximadamente cinco años conoció a doña Concepción a través de la maestra Yolanda Flores, quién le prestó la autobiografía de la arraigada en Tecate, cuyos relatos llamaron su atención.
“A la maestra le pedí que la contactara, luego hice una visita a Tecate para conocerla, volví a la ciudad y le planteé a ella y su familia la necesidad de hacer una antología con sus escritos, además de los artículos periodísticos de otros temas. Me di a la tarea de escribir una crónica sobre la vida de doña Concepción y presentarla en un congreso de cronistas en su natal Sinaloa, donde gustó mucho, por lo que aproximadamente hace dos años, se concretó el libro”, describió Parra.
“Cabe destacar el significado del contenido. No es lectura para divertir, es para que el lector aprenda y analice el valor que tiene esta mujer para escribir todo lo que denunció, y más en los tiempos críticos que era muy rara la libertad de expresión”, complementó.
Por su parte, Adela Navarro, codirectora de ZETA, señaló que “doña Concepción nos ha dado tanto con sus escritos, pensamientos, no sólo de lo que sucede en Tecate, sino en Baja California y otras partes del mundo. Antes de que hubiera grupos de resistencia civil, ya estaba rebelándose, sin tomar un solo edificio, sólo con su voz crítica, exigiéndoles a las autoridades que gobernaran para las clases menos favorecidas. Defendió muchas causas sociales, hubo intentos de reprimirla, pero siguió adelante, defendiendo la libertad de expresión”.
Guillermo Arámburo Vizcarra, quinto hijo de la autora de “Agua de tus manantiales”, declaró que la compilación de su obra es un reconocimiento a la trayectoria de su progenitora.
“Como hijo siempre ha sido un ejemplo su disciplina, su tenacidad, su humanidad; recuerdo que siempre llegaban a casa personas desfavorecidas para contarle los problemas que enfrentaban, para luego escribir de esos temas que le planteaban, que muchos eran de injusticias y ella siempre, sin ser abogada, los apoyaba.
Y concluyó:
“Fue una madre muy trabajadora en tiempos donde no se acostumbraba que las mujeres se realizaran profesionalmente. Sus principios le vienen de sus padres, él era abogado y juez, con una ética muy en alto, y mi madre retomó eso: una mujer muy comprometida con lo que hacía, firme, prudente, sensible; para nosotros, un ejemplo muy grande”.