El huracán “Florence” se fortaleció este lunes a categoría 4 en el Atlántico, con vientos máximos sostenidos de hasta 209 kilómetros por hora (km/h) mientras se dirige a la costa este de Estados Unidos, donde se pronostica impacte en algún lugar de Carolina del Norte o Carolina del sur el jueves, informó hoy el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).
“Se anticipa que se fortalezca más y se espera que Florence sea un huracán de gran intensidad extremadamente peligroso de aquí al jueves”, informó el NHC, con sede en Miami. En la mañana del lunes, “Florence” se encontraba a 935 kilómetros al sureste de la isla de Bermuda y se desplazaba a 20 km/h hacia la frontera entre Carolina del Norte y Carolina del Sur.
Ambos estados declararon el estado de emergencia para acelerar los planes de contingencia. El despacho del gobernador de esta última entidad, Ralph Northam, lo calificó como “el huracán más significativo en décadas” para el dicha localidad y advirtió sobre la posibilidad de inundaciones, fuertes vientos y cortes de energía.
“La mayor amenaza de los huracanes no son los vientos fuertes, sino que las inundaciones son la consecuencia más mortífera de estas tormentas”, agregó la oficina del gobernador. Por su parte, la Marina estadounidense ordenó que todos sus barcos abandonaran el área de Hampton Roads, ante el paso del fenómeno meteorológico.
Asimismo, la oficina del gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, indicó que en la costa del estado hay fuertes marejadas, corrientes y oleaje. “Todos en Carolina del Norte deben mantenerse atentos a Florence y prepararse para su impacto más avanzada la semana”, señaló. Mientras que el mandatario de Carolina del Sur, Henry McMaster, aseguró que el ciclón es fuerte y tiene una trayectoria incierta.
“Se pronostica un fortalecimiento rápido, y se pronostica que Florence se convertirá en un huracán importante esta mañana, y se espera que siga siendo un huracán importante extremadamente peligroso hasta el jueves”, dijo el Centro Nacional de Huracanes.
“Hay un riesgo creciente de que Florence ponga en peligro la vida: oleadas de tormentas en la costa, inundaciones de agua dulce por un evento prolongado y excepcionalmente fuerte de lluvia hacia el interior y daños por los vientos huracanados”, abundó el NHC.
En tanto, la depresión tropical nueve se convirtió en la tormenta tropical “Isaac” el sábado por la tarde, dijo el Centro Nacional de Huracanes. Ayer domingo se encontraba a unos 2 mil 400 kilómetros de las islas más al este en el Caribe y durante este día podría transformarse en huracán.
Detrás de “Isaac” se encuentra “Helen”, que la tarde de ayer también subió a categoría de huracán, según informó el NHC en su reporte de las 17:00 horas. Dicho fenómeno meteorológico lleva vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora y se ubica a 230 kilómetros al suroeste de las islas más hacia el sur de Cabo Verde en África oriental.