La historia de Valeria y Richard conmueve, en un vaivén de emociones en el que por momentos pareciera que es tu propia vida la que se está contando en el escenario, entre detalles que conforman un universo de casualidades: dos almas que sin conocerse perciben el amor de la misma manera y por momentos, entre destellos del destino convergen en un mismo lugar sin tocarse.
Sin ser una comedia, el trabajo del tijuanense Adrián Vázquez está escrito con mucho sentido del humor, por ende divierte, entretiene, hace reír al público, pero también lo conmueve.
“Es una obra muy accesible, fácil de entender y la gente sale muy tocada del corazón”, expresaría en entrevista con ZETA Osvaldo Benavides, quien da vida a “Richard”, personaje que desde niño pasó por momentos difíciles con una madre que nunca lo quiso y un padre suicida.
Valeria y Richard nacen el mismo día, pero en diferente lugar, ella en el Golfo de México y él en la Costa del Pacífico. Sus vidas están llenas de situaciones divertidas, aunque marcadas por otras muy dolorosas. Cada uno cuenta su vida desde que tiene cinco años de edad, hasta el día en que ambos tras un terremoto quedan atrapados entre los escombros. Cuentan sus dolores, sus amores, sus encuentros, tropiezos.
Los pasajes van desde el sexo precoz, el cómo fueron concebidos, la muerte de sus seres más queridos y el rumbo de sus vidas adultas. Ella, una mujer de furia; él, un niño con premoniciones.
De la risa al silencio total, los suspiros de los espectadores denotan el impacto que causa escuchar cómo han sido sus vidas hasta el punto que el público descubre que ellos están hechos para estar juntos, “son dos almas destinadas a conocerse, en pocas palabras la obra es la historia del encuentro de estas dos almas que están destinadas a estar juntas”.
Con excelsas actuaciones de Silvia Navarro y Osvaldo Benavides “Donde los Mundos Colapsan” es una puesta en escena conmovedora y llena de matices que cumplió cabalmente con las expectativas de una audiencia que despidió a ambos actores de pie, entre efusivos aplausos en las dos funciones que ofrecieron en la Sala de Espectáculos del Centro Cultural Tijuana, las cuales lucieron llenas.