David Saúl Guakil dejó el Partido Revolucionario Institucional, luego que de manera reiterada lo dejaron sin candidatura cuando quiso serlo a la presidencia municipal de Tijuana. Después de ver a su partido derrotado de la mano de René Mendívil, mejor se salió de esas filas y se dedicó a hacer negocios en los bienes y raíces con sus hijos. Pero entonces llegó Movimiento Ciudadano y le ofrecieron la candidatura y lo que quisiera. En alianza con el PAN y con el Partido de la Revolución Democrática, se fue con la idea que era una fórmula ganadora y obtuvo su nominación. De hecho, doble nominación. Le dieron la candidatura por mayoría en el Distrito 8, pero ante el carro completo que se llevó Morena en la entidad, apenas logró convencer al 17 por ciento delos electores de esa demarcación. Aparte, fue anotado en la posición número tres de la lista a diputados plurinominal por el mismo partido. Total que la creencia era que si no entraba por una vía, lo haría por la otra. Pero nada. La bajísima votación nacional por Movimiento Ciudadano, no fue suficiente para que Guakil llegara a la Cámara de Diputados federal. Ni hablar, otra vez no le tocaba.
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