La luna de miel no puede ser eterna y, aunque el ganador de la pasada contienda electoral, formalmente no toma posesión como Presidente de la República, sigue acaparando la atención de los medios de comunicación. A cuenta gotas, el nuevo Rock Star va entregando información para ser digerida. Seguramente, los analistas de la política, sesudos como son, se están entreteniendo mucho con tan importantes exclusivas.
A las personas comunes y corrientes no deja de inquietarnos tales decisiones en las que el factor dinero es el más importante. No la decisión de un “gran triunfador”, “el que obtuvo mayor votación en toda la historia”. Eso ya es el pasado. Lo real, lo que tenemos ya como decisiones irrefutables: a) Varias secretarías de Estado se irán de la Ciudad de México. b) Por lo menos, el 70% de los empleados serán dados de baja, suponemos que los indemnizarán. c) Nombrará en cada Estado, una especie de vicegobernador, al quitar a todos los delegados de las distintas secretarías.
Por lógicas razonables, los dos primeros puntos han sido más que cuestionados por los gastos que requerirán y que en nada justificaría la inquietud de “detonar otras regiones del país”, como tal parece es lo que motiva esos cambios. Los de buena memoria citan como referencia que cuando las oficinas del Inegi fueron trasladadas a Aguascalientes, requirió seis mil millones de pesos y eso que solo se trataba de una dependencia, muy distinta a una Secretaría.
En la última reunión de la Conago estuvieron 30 gobernadores y le firmaron al presidente electo, un compromiso para ayudarlo a que cumpla “la cuarta transformación del país” -menos mal que ya no habla de la cuarta revolución. Nadie, absolutamente nadie comentó sobre la noticia de que “nombrará a un representante federal que manejará directamente los presupuestos”. Por eso, coloquialmente ya se les nombra vicegobernadores, encargados de concentrar el poder y el dinero.
¿Existirá un Plan Maestro o el llamado Plan Nacional de Desarrollo? ¿Estaremos a punto de vivir en un gobierno democrático o autoritario? El presidente electo ya determinó que algunos legisladores dejen su lugar a suplentes porque a ellos les tiene como destino, asuntos superiores. Imagínese, Olga Sánchez Cordero dejará a Jesusa Rodríguez, muy buena cómica. Al congreso llegarán cómicos, boxeadores, exguerrilleros, actores, cantantes, líderes sindicales muy cuestionados. Un nuevo congreso para la “cuarta transformación del país”.
Nota 1.- Orgullosa, Olga Sánchez Cordero informó a los mexicanos que su jefe la autorizó para que abra la discusión sobre despenalización de la droga (mariguana y amapola, especialmente). Médicos y psiquiatras, tienen mucho que decirnos. Los políticos de salud no saben mucho.
Nota 2.- El gobierno de Enrique Peña Nieto emitirá deuda (préstamo internacional) por 10 mil millones de dólares. Los expertos nos dicen que en 2012, EPN inició con el 33.8% del PIB y a finales del 2017, ya lo había subido al 48.2%.
Nota 3.- Es tiempo que los ciudadanos investiguemos cómo, quiénes y en qué se utiliza el dinero del Fortaseg (Fortalecimiento de la Seguridad, programa nacional). Tijuana en este año debe recibir más de 74.5 millones de pesos (Diario Oficial, lunes 16 de abril de 2018).
Luz Elena Picos es Directora de Red Social de Tijuana.
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