El Gobierno que Andrés Manuel López Obrador encabezará a partir de diciembre podría ajustar 6 mil 113 plazas de la alta burocracia de la estructura federal -funcionarios que perciben salarios que van de los 93 mil a los 211 mil pesos mensuales-, así como 246 mil 870 puestos de niveles medios a bajos, para aplicar el plan de austeridad que anunció, mismo que formalizará este fin de semana, informó el diario Reforma.
Estas plazas que se encuentran dentro de 18 secretarías de Estado, 102 subsecretarías, 105 oficialías mayores, 600 titulares de unidad, 2 mil 129 direcciones generales y 3 mil 159 direcciones generales adjuntas, representan un gasto por su sueldo bruto de 863 millones 570 mil 735 pesos mensuales, unos 10 mil 362 millones 848 mil pesos al año, sin contar otros ingresos adicionales que tiene dicha plantilla.
Además, el futuro Gobierno de López Obrador eliminará 70 por ciento de las 278 mil 293 plazas consideradas de confianza en todos los niveles de la administración pública federal. De éstas, sólo 25 mil 310 están inscritas en el Servicio Profesional de Carrera en plazas que van de enlaces hasta directores generales, por lo que cuentan con una protección que haría complicado su despido, indicó Reforma.
Según recordó el rotativo, las dependencias que concentran el mayor número de plazas de alta burocracia son la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con mil 636; y Presidencia, con 97 cargos de primer nivel; Gobernación (Segob), con 411; Relaciones Exteriores (SRE), con 399; Procuraduría General de la República (PGR), con 367; Medio Ambiente, con 334; además de Comunicaciones y Transportes (SCT), con 282.
Por otra parte, las 50 medidas contra la corrupción propuestas por López Obrador no contemplan cortar canonjías A gremios sindicales. Por ejemplo, la dirigencia del sindicato petrolero, que encabeza Carlos Romero Deschamps, recibe mensualmente de Petróleos Mexicanos (Pemex), 7 millones 865 mil pesos para gastos de sus oficinas y transporte de sus líderes, mientras que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), recibió de la Secretaría de Educación Pública (SEP), 650 millones de pesos para “difundir la reforma educativa”, sin embargo, no rinde cuentas de dicho gasto.
