México constantemente revive el momento “en que necesita de sus mejores ciudadanos”. Crisis tras crisis ha generado que los mexicanos reinventemos nuestro país una y otra vez, rescatándolo de quienes nos lo dejan en estado de emergencia.
Tras saqueos, errores gubernamentales, corrupción, ineficiencia y toda clase de agravios a la nación y a la población, la historia de algún modo se repite constantemente, estrellándose a los ciudadanos contra devaluaciones, inseguridad y otras lamentables consecuencias.
Pero, como hasta de las peores situaciones hay que buscar algo positivo, lo más rescatable de la historia de nuestra nación somos los mexicanos que queremos a nuestro país y que lo sacamos adelante por encima de todo lo que le hacen.
Si imaginariamente se usara un cernidor que se aplicara a todo lo largo y ancho de México a través de su historia, donde solo se quedara sobre él a quienes lo han sacado adelante, sobresaldrían tanto los héroes conocidos de los libros, como los ciudadanos “comunes y corrientes”, cuya anónima contribución, pero indispensable participación en la vida diaria, sostienes y mantienen al país en pie y caminando hacia adelante.
Dentro de esos mexicanos podemos encontrar a los ciudadanos ejemplares que hacen día a día su trabajo, pagan sus impuestos, se conducen con rectitud, transmiten valores a sus hijos, son responsables con sus actos y en consecuencia, tratan con respeto a los demás, tanto a sus conciudadanos como a las instituciones, ya sea públicas o privadas.
En contraste, hay quienes ni cumplen con lo que les toca, ni contribuyen prácticamente en ningún sentido, pero están prontos para denostar a todo lo que se mueva o exista, bastando simplemente advertir, el más ligero movimiento u opinión ajena para soltar un insulto, un ataque o buscar de alguna manera criticar en la forma más agresiva posible.
Con el país nuevamente en transición, atravesando por una situación complicada en los temas ya mencionados, resulta difícil mantener la ecuanimidad y una actitud asertiva, evitando caer en la “tentación” de sumarse a los críticos empedernidos, sin embargo, esos ciudadanos ejemplares son indispensables para que nos mantengamos por arriba del punto de equilibrio. No solamente se trata de ver el vaso medio lleno, en lugar de medio vacío. Se trata también de hacer todo lo que esté a nuestro alcance para que el vaso no se vacíe.
Por eso es importante apoyar las causas ciudadanas, porque su función es esencial e inclusive ponen la muestra a las autoridades y a la población de lo que debemos hacer.
Un muy buen ejemplo de ello es el Comité de Seguridad de Playas de Tijuana, el cual ha realizado un magnífico trabajo buscando mejorar su comunidad, y ante la falta de presupuesto para adquirir cámaras de videovigilancia, lejos de deshacerse en reclamos a las autoridades, lograron un acuerdo no escrito, pero efectivo, donde el gobierno hace lo que está a su alcance y los ciudadanos se organizan para complementarse en la misión de prevenir el delito con participación social.
Para que el asunto no quede solo en buenas intenciones, el mencionado Comité puso manos a la obra y se encuentra organizando una carrera atlética que se efectuará el 8 de julio del 2018, a las 7:00 am.; actividad que debemos apoyar por todas las razones del mundo.
Por una parte, porque cuando alguien hace algo positivo, debe ser respaldado, sobre todo porque es un ejemplo que debe ser impulsado y emulado, resultando además que participar en la carrera tiene múltiples atractivos que se pueden leer en la convocatoria disponible en la página de Facebook: “Carrera Pedestre Por La Seguridad, Playas De Tijuana”.
Todo es cuestión de contar con ciudadanos ejemplares.
Alberto Sandoval es Fundador de Alianza Civil, A.C., Presidente del COMOSC y Secretario del CEFAB. Correo: AlbertoSandoval@AlianzaCivil.Org Internet: www.AlianzaCivil.Org Facebook: Alberto Sandoval. Twitter: @AlSandoval