Demandan incrementos salariales mayores al tope fijado en 3.4% y demandan que a discreción del Director del CONACYT, algunos Centros Públicos de Investigación y sus directores han otorgado a sus trabajadores un bono de 11 mil y 5 mil pesos, “los demás hemos recibido un trato discriminatorio con ofrecimientos miserables y sólo para una parte de personal”.
Los sindicatos de trabajadores del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica, del Colegio de la Frontera Norte, del Centro de Investigación Científica y Estudios Superiores de Ensenada y del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social mantienen su emplazamiento a huelga para el 16 de mayo, al igual que el sindicato de Investigadores del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias.
SUTCICESE, SIPCOLEF, SUTCIESAS, SUTINAOE y SIIINIFAP continúan así sus procesos de revisión contractual demandando incrementos salariales mayores al tope fijado en 3.4%, así como otras prestaciones, difundió el segundo en un comunicado de prensa.
En esta lucha, que se ha desarrollado ya desde hace tiempo, participan también los trabajadores del Colegio de la Frontera Sur, el Centro de Investigaciones Biológicas del Noreste, el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo y del propio CONACyT, según el boletín.
El 1 de mayo estos sindicatos participaron en las actividades con motivo del Día Internacional de los Trabajadores, defendiendo su salario y la investigación científica en México. En días pasados se realizó una reunión con el Subsecretario de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, quien ofreció interceder ante los directores de los centros de investigación, a fin de que se resuelvan las demandas de los trabajadores sin llegar a conflictos innecesarios.
A discreción del Director del CONACYT, asegura el SIPCOLEF, algunos Centros Públicos de Investigación y sus directores han otorgado a sus trabajadores un bono de 11 mil y 5 mil pesos, “los demás hemos recibido un trato discriminatorio con ofrecimientos miserables y sólo para una parte de personal”.
Incluso, el pasado 4 de abril se realizó un mitin frente a las instalaciones del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) –entidad de la que dependen dichas instituciones de investigación- con la finalidad de solicitar a las autoridades del mismo su intervención para llegar a acuerdos.
La respuesta sigue siendo una cerrazón y se insiste en imponer un tope salarial de 3.4%, que ni de lejos cubre siquiera los efectos de la inflación del año pasado sobre los ingresos de los trabajadores, es claro que este incremento es el más bajo que se ha propuesto en mucho tiempo.
Además de la insuficiencia salarial, escasea el personal para las actividades que se deben realizar en los CPI’s, lo mismo de investigadores que de apoyo técnico y administrativo. En la mayoría de los casos, cuando alguno de ellos sale del trabajo, ya sea por jubilación, por deceso o porque ya no lo contraten, se pierde su plaza pues las administraciones no contratan quien los reemplace, y con frecuencia usan los recursos liberados para fines distintos a los de la investigación. Algo muy diferente sucede cuando la vacante es de confianza, ya que esos puestos se cubren de inmediato y no es raro que sean creadas más plazas de este tipo aunque no aporten nada al trabajo sustantivo de la institución, asegura el documento.
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