Han pasado más de diez días desde que familias en la Colonia Loma Obrera en el Municipio de La Paz se vieron afectadas por un incendio que provocó una quema de cableado, y que generó daños en sus viviendas, y aunque los números de un inicio indicaban se trataban de ocho familias, finalmente fueron cinco las que sufrieron mayores daños en su vivienda, daños de los que no han podido recuperarse y de acuerdo al ritmo de la situación no pareciera podrían hacerlo pronto.
María, Lucrecia y Marlene, son tres madres de familias que se vieron afectadas, madres que han tenido que pasar estos más de diez días en espera de que las cosas mejoren, recogiendo escombros y a ratos sentadas bajo un árbol con unas sillas que les fueron donadas, preparando sándwich o ensaladas de atún porque hasta ahora es a lo único que tienen alcance.
Y aunque en los primeros días la ayuda solidaria de los paceños le dio respaldo y los benefició con ropa y alimento, la verdad es que estas familias siguen en espera de otros apoyos, mismos que fueron prometidos tras el paso de los hechos y hasta ahora no les han hecho llegar.
“Pues han venido personas para ayudarnos, a querer ayudarnos y digo querer porque ahorita nada más están en el quieren porque no llega nada, cuando pasó esta tragedia nomás nos dijeron que ya vienen y hasta ahorita no, nada nos han traído, nos iban a traer bloque, arena, cemento, todo lo que es para levantar una casita pero pues nomás hasta ahí quedó”, comentó María Cristina López, afectada del incendio.
María Cristina es el pilar del primer hogar, en el que perdieron todo su patrimonio, quien asegura ahora solo les queda ver el tiempo pasar mientras su esposo hace labores de limpieza y se prepara para una próxima construcción.
“Solo nos queda ver el tiempo pasar, esperando ayuda, apenas nos trajeron unas maderas pero no es suficiente hay mucho trabajo que se tiene que hacer, lo bueno es que alguien también fue bueno y nos hizo llegar una máquina que se llevó las cenizas de lo que era mi casa”, explicó María Cristina.
Por su parte la titular del Instituto de la Vivienda (INVI) en Baja California Sur, Rosalba Cuadras López hizo del conocimiento se le brindó una ayuda inmediata que consta de maderas, láminas y un tinaco.
Pero María Cristina no es la única mujer y ama de casa afectada, Marlene también es la mujer de otro hogar que sufrió pérdidas, y aunque de inicio parecía que la afectación no habría sido tanta, la verdad es que después de una semana, autoridades constataron que su casa ya era inhabitable.
“Nos dijeron que nuestra casa tiene que ser demolida y pues ahora si necesitamos el apoyo con máquinas para tumbar y demoler todo, ya no podemos vivir en ella, ya las paredes y el techo no sirven y pondrían en riesgo a mí, mi esposo y mis niñas que están chiquitas, tenemos que demolerla para que después nos ayude a construir un cuarto”, explicó Marlene Castillo, afectada.
Estos diez días para Marlene, al igual que sus vecinas han sido complicados, particularmente en su caso, Marlene es mamá de dos niñas menores a los 5 años, pequeñas que exigen comida, leche, jugar sin saber cuál es la situación por la que actualmente pasan sus padres.
“La situación está muy fea y no sé, no puedo explicarla es complicado porque mis niñas lloran, me piden de comer y es algo que no le puedo dar porque no tengo donde hacer, pero tampoco se los puedo explicar porque están muy chiquitas, yo solo quiero que esto ya pase”, comentó Marlene Castillo.
De acuerdo a la información del Instituto de Vivienda (INVI) no se tiene el dato preciso de cuándo se podrían tener los cuartos para las familias porque antes de iniciar la construcción se deben llevar otros protocolos que les compete hacer a los afectados.
“Hicimos la visita a fin de determinar el siguiente apoyo que se requiera de la construcción de un cuarto de material que les permitiera a estas familias pues ya contar con un espacio seguro donde puedan estar habitando y de donde puedan volver a partir a volver a construir su patrimonio familiar, consideramos que son tres los cuartos que realizaremos completos, las otras dos casas de las otras dos familias son áreas que no fueron afectadas en su totalidad que requieren algún tipo de apoyo para mantenimiento más que nada y vamos a ver qué es lo que se requiere más que nada, pintura o yeso en algunos casos a fin de que ellos lo puedan rehabilitar, sin embargo nosotros estamos sujetos a que las familias procedan hacer su trabajo de demolición y acondicionamiento del terreno donde nosotros empezaremos a construir”, refirió Rosalba Cuadras López, Directora del INVI en Baja California Sur.
Por lo que el siguiente paso por parte de las familias afectadas será demoler lo que queda de dos viviendas y habilitar el terreno a fin de poder conseguir apoyo para iniciar de cero.
