Quince personas fueron amenazadas de muerte en seis días, integrantes del crimen organizado anuncian públicamente en mantas, homicidios que cometerán y los llevan a cabo. Autoridades del Grupo Coordinación ignoran el material de los narcomensajes, información que en el anterior sexenio era investigada para dar seguimiento a la pugna delictiva y a los integrantes de los cárteles
A Roberto Ruiz Palomares “El Moco”, lo amenazaron de muerte a través de un narcomensaje el 1 de marzo de 2018. El día 7 lo asesinaron a balazos en la colonia Villafontana en Tijuana.
Entre el 28 de febrero y el 6 de marzo de 2018, fueron públicos cuatro mensajes en diferentes escenas del crimen, donde se advertía que asesinarían a 12 hombres y tres mujeres presuntamente dedicados a la venta de droga en las delegaciones La Presa y Cerro Colorado. De esa lista, Ruiz Palomares fue el primero en caer.
Pero ni en el gobierno de Baja California ni en las representaciones federales, los narcomensajes son analizados para desencadenar investigaciones. La norma es “dejar que se exterminen entre ellos”.
Las narcomantas se han convertido -por la frecuencia en la que aparecen colgadas- en parte del paisaje del crimen en la localidad, y en letra muerta para los investigadores, pese a que se trata de “amenazas entre bandas” de criminales que delinquen en la ciudad, como ha mencionado el subprocurador de Investigaciones Especiales, José María González Martínez. Sin embargo, no son analizadas para aplicar la información en el combate a las células criminales.
Ni siquiera cuando ha habido detenidos se ha realizado investigación. El 27 de agosto de 2017, un hombre fue capturado y dos huyeron mientras intentaban colgar una manta de amenaza del narcos en el fraccionamiento Durango. El 13 de septiembre del mismo año, dos hombres fueron aprehendidos en posesión de armas y una cartulina con amenazas entre delincuentes en Villa Floresta; y en un comunicado, la Policía Municipal informó que en fechas recientes, ocho personas habían sido capturadas por elementos de esa corporación, trasladando o colgando letreros con leyendas criminales. En ninguno de los casos hubo seguimiento ni para conocer de los liderazgos criminales que amenazan públicamente, ni de los asesinos que ejecutan tales premisas mortales.
31 CARPETAS EN INVESTIGACIÓN
“Cuando hay detenidos y los presentan, siempre declaran que ellos no saben de qué se trata, que les pagaron 100, 200 o 500 pesos por colgar la manta, casi siempre se trata de adictos, y trasladar este tipo de mensajes no es delito”, comentó de manera general el subprocurador de Zona Tijuana, licenciado Jorge Álvarez.
“En el mejor de los casos, de llegar a reunir elementos suficientes, las personas pueden ser acusadas del delito de amenazas, y eso se resuelve por acuerdo, pero incluso en el caso de que no haya arreglo ni perdón de la víctima -si remotamente desea ser localizada-, el victimario no alcanza cárcel”, agregó.
Álvarez asegura que sí hay expedientes de narco mantas, en los cuales realizan búsqueda de huellas dactilares y análisis grafoscópico, pero ninguno ha avanzado.
En 2017, en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en Tijuana inició 25 carpetas por este tipo de mensajes, 24 por amenazas y una por “provocar públicamente a cometer delito”; 23 siguen en investigación y dos están parcialmente concluidas, lo que significa que ya no hay más diligencias por hacer. En lo que va de 2018, han iniciado seis carpetas, cuatro por amenazas y dos por “hacer apología de un delito, todas están en investigación”.
El número de narcomensajes no investigados es mayor. Existe otro cúmulo de mantas y cartulinas que no se contabilizan porque son registradas solo como parte de la escena del crimen en homicidios, por ejemplo, el 12 de enero, cuando dejaron el cadáver de un hombre colgado boca abajo en el puente vehicular a la altura de la colonia Valle de San Pedro. En el pecho tenía pegado un letrero con la siguiente inscripción: “Tijuana es verde pura jente de Aquiles si no se quitan seguirá abiendo muertos trapera loca ya sabes quién soy”, en referencia al ex policía Jesús Alfonso Trapero Ibarra, de acuerdo a los investigadores, ligado a diversos cárteles, actualmente a Jalisco Nueva generación (CJNG).
Cuando Rommel Moreno fue procurador del Estado (2007-2013), en el Grupo Coordinación, entonces dirigido por el General Alfonso Duarte, designaron personal ministerial para crear un banco de datos de voces de criminales, obtenido de llamadas para cometer delitos o en capturas previo a liberaciones, además de estudios grafoscópicos en mensajes dejados públicamente por criminales en escenas del crimen o secuestros.
Los reducidos bancos de datos se usaron básicamente en el combate el secuestro y la extorsión, sin embargo, la actual administración estatal no maduró el proyecto y la procuradora Perla Ibarra tampoco continuó con la estrategia de investigación.
También en el sexenio anterior, las áreas de inteligencia de las corporaciones operativas investigaban la veracidad del contenido de estos mensajes con la finalidad de dar seguimiento a los movimientos y adiciones de los organigramas de las células delictivas a los que perseguían, prácticas que concluyeron con el anterior sexenio, en 2013.
SE LA CUMPLIERON
Roberto Ruiz Palomares cumplió 21 años el 21 de febrero, enjuto, vestía ropa de una talla mayor a la suya, moreno, trompudo, narigón, orejón, cabello a rape, tatuajes de mala calidad en la parte trasera del cuello y la mano izquierda. Le apodaban “El Moco” o “El Ratón”. El 7 de marzo su cadáver quedó tendido bocabajo en una de las calles de la delegación La Presa.
Ruiz Palomares es uno de los protagonistas del narcomensaje que la Policía encontró pegado al portón de una casa de la calle Mármol de la colonia Guaycura, a las once de la noche del jueves 1 de marzo, en el cual amenazaron: “Apenas vamos empezando con la lista negra sigues tú betito, Cars, flers, snower (Arturo) grenblis (José) fabiola, kiki, leer, gato, Ana, fémur, Beto reyes y el moco. También tu chino de la nota!! Todos son verdes todos son contrarios todos son o aquiles!! Atte: CTNG/COMANDO LA MANCHA”.
Un día antes, sicarios habían asesinado a cuatro hombres y una mujer en la misma calle. En la escena del crimen dejaron otro mensaje: “Sigan ladrando par de hermanitos (Akiles y Rana) les vamos a partir en su madre a todo aquel puto que trabaje para ustedes mugrosos ahí esta tu gente, sigues tu (betito) y tu pinche kars atte. Ctng la klika del parche vienes por ustedes jajajajaja.
Según testigos, el cadáver de Ruiz fue tirado desde un auto BMW Mini Cooper en movimiento. “A las 11:32 reporta la central cuerpo sin vida masculino, lesiones contusas quien fue arrojado de vehículo Mini Cooper rojo en movimiento, ubicado en calle Vizcaya esquina con Paseo Villa Fontana de la colonia Villa Fontana 1ra sección desconocido de entre 30 y 35 años”, se lee en el reporte oficial.
Las autoridades le dieron seguimiento porque menos de media hora después, el conductor del Mini Cooper, Alejandro López Camacho, llegó con el parabrisas baleado y heridas menores a la Cruz Roja en la colonia Santos. Refirió que vende pizzas, que conocía a “El Moco” de la calle, que andaba buscando una mina de gas para su negocio y se detuvo a preguntarle si sabía dónde conseguir una, Ruiz Palomares respondió afirmativamente y se subió al auto para guiarlo. Cuando eso sucedió, les dispararon y el dueño y conductor del carro pisó el acelerador para huir de la balacera. Aseguró que metros adelante su copiloto le pidió que lo dejara bajar, lo hizo y no supo más.
Sin embargo, existe la versión de un testigo que, afirmó, López y “El Moco” estuvieron en la colonia preguntando quién vendía droga, tratando de ubicar puntos de venta rivales, y fue cuando les dispararon.
MÁS SENTENCIADOS A MUERTE POR EL NARCO
Del listado de presuntos narcomenudistas amenazados, 13 aún con vida, están ligados al Cártel de Sinaloa, y dos a la alianza Cártel Arellano Félix-Cártel Jalisco Nueva Generación. De acuerdo a las investigaciones, todos se conocen entre sí.
Investigadores detallaron que las 12 personas amenazadas junto con “El Moco” forman parte de una célula que había vendido droga para Sinaloa, y a la llegada de Jalisco, se aliaron con ellos, por lo que ahora sus ex compañeros criminales los amenazan, pues se dedican a identificar y ubicar a los vendedores del CJNG para asesinarlos.
De los doce amenazados, elementos del grupo coordinación solo tienen identificados a tres:
Alberto Cuevas “El Betito”. 22 años, reside en Pórticos de El Lago y con antecedentes por allanamiento de morada, daños y robo a comercio, y robo con violencia a cuentahabiente.
Antonio González “El Gremlin”. 22 años, de Pórticos del Lago y Ampliación Guaycura, con antecedentes por robo a comercio y delitos contra la salud. Dos detenciones, una por robo a comercio, y tres más en 2017 por robo de vehículo, robo con violencia y delitos contra la salud.
Fabiola Morales. 32 años, habitante del Guaycura. Fue atacada y herida a balazos el 20 de agosto de 2017 en la misma calle Mármol, cuando un hombre fue acribillado y otra mujer resultó herida. Mariano Navarro Guzmán fue detenido por el ataque.
En respuesta criminal a la amenaza firmada presuntamente por los delincuentes de la alianza CAF-CJNG, el 4 de marzo, en la colonia Sánchez Taboada, dejaron otro recado criminal, también amenazaron a policías, pero no mencionaron nombres:
“(Mario Delval Alvarez) alias el Toni chaparrito “CTNG” Rubén Manuel Ríos Hernández alias el niño “CTNG” esto también es para la bola de mugrosos del “CTNG” esto es para que sepan que estos dos delincuentes se encargaron de matar a gente inocente como la masacre de El Florido en las maquinitas a niños y mucha gente inocente más, de la cual todos nos emos dado cuenta no saben trabajar pinche bola de mugrosos que quieren venir a controlar esta ciudad cobrando plaza a gente que tienen sus negocios y poniendo a gente a vender drogas a la fuerza amenazando a sus familias.. valen verga culeros son una bola de corrientes que se van a morir como toda esa gente traicionera y siguen ustedes 2 par de lacras para que se mueran les falta poco pinches culones y también ba para policías municipales de la delegación los Pinos.. Presa… Presa rural… que se le está pegando lo corriente por andar entregando a la gente al “CTNG” ya los tenemos ubicados perros atte CDS atte Luis Alberto García Meza alias “El Guicho”.
De esa amenaza, investigadores solo tienen identificado a Mario Delval, pero apellido De Barocio, no Álvarez, tiene 30 años y fue detenido en compañía de su hermano Raymundo y dos hombres más en la Tercera Etapa del Río Tijuana por narcomenudeo.
Del supuesto firmante, Alberto García, de 28 años, en 2014 fue detenido por delitos contra la salud, en 2015 por posesión de arma de fuego y 52 dosis de cristal; pero regresó a las calles en enero de 2017.
PEP ATACADO
En medio de los ataques entre bandas de narcomenudistas, Joel Gómez Vilchis, policía estatal preventivo, fue baleado el domingo 11 de marzo. En un comunicado de la Secretaria de Seguridad Pública del Estado, informaron que a las 9:58 pm, el oficial, vestido de civil, “… se dirigía en su vehículo particular hacia la comandancia de la corporación, donde al llegar al Bulevar Fundadores, en la colonia Obrera, se le emparejó una camioneta Trail Blazer de color blanco, desde la cual el conductor realizó diversas detonaciones de arma fuego”.
La víctima dio la alerta y abandonó la escena. Los peritos solo encontraron un cartucho percutido, no hubo ni lesiones ni daños en propiedad; dos horas y media después, encontraron la camioneta con placas extranjeras “… sobre el Bulevar Rosas Magallón, en la colonia Panamericano”. Encontraron a una persona y dos armas, una de ellas con coincidencia balística en el ataque al oficial.
Al detenido, Héctor Gerardo Valenzuela Ibáñez “El Cripto”, lo ubicaron en el organigrama criminal del Cártel de Sinaloa, en la célula de Iván Leonardo Peña Peralta “El Turbo” y/o “Arcángel”.
Valenzuela, de 23 años, fue detenido por grafiti en 2007; dos años después, por robo a comercio, daño en propiedad ajena y robo violento; en 2016, por actos de vicio y que inducen al vicio, y apenas el año pasado, por posesión de arma de fuego y robo a transeúnte.
Pese a que el agente Gómez ha sido mencionado en denuncias internas como parte de un grupo de agentes de la PEP dedicados al “baje de droga” -sin que medie investigación-, el ataque fue clasificado como un incidente circunstancial.
Ante el Ministerio Público, “El Cripto” aseguró que cuando disparó no sabía que el objetivo era policía, expuso que el auto se le acercó demasiado y creyó que era gente de “Los Monitos” Toscano del Cártel Arellano Félix, o de Sergio Lucatero Ortega “El Pijamas”, a quienes señaló como sus contras. Y ahí concluyó la investigación.
Hostigado por estar en la posada equivocada, Cárdenas González aclara: no pertenece al crimen organizado
En 2012 y hasta hace algunas semanas, Carlos Felipe Cárdenas González, junto con familiares y su esposa, manejaba un centro de distribución de cervezas en la colonia Sánchez Taboada. Unos clientes le compraron hartas bebidas para la celebración de una posada. Él y otros vecinos del lugar decidieron acudir al festejo decembrino.
Así se encontraron en el momento equivocado, con las personas equivocadas. Aquella noche del 23 de diciembre, la Policía Estatal Preventiva hizo una redada y detuvo a siete personas. Entre ellos a Cárdenas González, quien sin culpa, pasó más de dos meses en prisión. Finalmente, sin elementos para procesarlo salió libre en febrero. Pero desde entonces, su nombre ha sido ubicado en un organigrama delictivo por parte de autoridades estatales y federales. Lo ubican -presume que desde aquella detención- como un miembro del narcotráfico y el crimen organizado. Durante seis años ha sido hostigado con eso. En una ocasión incluso fue agredido a balazos delante de su familia, por lo que se consideran fueron “células contrarias” a la que se supone, él pertenece.
En la penúltima edición de ZETA, un reporte de un grupo de investigación binacional, con agentes de México y Estados Unidos, lo ubicaron de nueva cuenta en el crimen organizado, lo que le ha valido represalias por parte de sus proveedores.
En compañía de su esposa, Carlos Felipe Cárdenas González, a quien ubican como “El Pinpón”, acudió a las instalaciones de este Semanario para aclarar el tema, señalar y probar que no tiene ligas ni relación con células del narcotráfico o del crimen organizado. Que no es ni narcomenudista, ni distribuidor de drogas. Que desde hace ocho años se ha dedicado a la venta de cerveza con una franquicia de una cervecera nacional.
Aparte, la pareja denunció ser víctima también de malos policías, quienes sabiendo que aparece en una lista, se apersonan en su hogar o negocio para hostigarlos. De hecho, la esposa de Cárdenas denunció a elementos de la PEP cuando la golpearon en una de esas ocasiones. Desde entonces ya no se han acercado a molestarlos, pero con la publicación del reporte binacional donde de nueva cuenta aparece su esposo en un organigrama criminal al que no pertenece, ven venir otra andanada de hostigamientos. Por ello acudieron a esta casa editorial y aclarar su situación.
En el reporte binacional, Carlos Felipe Cárdenas González aparece con dos alias: Juan Carlos Aguilar Campos y/o Daniel Moreno Valenzuela. Sobre el caso, Cárdenas informó que esas dos personas existen. Que son sus vecinos, uno es maestro y el otro trabaja en la construcción en la Unión Americana, y que ninguno de los tres ha tenido problemas con autoridades de aquel país o las locales. De hecho aceptó que cuando lo detuvieron, le otorgaron una carta de liberación, al no haber delito que perseguir.
Ahora Carlos Felipe espera acudir con las autoridades, estatales y federales, para buscar ser eliminado del organigrama de criminales, pues lo único que desea es reconstruir su negocio y seguir viviendo del comercio en Tijuana, al lado de su esposa.
Hijo de Osiel, reaprehendido en EU
Por segunda ocasión fue detenido en Estados Unidos, Osiel Cárdenas Jr., hijo del ex líder del Cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, luego de que policías de Brownsville, Texas, atendieron un reporte de la presencia de un sujeto armado en un bar de la localidad.
Los hechos se registraron el martes 13 de marzo en el bar Sky, donde el joven tamaulipeco de 23 años de edad -al parecer intoxicado- se ostentó como agente federal y amagó a diversas personas con un arma de fuego.
Los policías sometieron al muchacho y le trasladaron a la correccional fronteriza, donde un fiscal le imputó el delito de posesión ilegal de arma de fuego y falsa declaración. Un juez federal le negó la libertad bajo fianza, al contar con antecedentes penales e incumplimiento de la libertad condicional de la que gozaba.
Osiel Cárdenas hijo ya estuvo preso hace casi tres años, cuando autoridades estadounidenses le detuvieron en 2015 por tráfico de proyectiles para armas de fuego. En aquel entonces, el joven circulaba en un automotor cargado con más de 700 balas de diversos calibres. Su objetivo era llevar las municiones a Matamoros, Tamaulipas.
El heredero de Cárdenas Guillén fue condenado por una Corte texana a una pena de diez meses de prisión y tres años de libertad condicional, sentencia que violó al incurrir en la presunta comisión de un nuevo delito.
Según la legislación aplicable en Brownsville, Cárdenas Jr. podría permanecer en la cárcel durante tres años bajo cargos federales, hasta que se lleve a cabo su juicio.
Sobrino del “Mencho” operaba para rivales
La detención de Jordy Axel Villa Patricio “El Jordy” o “El H”, sobrino del narcotraficante Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), derivó los días 13 y 14 de marzo en narcobloqueos registrados en la zona de Tierra Caliente, en Michoacán.
El joven de 18 años de edad, jefe de plaza de la organización delictiva Los Viagras, fue capturado tras una incursión de las Fuerzas Armadas en Vicente Guerrero, municipio de Buenavista.
“El Jordy” nació el 1 de noviembre de 1999 en Pinzándaro, Michoacán, hijo de Adrián Mendoza Oseguera y Nora Elia Villa Patricio, de quien lleva ambos apellidos. Según los antecedentes policiales, se inició en la vida delictiva a muy corta edad.
A los 14 años habría participado en un doble homicidio y a partir de entonces interactuó con criminales pertenecientes a Los Viagras, cuyo líder, Nicolás Sierra Santana “El Gordo Viagra”, le tendió la mano para que se desempeñara como “halcón”, guardaespaldas y sicario. Jordy Axel escaló posiciones y fue designado cabecilla del grupo delictivo en la plaza de Pinzándaro y posteriormente se ocupó de tareas cercanas a la cúpula del cártel.
Luego de la detención de Villa Patricio, hombres armados quemaron vehículos y bloquearon diversos puntos carreteros. Las acciones iniciaron cuando siete automotores fueron incendiados para tapar los accesos vehiculares en los municipios de Múgica, Parácuaro y Apatzingán.
Los bloqueos fueron reportados sobre la carretera Cuatro Caminos-Apatzingán, a la altura del crucero a Lázaro Cárdenas, en calles y avenidas de Apatzingán, y sobre la Autopista Siglo 21, entre Taretan y Santa Casilda.
El procurador michoacano José Martín Godoy Castro informó que en total fueron incendiados 22 vehículos principalmente de carga y transporte de pasajeros, y que producto de los operativos para restaurar la paz, fueron detenidas 18 personas presuntamente relacionadas con los narcobloqueos.
A los aprehendidos les fueron aseguradas bombas incendiarias, un bote con gasolina, dos armas de fuego, un cargador, cartuchos útiles y ocho automotores con reporte de robo.
Mientras que al “Jordy” lo consignaron ante un juez por los delitos de narcomenudeo, posesión de armas de fuego, así como por los homicidios que le imputan. A los presuntos bloqueadores de caminos les fue ejercitada acción penal por el delito de sabotaje.
Crímenes en Tijuana llegan a 438 en 2018
La estadística de homicidios dolosos en Tijuana cada día se engrosa más; hasta la mañana del jueves 15 de marzo, 438 personas habían sido privadas de la vida, la mayoría por arma de fuego, en distintos hechos.
En lo que va de marzo se han registrado 79 homicidios dolosos. Entre los sucesos violentos de los últimos siete días destacan:
Domingo 11 de marzo. El cadáver de una mujer, de entre 25 y 30 años de edad, con un surco en el cuello y envuelta en una cobija color azul, fue localizado al interior de un vehículo color verde con placas de California en la colonia Cuauhtémoc. En el Hospital General, un desconocido de entre 40 y 45 años murió por lesiones de arma de fuego que le fueron propinadas un día antes en la colonia Alemán.
Lunes 12. Elva Ivette Cipret Padilla, de 37 años, fue asesinada por arma de fuego en un domicilio en la colonia Salvatierra. Javier Alvarado García, de 40 años, fue privado de la vida a balazos en El Florido primera sección. En el Campestre Murúa fue ultimado a tiros un sujeto de entre 30 y 35 años. En la colonia Francisco Zarco una mujer, de entre 25 y 30 años, fue estrangulada y su cadáver abandonado en la vía pública. César Rodrigo Gómez Flores, de 35 años, fue asesinado en el Bulevar 2000, a la altura de Puerta Plata.
Martes 13. Alejandro Hernández Sánchez, de 43 años, fue asesinado en Cañadas del Florido 2. En Natura se localizó un cuerpo calcinado al interior de un vehículo quemado; el sexo y edad de la víctima no han sido revelados.
Miércoles 14. Raúl Enrique Vizcarra Miranda, de 34 años, fue asesinado a balazos cuando se encontraba en Cañadas del Florido 2. Un desconocido de entre 40 y 45 años fue ultimado en la vía pública en Terrazas del Valle segunda sección. Un hombre de aproximadamente 30 años, fue ejecutado a tiros en un picadero en la colonia Castro. En Valle Verde fue privado de la vida un sujeto de entre 25 y 30 años. Ángel Sandoval, de 20 años, fue acribillado con arma de fuego en la colonia Urbi Villa del Prado 2.
Jueves 15. En el fraccionamiento Las Delicias 2, un desconocido de entre 20 y 25 años murió de manera violenta. En el Ejido Matamoros, un joven no identificado, fue privado de la vida a tiros. Un masculino de alrededor de 20 años quedó en las calles de la colonia Colinas de la Cruz; en la escena del crimen había por lo menos diez casquillos percutidos.
De acuerdo a estadísticas proporcionadas por la Procuraduría General de Justicia del Estado, en el periodo del 1 de enero hasta el jueves 15 de marzo, se han cometido 562 homicidios en Baja California