Un mesero del bar Kitchen&Drinks, ubicado en el bulevar Costero de la zona turística de Ensenada, fue vinculado a proceso por su presunta participación en el homicidio calificado de Ana Luisa Díaz Cristino, de 35 años de edad, el domingo 27 de octubre del 2017 dentro del bar.
Emilio Lara Medina, de 36 años de edad, fue llevado a audiencia bajo la causa penal 102/2017 a cargo del Juez de Control Ernesto Flores Gallegos, quien consideró que existen las pruebas necesarias para la vinculación por homicidio calificado con ventaja.
La autopsia reveló que la causa del deceso fue por asfixia por estrangulamiento.
El Ministerio Público narró lo hechos donde el testimonio de empleados del negocio así como imágenes de las cámaras de seguridad fueron piezas clave para el caso.
La primera testigo fue la amiga de Ana Luisa, con quien esa noche se puso de acuerdo para visitar el bar donde eran “clientes frecuentes”. La hoy occisa subió a fumar a la terraza y ya no regresó a la mesa.
El supervisor de meseros se dio cuenta que las mesas del segundo piso, que le correspondían a Emilio, estaban descuidadas por lo que lo mandó buscar para llamarle la atención.
Un compañero, sabía que Emilio era adicto al cristal por lo que lo buscó en los sanitarios, pero al intentar abrir la puerta del baño, en el interior alcanzó a verlo hincado con ropa negra, al tiempo que éste volvía a cerrar la puerta. “Ahí voy”, gritó Emilio.
Momentos después el supervisor declaró que lo vio bajar con la ropa y la cara mojada como lo hacen las personas que no se quieren dormir, le pidió que se fuera a su casa pero Emilio insistió en terminar la jornada de trabajo.
Las cámaras de seguridad alcanzaron a detectar cuando Emilio y Ana Luisa tienen un encuentro casual en el segundo piso, acto seguido él la toma por la fuerza y la mete al baño.
Después se puede ver que saca el cuerpo inerte del baño y lo llevo por los cabellos hacía la parte de atrás de una barra donde posteriormente lo mete en un tambo de basura, mismo que conduce a la planta baja.
En una inspección de agentes ministeriales encontraron en el lavamanos del baño un encendedor azul, a lado del sanitario una funda de celular con impresos de “Hello Kitty”, una bota negra y un collar color naranja que coincidía con los accesorios que llevaba el cadáver encontrado en el tambo de basura.
El esposo de Ana Luisa interpuso la denuncia y declaró que tienen tres hijos menores de edad, además de un varón de 17 años que ella procreó con otro matrimonio. La describió como una mujer alegre, no consumía drogas y gozaba de buena salud.
Medina fue detenido el mismo día, al amanecer, por apuñalar a Blanca Marlene Martínez Pérez, de 26 años de edad, en la habitación 14 del motel Pacífico en la zona Centro; la mujer murió desangrada en el trayecto hacía el hospital. En este asunto fue vinculado el 4 de noviembre y por ambos casos se le considera inocente hasta que no se demuestre lo contrario.
A pesar de que no se ha determinado el motivo del ataque, amigos de la víctima piden que se catalogue como feminicidio y el abogado defensor privado consideró que puede realizar un juicio abreviado.