Tres agentes de la Policía Ministerial del Estado en Ensenada son indagados por la Visitaduría (Asuntos Internos) de la PGJE, luego de participar, la madrugada del lunes 12 de febrero, en la balacera que acabó con la vida de Agustín Raúl Ramírez Angulo; otros dos jóvenes resultaron lesionados
“11-23, 11-23, ¡no disparen!”, fue la orden que por radiofrecuencia recibieron policías municipales de Ensenada la madrugada del lunes 12 de febrero, tras una persecución de auto en fuga, a lo largo de media ciudad; el accidentado recorrido se dio desde la zona turística hasta la calle Esteban Cantú, en Maneadero, donde Agustín Raúl Ramírez Angulo, de 21 años de edad, cayó muerto por herida de arma de fuego.
El mismo lunes, la Subprocuraduría de Zona, a cargo de Norma Alicia Vázquez, emitió la versión oficial en un escueto boletín en el que reportaron:
A las cuatro de la mañana, en calle Segunda de la Zona Centro, “Policías Ministeriales a bordo de una unidad pick up en apoyo a oficiales de la Dirección de Seguridad Pública Municipal se sumaron a la persecución de una camioneta GMC línea Jimmy”, color blanco, con placas de la yarda Autos El Piloto.
“En calle Esteban Cantú en la delegación Maneadero, los tripulantes detuvieron su marcha y realizaron detonaciones de arma de fuego, agresión que los servidores públicos repelieron con sus armas de cargo, resultado dos hombres lesionados y uno fallecido cuya identidad se investiga”, se lee en el documento, pero no precisan si los “servidores públicos” eran agentes ministeriales o municipales.
Sin embargo, amigos y conocidos de la familia del joven Ramírez, así como policías municipales consultados por ZETA, aseguraron que no hubo agresión a balazos por parte de los jóvenes, como aseguraron desde la Procuraduría General de Justicia del Estado. Refirieron que ninguno de los dos hombres lesionados, ni el muerto, portaban armas, y que los dos jóvenes heridos tampoco han sido procesados por supuestos disparos contra los agentes de la fiscalía.
Desde la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Ensenada, relataron que la persecución terminó de manera abrupta cuando la camioneta de los muchachos se detuvo y un agente ministerial femenino descendió de la patrulla con placas AP-14-464, desenfundó el arma y comenzó a disparar contra el vehículo y sus ocupantes.
En el lugar falleció Ramírez Angulo, conocido entre los habitantes de Maneadero como “Negrito” o “Vaquero”.
Dos hombres más fueron lesionados y trasladados al Hospital General por paramédicos de la Cruz Roja. Y otro par de ocupantes del automóvil, logró salir corriendo del sitio, según las mismas versiones.
Vecinos de la zona donde ocurrió la balacera, muy cerca de donde vivía Ramírez Angulo, se limitaron a decir que el occiso no se dedicaba a actividades ilícitas, mientras que aseguraron desconocer las identidades tanto de los lesionados o quienes evitaron el ataque.
PLEITO Y HUIDA DE UN BAR
Los testimonios de las autoridades coinciden en que esa madrugada, los jóvenes tuvieron un altercado con guardias de seguridad en el estacionamiento de Plaza Pueblo Antiguo, después que intentaron ingresar a uno de los bares del centro y les negaron el acceso, ya que les acompañaba un menor de edad.
Luego del percance, al intentar huir de la plaza en la camioneta blanca, chocaron algunos carros e intentaron embestir a personal del centro comercial, así lograron escapar hacia Maneadero, tomando la calle Segunda, cruzando media ciudad.
El incidente, las agresiones, los daños en propiedad ajena y la huida a velocidad no permitida, originó la persecución a la que se sumaron policías municipales y ministeriales. A toda velocidad tomaron la Avenida Reforma hasta detenerse en Calle Esteban Cantú, donde los jóvenes prófugos fueron baleados.
Más de 30 impactos de bala se aprecian en la carrocería y parabrisas del auto GMC Jimmy color blanco, mientras que la patrulla involucrada presenta orificio de bala en la parte trasera; ambos autos están en los patios de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) en Ensenada.
La zona fue acordonada por agentes de la Ministerial y solamente se dio acceso a elementos de Servicios Periciales, impidiéndoselo a policías municipales. El boletín informativo se emitió 12 horas después de los hechos.
La PGJE también informó que además de la investigación ministerial de los hechos, se efectuaba una segunda indagatoria a cargo del área de Visitaduría (Asuntos Internos) para determinar si los agentes ministeriales que dispararon, lo hicieron con justificación y de acuerdo a los protocolos para deslindar responsabilidades.
También desmintieron la versión no oficial de que tres de los ministeriales inmiscuidos estaban detenidos, continúan con el estatus de activos.
Entre los tres elementos ministeriales investigados se encuentra una mujer de nombre Brianda Pérez, que lleva aproximadamente un año en las filas de la corporación y quien presuntamente inició la balacera.
ZETA solicitó entrevista con la subprocuradora de Justicia Zona Ensenada, Norma Alicia Velázquez Carmona. Personal de Comunicación de la dependencia informó que la funcionaria no estaba en condiciones de brindar declaraciones, toda vez que hasta la tarde del miércoles 14 de febrero no habían culminado los dictámenes de procesamiento de la escena del crimen.
Hasta el cierre de esta edición, no se había dado a conocer el número de casquillos levantados ni el calibre de las armas. Se sabe que las armas de cargo de los ministeriales son AR-15, .9 milímetros y .38 Súper.
LIBERAN CUERPO DEL “PALMITAS”
El cadáver de Rubén Ardulio Ruiz Cardona “El Palmitas”, de 39 años de edad, fue entregado una semana después de ser abatido por agentes municipales; su familia lo veló el martes 13 de febrero.
También conocido como “El Frijolito”, el jornalero, trabajador de surco para la empresa Empaques ABC, murió después que los uniformados no pudieron someterlo con el uso mínimo de fuerza, se les escapó, este entró a una patrulla, empuñó una de las armas largas de los policías y les disparó.
