Con Clasificación C, “La Región Salvaje” llega a las salas de México hoy viernes 2 de febrero, bajo la distribución de Cinépolis. La historia de una criatura tentacular que provoca placer y altera la estructura de una familia al estar en contacto con ella, es protagonizada por Ruth Ramos, Simone Bucio, Jesús Meza y Edén Villavicencio
A casi año y medio de que Amat Escalante estrenó “La Región Salvaje” en el Festival Internacional de Cine de Venecia, y obtuvo el Premio a Mejor Director, la película por fin empezó su corrida comercial en México como un acercamiento del cineasta al género fantástico, ya que la trama gira alrededor de una criatura del espacio que provoca placer sexual.
Ésta también es la primera ocasión que el director recurre a un par de actores con experiencia para incluir en el elenco y le permite leer el guion a los principales.
En entrevista con ZETA, el nacido en Guanajuato explicó los motivos de la variante: “Si lo vemos desde un punto de vista más convencional, siempre es más riesgoso hacer una película en la que los actores principales no ven el guion y sus diálogos. En ésta no pasó así porque vi que era necesario trabajar con ellos de otra manera, también porque algunos ya tenían una educación actoral, como Edén Villavicencio (tijuanense), que estudió teatro por nueve años. Es una historia diferente, es mucho más dialogo, no sé si más drama pero sí hay más situaciones sentimentales”.
Trabajando siempre en favor de lo que la película pide, esta vez optó por un montaje más fluido y dinámico que va de la mano a un movimiento de cámara menos cuadrado, que ayudó en los acercamientos de los personajes con la criatura, según expuso Amat en su última visita a Tijuana.
“En el rodaje había partes de la criatura que usábamos para mover y para que los actores vieran. Estaban hechas con mucho detalle, eran los tentáculos y la cabeza. Eso se iluminó y luego se reemplazó completamente con una cosa digital. Fue un trabajo muy complicado, de mucha gente, para recrear la criatura con movimiento”.
En la historia que Escalante escribió junto a Gibrán Portela, Ruth Ramos es la actriz que de forma más explícita tiene contacto físico con la criatura, motivo por el que dicha escena se convirtió en el reto de la producción.
“Fue muy complicado y teníamos a mucha gente alrededor, los tentáculos y una máquina que la elevaba, mientras debía hacer unas cosas que eran casi de acrobacia y requerían mucha fuerza en la espalda. De suerte tuvimos a un supervisor de efectos especiales muy bueno, de Dinamarca, porque toda la criatura fue una creación danesa, y él nos dijo si estábamos iluminando bien para luego reemplazar. Quería que la criatura se sintiera ahí realmente porque no me gusta cuando veo cosas digitales, debía sentirse como un personaje visualmente integrado y estaba dispuesto a eliminarlo de no ser convincente”.
— ¿Desde el inicio tuviste la idea de un ser tentacular?, o se dio conforme al trabajo de conceptualización…
“En el guion era muy ambiguo, solo decía que era una criatura que te atraía mucho y que tenía unas luces en la espalda, que según yo eran como una galaxia que brillaba y emitía luz, no te hipnotizaba pero sí te atraía mucho. Haciendo los diseños no salía exactamente como lo imaginaba, así que la trabajamos en Dinamarca por una semana, fuimos bastante antes de filmar la película; de ahí surgió la idea de los tentáculos para que tuviera con qué levantar a la persona, sin taparla demasiado para no quitarle personalidad. Hubo muchos detalles que fueron dictando su forma”.
— ¿Qué tipo de detalles?
“Antes de filmar la película era muy importante tener clara su imagen para poder iluminarla y que se integrara bien, necesitábamos tener exactamente la apariencia de sus venas y textura. Al final se parece a muchas otras criaturas del cine, y a mí la verdad no me importó eso, la criatura en sí juega con ello, es una criatura del cine. Es una película que se aproxima al género de terror y quise mantenerla en ese punto”.
— Con “La Región Salvaje” exploras elementos de lo fantástico sin dejar tu sello de crudeza. ¿Hacen falta historias que arriesguen en ese sentido?
“No sé si hagan falta, muchas veces pasa lo contrario, la gente se queja de mis películas y de otras porque la violencia que tratamos para ellos es demasiado. Me siento muy ingenuo y no muy a gusto defendiendo esta película o películas como la mía porque no hay necesidad realmente, cada quien hace lo que se le dé la gana y lo que crea que va a gustar o va a ser interesante para el público. La realidad es que la mayoría de las películas que tienen éxito y las que la gente va a ver no son estas, son comedias, comedias románticas o comedias pícaras, etcétera. No es que se necesiten estas películas, pero creo que no afecta en nada que existan, es natural y es una forma sana de expresar las cosas que están pasando en el país de una manera personal y creativa, no periodística, que eso está muy bien y es muy necesario; el reportaje periodístico es esencial”.
— ¿Entonces por qué mantienes el crear historias a partir de imágenes periodísticas?
“Hay un lado de la vida que se tiene que representar de forma personal y yo siento que así lo estoy haciendo. Sí, es la realidad, pero la estoy abordando de un lado no informativo, sino personal y creativo, experimentando para que la gente vea las cosas no solo como son en la realidad, sino como alguien más las percibe. Esto va a crear una identificación y me parece que eso es el arte básicamente. Por eso creo que son importantes este tipo de películas, no necesariamente de la violencia, sino películas libres que expresen algo personal”.
— Aunque no sean favorecidas en clasificación…
“Siempre he sido Clasificación C. Esta película tiene mucho sexo y no tanta violencia, bueno, sí tiene pero nada comparado con las otras, puede ser una película sobre violencia física pero no la trata como ‘Heli’ (2013) o ‘Los Bastardos’ (2008). Tengo curiosidad de ver cómo la perciben por ser una película con sexo mexicano”.
— ¿Ahora te es menos complicado rodar esas escenas?
“Siempre son muy difíciles, pero cada vez tengo más experiencia haciéndolas y sé cómo manejarlas un poco más con cuestiones prácticas del rodaje. Cuando son con gente que quiere actuar ha sido un poco más sencillo, pero aun así son incómodas hasta para un profesional. En un país con tabúes como México es algo duro para todos, los que están haciéndolo y filmándolo”.
“La Región Salvaje” deja abierta la idea general de lo que representa la criatura, pero el cineasta refiere que para él significa todo lo que los personajes desean y rechazan a la vez, de ahí que le diera un aspecto con detalles que pueden provocar miedo y atracción para otorgarle espacio al placer, el deseo y la sexualidad.
Sin embargo, la posibilidad de peligro y males que cada uno conlleva cuando no se controlan también se reflejan en la trama que, considera en el mejor de los casos y como consecuencia, será un grano de arena o una chispa en la conversación sobre la violencia física, el machismo y la homofobia, aunque ese no sea su propósito directo.
Escalante, quien se dice más seguro de abordar ciertos temas para acercarse al discurso que busca, habló de la metáfora de la premisa con relación a lo que sucede en el país.
“(El de México) Es un monstruo que empieza a existir a partir de que el gobierno y la Ley no funciona y todos los muertos, todas las mujeres muertas que se encuentran, nadie las mató. No hay nadie culpable. Como el 98 por ciento de los crímenes son impunes, no hay una resolución, no hay justicia y se va creando un monstruo hasta que algo tenga que pasar”.
Distribuida por Cinépolis en 59 salas del país, la película fue retirada de la programación de Cinemex dos días antes del estreno, argumentando que no tenían “suficiente espacio” en su cartelera; cuestión que indignó a cineastas como Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro, quienes junto al propio Amat Escalante ejercieron presión en redes sociales para que la empresa reconsidera su postura. Al cierre de esta edición, Cinemex ya había incluido nuevamente a “La Región Salvaje” como estreno para este viernes 2 de febrero.