Con el propósito de exponer programas preventivos de violencia, generados con éxito en otras partes del mundo, se realizó la Primera Cumbre Internacional de Seguridad Ciudadana en Tijuana, convocada por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Durante el 31 de enero y el 1 de febrero, gobierno, sociedad civil, iniciativa privada y academia intercambiaron conocimiento y buenas prácticas en materia de seguridad, a través de ponencias y paneles desarrollados en Tijuana.
“Hay muchas personas dedicadas a cambiar escenarios de violencia y delincuencia. Lo más esperanzador es que se ha probado que la suma de esfuerzos y estrategias, basadas en evidencia, logra resultados positivos”, declaró Elizabeth Warfield, directora de USAID en México, quien consideró factible replicar los casos de éxito expuestos en el evento.
Los paneles y conferencias magistrales abordaron temas de estrategia de Disuasión Enfocada, el Programa Juntos para la Prevención de la Violencia de USAID, el quehacer de la iniciativa privada en materia de seguridad ciudadana, prevención situacional, juventud en riesgo y justicia cívica.
En la organización del evento se unieron a USAID, a través de sus titulares el XXII Ayuntamiento de Tijuana, el Comité Municipal para la Prevención de la Violencia, Tijuana Innovadora y el Colegio de la Frontera Norte (COLEF), de manera que todos los actores corresponsables de la seguridad fueran participes del mismo.
También estuvieron presentes el Cónsul de Estados Unidos en Tijuana, William A. Ostick y la cónsul de México en San Diego, Marcela Celorio; así como el Diputado Federal Jorge Ramos y el secretario de Seguridad Pública Municipal, Marco Antonio Sotomayor Amezcua, entre otros.
“USAID apoya a los actores locales como ustedes en una serie de iniciativas enfocadas en la disminución de la violencia en diferentes lugares a lo largo del territorio de México. Impulsamos diversas metodologías con resultados exitosos en otras partes del mundo”, dijo Warfield a los presentes, pretendiéndose que dichas estrategias se adapten al contexto local.
Alberto Hernández Hernández, presidente del COLEF, manifestó a ZETA que esta cumbre abona a la solución del problema de la inseguridad en Tijuana, al ofrecer “alternativas” en el combate a la delincuencia y la violencia, no solo mediante el aparato policial, sino también atacando el problema en el tejido social.
