Tres ambulancias de la Cruz Roja permanecieron estacionadas en el área de Urgencias del Hospital General durante horas, el 8 de febrero, a manera de protesta hasta que le fueran devueltas las camillas en las que trasladan a los pacientes.
Desde hace semanas, a falta de camas disponibles para pacientes en estado grave, paramédicos de la Cruz Roja permitían a personal del Hospital General que usaran sus camillas para atenderlos. Sin embargo, la falta de esta herramienta ocasionó que algunos pacientes tuvieran que ser trasladados sin las medidas de seguridad requeridas.
De acuerdo a la información obtenida por ZETA, Cruz Roja ofreció su ayuda al Hospital General para conseguir camas donadas y así terminar con el problema, pero funcionarios estatales no aceptaron, y como consecuencia se dio este paro.
Desde las 11:30 del día, la primera ambulancia que dejó a un paciente permaneció en el Hospital General hasta que le fuera devuelta su camilla, a las horas se sumaron dos más, que al cierre de la edición de este Semanario, la protesta continuaba.
Roberto Sanabia Orejel, urgenciólogo del Hospital General, explicó que el área cuenta con 20 camas: 11 en el área de hospitalizados y nueve donde se reciben las ambulancias; “normalmente es raro que haya una vacía porque llegan muchos pacientes graves y sería muy riesgoso ponerlo en silla o mucho menos en el piso; entonces permanece en la camilla hasta estabilizarlo o que se desocupe una y entregar la de traslado a los paramédicos”, detalló el médico.
En lo que va del año, las 13 ambulancias de Cruz Roja han atendido a más de 3 mil 800 reportes de emergencia en la ciudad, mientras que en 24 horas, el Hospital General recibe un promedio de entre 20 y 30 pacientes en ambulancia, la mayoría trasladados por Cruz Roja.
Para la entrega de camillas, Cruz Roja giró un oficio a la dirección del Hospital General para informar de la situación, aunque las autoridades del nosocomio dijeron desconocer la inconformidad.
