“El Brusco”, “El Ocho”, “El Polo”, “El Poncho” y “El Morrillo”, operadores de René Arzate “La Rana”, están en la mira del Consejo Estatal de Seguridad de Baja California y bajo el fuego de los matones del CJNG que las autoridades continúan sin identificar
Los criminales que representan al Cártel de Sinaloa en Ensenada, responsables junto a sus enemigos crimínales del Cártel Arellano Félix (CAF) aliados al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) por la pelea sobre el territorio, han sido identificados por el Grupo Coordinación.
René Arzate “La Rana” y su hermano Alfonso Arzate “El Aquiles” en Ensenada, son los criminales que operaban bajo las órdenes de Misael Frías Ochoa “El Misa”, quien fuera miembro el CAF y, según datos de las áreas de inteligencia, se alió a los sinaloenses en 2015.
De hecho una de las muestras recientes del ataque al grupo del “Misa” fue el asesinato de su hermano el 18 de diciembre de 2017; su cadáver fue encontrado por la Policía Municipal en la cajuela de un auto abandonado atrás del panteón Jardines de San Ramón en Ensenada.
“El Misa” está preso desde el 18 de mayo de 2016, cuando la Policía Estatal Preventiva los detuvo en la comunidad porteña circulando en un auto robado y en posesión de dos armas largas, una corta, 45 cartuchos y 2.7 kilos de la droga conocida como cristal. Fue señalado por las autoridades de ser “organizador y autor intelectual” del ataque al palenque Póker, perpetrado el 26 de enero de 2016 en coordinación con Raúl Miranda Ordaz “El Alejo”, a quien ahora las autoridades consideran cabeza de célula y mano derecha de los hermanos Arzate desde finales de 2015.
Los primeros antecedentes delictivos del “Alejo” lo muestran como ladrón de autos en 2010, posteriormente homicida, cuando en 2013 fue detenido y liberado por un doble asesinato en Tijuana. Y en enero de 2016, el Grupo Coordinación lo señaló como el enviado de la mafia de Sinaloa de Tijuana a Ensenada para orquestar el fallido asesinato de un líder del CAF.
MÁS MIEMBROS DEL CÁRTEL
Por debajo de los líderes criminales como jefes en terreno del Cártel de Sinaloa en Ensenada, por declaraciones de los vendedores de droga detenidos, las autoridades ubican a dos hombres, de los cuales tiene poca información.
*Carlos Adrián Casas Reyes “El Ocho”, quien en este momento es brazo ejecutor de los hermanos Arzate en el puerto. También apodado “El Mercenario” o “El Tragedias”. Sin embargo, pese a que el Consejo Estatal de Seguridad lo contempla en un nivel medio alto del organigrama criminal, oficialmente no se localizó ninguna captura o ingreso a centros de reinserción social, como tampoco orden de aprehensión pendiente.
* Jorge Alberto Arce Guillén “El Tigre” y/o “El Brusco”. ZETA pudo constatar que este hombre está preso desde el 15 de noviembre de 2016, en un proceso abierto por homicidio.
Fue capturado por elementos de la Policía Municipal de Ensenada después que José Saldaña López “El Che” fue atacado a balazos en la calle Octava de la colonia Ampliación Hidalgo -posteriormente murió en el hospital-. En la escena los peritos encontraron balas de dos armas, una calibre .40 y otra 7.62 x 39.
Los presuntos victimarios fueron detenidos minutos después en la calle Abelardo L. Rodríguez del fraccionamiento Nueva Ensenada, las autoridades anunciaron la aprehensión de José Alberto “N” – Arce Guillén-, de 31 años de edad, y José Manuel “N”, de 29. Y el 17 de noviembre, en audiencia inicial, el Ministerio Público explicó que los capturaron a bordo del auto cuyas características fueron dadas por un testigo no identificado a policías municipales en un papel que contenía las siguientes anotaciones: “Azul gris, California, Honda, Accord 7GG13”, y explicaron que ambos detenidos llevaban un arma corta entre las piernas y un arma larga en el asiento, las cuales resultaron positivas en la balística del ataque.
“El Che” ya había sobrevivido a un ataque a balazos ocurrido el 16 de agosto de 2014 en el fraccionamiento Costa Azul, la versión entonces fue un enfrentamiento con un cabecilla delictivo porque intentó involucrarse en actividades de narcomenudeo sin éxito. Esta vez el ataque vino del grupo del Cártel de Sinaloa, pero no por pleito de plaza, lo ubican como un tema personal relacionado con una mujer. El abogado de la familia del fallecido Saldaña López refirió que en ninguno de los dos expedientes abiertos por los ataques a su cliente, se registró el tema de narcomenudeo.
* Christian Alexis Mendoza Guillén “El Plaga” o “El Morrillo”, a quien el Grupo Coordinación ubicó en esta célula como operador en la zona de Díaz Ordaz en San Quintín durante el año pasado; la versión es que está “desaparecido”.
Este Semanario consultó a las autoridades penitenciarias, donde no tienen registrado de ingreso.
MANDOS CRIMINALES OPERATIVOS
En un segundo nivel criminal las autoridades ubican a:
* Leopoldo Lizárraga Ochoa “El Polo” o “El Pantera”, cuyos primeros antecedentes delictivos son como ladrón de autos en 2012 en Sinaloa. En Baja California ingresó en el radar del Grupo Coordinación en 2015.
De acuerdo a declaraciones delictivas, su grupo obtiene ganancias de 15 mil pesos diarios y, conforme a reportes de inteligencia, recibe protección de varios policías municipales pero solo tienen identificados a tres por apodos: “La Chapis”, “Becerra” y “El Moreno”.
La única detención pública del “Polo” fue ejecutada por la Policía Municipal en noviembre de 2015, junto a Elvis Daniel Aguirre, acusados de haber entrado a una casa a robar un teléfono celular, disparar y huir en una pick-up blanca sin placas. En la denuncia original se reportó que habían participado cuatro criminales, pero solo dos fueron detenidos. Estaban en posesión de dos dosis de cristal y cartuchos útiles calibres 223, 45 y 40. Ambos sujetos entraron y salieron del sistema penitenciario el mismo día.
* Alfonso Niebla Vega “El Poncho”, detenido en febrero de 2009 e ingresado al penal de Ensenada por el delito de comercio y posesión de droga, fue liberado en mayo de 2011.
En junio de 2013, la Policía Estatal Preventiva capturó nuevamente a Niebla Vega, entonces de 31 años. Le marcaron el alto porque manejaba a exceso de velocidad por el Ejido El Porvenir en una camioneta Murano, lo aseguraron al encontrarle en posesión de mil 130 dosis de cristal. Sin embargo, tras esa captura no estuvo preso y su estatus actual es en libertad. Las áreas de inteligencia del Grupo Coordinación lo ubican con actividad criminal en el Valle de Ensenada.
TAMBIÉN DEL CJNG
Policías también refieren la presencia invasiva del CJNG en alianza con la gente del viejo CAF que en años recientes habían operado prácticamente como “independientes”.
“Ya están en toda la ciudad y en el valle” aseguraron, con apoyo de grupos de policías municipales “y de algunos federales y ministeriales que trabajan al mejor postor por contrato, contra unos y otros”.
Sin embargo, la identificación plena de quienes encabezan la pugna delictiva del lado de Jalisco – tras la captura de Gabriel Ayala Fonseca en mayo de 2016- ha sido prácticamente nula, a pesar de meses de investigación y trabajo en calle de la Policía Estatal y las Fuerzas Armadas en el puerto, realizada en tres etapas por el recrudecimiento de la violencia en el puerto, traducido en homicidios de alto impacto en el primer periodo de enero a junio de 2016, y después, el primer y el último trimestre de 2017.
De hecho las autoridades municipales y ministeriales evaden el tema, si alguno de los miembros de esos cárteles es detenido en flagrancia por algún delito, no hay mayor investigación, ni trabajo de inteligencia a pesar de que la Ley de Seguridad de Baja California instruye que todas las policías en el Estado tiene la obligación de “organizar, analizar, seleccionar y utilizar esta -información- , en la preservación de la seguridad pública y en la investigación para la prevención de los delitos, en apoyo del Ministerio Público
ARTÍCULO 104.- Las Instituciones Policiales, para el mejor cumplimiento de sus objetivos, establecerán, cuando menos, las siguientes áreas operativas: I.- Investigación, que será la encargada de la investigación a través de sistemas homologados de recolección, clasificación, registro, análisis, evaluación y explotación de información;
ARTÍCULO 105.- Las unidades de policía encargadas de la investigación científica de los delitos se ubicarán en la estructura orgánica de la Procuraduría, o bien, en las Instituciones Policiales, o en ambas.
Sin embargo la última captura de alto nivel de criminales de los dos cárteles en Ensenada data de 20 meses atrás. Y en ese lapso las ejecuciones se han incrementado. En los tres años previos, los asesinatos eran 48 anuales, con un promedio de mil 250 víctimas de lesiones dolosas por año.
Mientras que a lo largo de 2016, los asesinatos se incrementaron a 68 y, en 2017, cerró con 173, un aumento de más del 100 por ciento.
“Revientan” casas en busca de Óscar Parra
A raíz del asesinato del soldado chiapaneco Emmanuel Esaú Saldaña Ramos, en el puerto de San Felipe, el Ejército Mexicano, la Secretaría de Marina y la Procuraduría General de Justicia del Estado, han cateado dos casas relacionadas con el presunto responsable, Óscar Parra Aispuro, conocido como “El Tekolín”, “El Parra” o “El Patrón”; además de reforzar los operativos de vigilancia en dicha comunidad.
Parra Aispuro presuntamente forma parte de una organización criminal de tráfico de totoaba y droga en San Felipe, la cual sostiene relaciones con el Cártel de Sinaloa.
Según información de la PGJE, cuenta con antecedentes penales por posesión de enervantes, lesiones calificadas y violencia intrafamiliar, pero desde 2015 se le vinculó al tráfico.
El Comandante de la II Región Militar, Gabriel García Rincón, afirmó que ya tienen identificado al responsable del crimen y confirmaron que se dedica al tráfico de totoaba y drogas en aquella comunidad, “y se hará todo lo posible por asegurarlo”.
Comentó que se han realizado operativos en busca del agresor, hasta el momento sin éxito. Fuentes extraoficiales han precisado que por lo menos se han cateado dos casas, una de la hermana de Óscar, de nombre Alicia, donde ubicaron algunos objetos relacionados con “El Tekolín”. Mientras que en el otro inmueble se localizó el automóvil con que escapó el criminal, de donde pudieron extraer algunas huellas dactilares.
Días después del homicidio Saldaña, se emprendió una cacería en busca del responsable, al grado de entregar volantes en toda la comunidad portuaria, donde aparece una imagen con el rostro de Parra Aispuro, en la que se ofrece una recompensa por información que ayude a dar con él.
Entre “enmaletados”, “encobijados” y calcinados, suman 67 homicidios en Tijuana
En los primeros once días de enero, 67 personas han sido privadas de la vida de manera violenta en Tijuana. Durante la semana que termina se presentaron casos de personas “enmaletadas”, “encobijadas”, calcinadas; la mayoría de las víctimas fueron atacadas a balazos.
Hasta el momento, en solo uno de los hechos hay tres presuntos responsables detenidos: David “N”, de 50 años de edad, originario de Michoacán; Raúl “N”, de 41; y Juan Rubén “N”, de 24, ambos oriundos de Tijuana, quienes fueron asegurados por la Policía Municipal tras ser sorprendidos arrojando maletas con restos humanos en la colonia Colinas de la Presa. Fueron puestos a disposición de la autoridad competente.
Entre los hechos de la semana figuran:
El viernes 5, a la central de emergencias se reportó una osamenta, con sexo a determinar, en un barranco de Rancho Jaramillo en Valle Imperial. En el Hospital General murió Sergio Guevara Olvera, de 33 años, tras haber sido atacado a balazos en la colonia Jardín el 4 de enero. En la colonia Pórticos de San Antonio, un hombre de entre 40 y 45 años fue asesinado a tiros. En la caja de una camioneta tipo pick-up amarilla, se detectaron varios bultos, entre los que se encontraba un masculino envuelto en una cobija color azul con café. Tenía entre 40 y 45 años de edad. En El Florido primera sección, fue reportada la ejecución de un masculino de entre 30 y 35 años. Y en Urbi Villa del Prado segunda sección, Saúl Valdovinos Flores, de 23 años, resultó muerto por disparos arma de fuego.
El sábado 6, en el Ejido Chilpancingo, se localizó el cadáver calcinado de un varón.
El domingo 7, en el interior de un domicilio calcinado en la colonia Mineral de Santa Fe, estaba un cadáver maniatado.
El lunes 8, un doble crimen se registró en Terrazas del Valle, donde fueron ultimados a balazos quienes llevaran por nombre Fernando Valdovinos Mendoza, de 51 años, y Sergio Gómez Lozano, de 32. En el Hospital General de Tijuana falleció Bernardo Cabanillas, de 51 años, agredido a tiros en la colonia El Realito. Luciano Rosario Méndez fue herido de bala en la colonia Camino Verde, pero pereció minutos más tarde en el Hospital General. En Las Torres fue asesinado por arma de fuego un masculino de entre 20 y 25 años. Maniatado y con lesiones por arma de fuego, fue hallado el cadáver de un desconocido de entre 30 y 35 años en la colonia Urbi Villa del Prado primera sección. Un presunto ladrón, de entre 25 y 30 años, fue abatido en una sucursal Oxxo en Las Torres. Mientras que en Puertas del Sol, fue privado de la vida Gilberto Torres Guzmán, de 65 años.
El martes 9, Armando Sánchez Aguilar, de 50 años, murió en el Hospital General luego de los balazos que recibió cuando se encontraba en la colonia Camino Verde.
El miércoles 10, en la colonia Manuel Paredes III, una desconocido de entre 25 y 30 fue hallado sin vida con lesiones por estrangulamiento en el cuello. En Colinas de La Presa, los cadáveres de tres personas fueron encontrados en el interior de maletas, dos de las cuales se encontraban en un vehículo Chevrolet Aveo color gris, placas AGP320A. Hay tres detenidos en este hecho. Otro cuerpo masculino con brazos y piernas cercenadas al interior de una maleta, se halló en una de las aceras del puente que conecta con la Vía Rápida, en la colonia Murúa Oriente. Gerardo Pérez González murió en el Hospital General luego de ser lesionado de bala en el fraccionamiento Bonilla Tijuana. En la colonia Garita de Otay, fue ultimado un desconocido de entre 35 y 40 años. Miguel Ángel Nata Sandoval, de 49 años, fue asesinado por arma de fuego en la colonia Mariano Matamoros Sur. Y en Pedregal de Santa Julia se registró un ataque armado donde falleció un desconocido de entre 30 y 35 años.
El jueves 11, en la colonia Valle Imperial fue ejecutado a tiros un hombre de entre 30 y 35 años. Una mujer fue asesinada de un tiro en la cabeza y su cadáver localizado en un lote baldío de la colonia Residencial Alcatraces. Datos referidos a ZETA señalan que la fémina tenía antecedentes por posesión de droga y anteriormente había sido procesada y sentenciada (2010) por delitos contra la salud. En menos de una hora, tres hombres más fueron asesinados en las colonias Hacienda Los Venados, Villas de Baja California y Reforma.
A nivel estatal, la estadística de homicidios dolosos asciende a 74 hechos.