De Trez en Trez
1.- Desde el primer día de este 2018, las esquinas de las calles de Tijuana lucen con montones de basura maloliente que se ha acumulado. Hay incomodidad porque a los trabajadores de limpieza no les han dotado de uniformes, en plena lluvia hacen su recorrido sin impermeables ni botas…
Aquí mismo, hasta el martes pasado, por la tarde, a escasos nueve días de haber iniciado el nuevo año, se contabilizaban 55 muertos y la “cuota” parece ser de seis muertes violentas por día; se suma además el alza en el clima de violencia que se vive hace ya tiempo y que parece no dar tregua a la ciudadanía pacifica, la que padece robos impetuosos en las calles, domicilios y a bordo de sus automóviles. La delincuencia no descansa. La capacidad de las instalaciones del Semefo está rebasada.
En Baja California, a los docentes y trabajadores del Colegio de Bachilleres (Cobach) se las “hicieron de jamón” con el pago de su salario en diciembre y también con el aguinaldo que por Ley les corresponde, tuvieron que hacer paros y presionar al gobierno del Estado y al Federal para que, a regañadientes, les cubrieran lo adeudado en parcialidades, como si les hicieran un favor.
Para cerrar 2017, en nuestro país, la inflación alcanzó su nivel más alto en los últimos 17 años: 6.77%, siendo el transporte aéreo, la gasolina, el gas doméstico y el huevo, los productos con mayor aumento en su precio, según lo reportó el Inegi, a quien -por pasadas experiencias- no hay que creerle todas sus cifras.
El “Gobierno” Federal toma represalias que afectan a los habitantes de Chihuahua porque se inició una investigación por peculado contra un ex funcionario de la administración de Cesar Duarte -que aún continúa huyendo- y el importante ex secretario General Adjunto del PRI; “Enriquepeñanieto” le entra al pleito y secunda a Manlio Fabio Beltrones, diciendo que es una “cuestión política”. No les molesta la corrupción, les incomoda que les “saquen sus trapos al sol”, mientras la delincuencia organizada y la desorganizada van en aumento, sin estrategia que logre frenarla.
2.- Como los anteriores, hay otros muchos ejemplos de la incapacidad, negligencia, falta de voluntad, complicidad, incompetencia y hasta la desvergüenza de los responsables de las administraciones municipales, estatales y federales.
Porque, mire Usted, ni el Presidente Municipal de Tijuana, ni el Gobernador de Baja California, tampoco el Presidente de la Republica, ni los funcionarios de alto nivel, se ven afectados por alguna de estas situaciones. Nada de eso, si acaso son blancos de críticas pero, como dice el dicho, “es jabón y se les resbala”.
Para “ellos” -aquí póngale Usted los nombres que guste y mande-, la crisis, el aumento de precios, las carencias y demás problemas de los “ciudadanos de a pie” no los alcanzan porque cobran como si supieran e hicieran bien su trabajo.
Es más, en la pasada edición de ZETA, en la columna “Cuentahiloz” se da cuenta de cómo Juan Manuel Gastélum Buenrostro, “El Patas” -para más señas, cobra como Alcalde de Tijuana-, cambió su residencia a un exclusivo condominio a escasos metros de la línea divisoria internacional y con vista a Estados Unidos, prestado dicen. En el inmueble de lujo no padece las penurias de la mayoría de los tijuanenses; además, bien resguardado, pues tampoco lo alcanza la violencia ni la inseguridad, menos los problemas de recolección de basura.
Por su parte, Francisco Arturo Vega de Lamadrid -AKA “Kiko” Vega-, Gobernador de Baja California, seguramente pasó una feliz Navidad. Cenó sabroso, dio y recibió regalos, cómodo y tranquilo, ninguna molestia. Lo mismo o mejor aún hicieron “los que dicen gobernar” en el nivel federal.
¡Que subió del precio el gas doméstico! ¡Que cuesta casi mil pesos el cilindro -a medio llenar- de 45 kilogramos! ¡Las tarifas de las líneas aéreas comerciales aumentaron! ¿Y los huevos? ¡Qué casi cuestan uno de la cara! ¡La violencia al alza! ¡La delincuencia manda! ¡La inflación! ¿Qué es eso? ¿Canasta básica? ¡Para nada!
3.- Y todo esto sucede simple y sencillamente porque “los que dicen gobernar” la ciudad, la entidad federativa o el país, ¡les vale madre!
Resulta una total y absoluta mentira que les importa el bienestar de los gobernados o de los que pretenden representar. Comprobado está que las promesas de campaña no se traducen en hechos, luego de terminados los comicios. Lo único que les importa son sus propios intereses y “estar donde hay” para despacharse con la cuchara grande. Viven de nuestro dinero, viajan en jets privados, traen guardaespaldas, comen bien en restaurantes caros, ni la gasolina pagan. Por eso les vale madre y siguen mal administrando nuestro -suyo y mío- dinero, no el de ellos, ese -la mayoría de las veces mal habido- saben guardarlo muy bien.
Sobran nombres como ejemplos de lo afirmado. Por favor, recuérdelo bien antes de emitir su voto en las elecciones que se aproximan.
P.D.- Hoy no hay…también le valió madre y no asistió a esta colaboración.
Óscar Hernández Espinoza es egresado de la Facultad de Derecho por la UABC y es profesor de Cultura de la Legalidad y de Formación Cívica y Ética en Tijuana. Correo: profeohe@hotmail.com
