En un doble discurso, el gobernador de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid declaró por un lado que respetará la resolución que emita la Suprema Corte de Justicia de la Nación, respecto al recurso de inconstitucionalidad interpuesto por diputados bajacalifornianos en contra del dictamen 95, pero por otro dijo que continuará impulsado el proyecto de las desaladoras “no importa la resistencia de pequeños grupos, en todos los sentidos, incluido el político”.
Cuestionado sobre la admisión que la SCJN hiciera del recurso de inconstitucional sobre el dictamen que da viabilidad financiera a las Asociaciones Público Privadas –APP´s-, que incluye a 2 desaladoras de Zona Costa, Kiko Vega expresó: “Más allá de la necesidad que tenemos, más allá de los intereses políticos, más allá de esto, las resoluciones se tendrán que respetar por Ley”. Una vez que se emita la resolución, esta “será revisada, estudiada y tendremos, ojalá pronto, una resolución, claro, se tendrá que respetar”, reiteró.
Al mismo tiempo se dijo preocupado de “que dos temas importantes que tenemos sean manejados y/o manipulados políticamente, uno es el de inseguridad y el otro es el del agua. Yo lamento que estos dos temas lo hayan subido unas personas en un ambiente… como estrategia política, y ahí están los antecedentes. Ahí sí creo que demos estar muy atentos todos nosotros”.
Minutos antes de esta declaración, en su discurso de inauguración para la introducción de la línea morada en Tecate, Vega de Lamadrid sostuvo que en su gobierno “seguiremos con la promoción de inversiones privadas y alianzas público privadas, para cristalizar las obras de infraestructura que hagan de este estado un estado más competitivo”.
Y subrayó, “no importa la resistencia de pequeños grupos, en todos los sentidos, incluido el político, dedicados a obstaculizar el progreso del Estado, seguiremos impulsando aquellos proyectos estratégicos que van a garantizar que Baja California cuente con agua segura los próximos años”.
En su argumento para continuar con proyectos que han generado una fuerte oposición expuso: “yo no quiero pasar a la historia y ser conocido como el gobernador que no hizo el mayor de los esfuerzos para que Baja California cuente con agua para esta y las futuras generaciones”.