En el patio de un manicomio se encontraba un grupo de internos que se reían a intervalos. El director, que curioso hacía sus rondines, se acerca a ver qué sucedía. Ve que un loco dice un número:
“¡Doce!”, exclama, e inmediatamente el resto del grupo comienza a reír. Al acabar las carcajadas del grupo, otro grita otro número:
“¡Treinta y dos!”, obteniendo, nuevamente, el mismo resultado del grupo ahí
congregado, que se suelta a carcajadas. El director les pregunta qué es lo que está sucediendo, a lo que uno de sus pacientes contesta:
“Estamos contando chistes”.
Aún más curioso, el director comenta “¡Pero si solo están diciendo números!”, a lo que el mismo paciente le explica:
“Lo que pasa es que nos sabemos tantos chistes, que los hemos enumerado para ahorrarnos el tiempo de contarlos”.
Ponderando esa explicación, el director decide probar suerte y dice:
“A ver, dieciocho”, y no recibe respuesta alguna del grupo, sino un silencio absoluto. Anonadado vuelve a intentar:
“Veintidós”… y la misma silenciosa reacción.
Desesperado, comienza a decir números uno tras otro sin lograr sacarle a ninguno de sus internos la menor sonrisa, hasta que se resigna:
“Pero qué pasa, ¡les he contado varios chistes y nadie se ríe!”.
Uno de los locos replica:
“¡Lo que pasa es que usted no tiene gracia para contarlos!”.
Autor: Un “sin chiste”.
Escena
Está el doctor en su consultorio cuando de repente entra la asistente y le dice:
— ¡Doctor, doctor! El paciente que usted acaba de dar de alta, cayó muerto al frente de la clínica.
“¿Y cayó con la frente para la calle?”.
— Sí.
“Pues voltéelo ¡para que crean que iba entrando!”.
Autor: Médico demandado.
Signo zodiacal
— Pepito, ¿qué signo es tu madre?
“Pues debe ser de exclamación, ¡porque todo el día me grita!”.
Autor: Astrólogo.
Solución
Dos amigas conversan:
— Te ves feliz.
“Sí amiga, ¡estoy de suerte!”.
— ¿Ah sí? ¡Cuéntame!
“Es que el otro día un tipo me dijo ‘Mamacita, quiero un hijo tuyo’. Y le di al más grande, que es el que más come”.
Autor: Madre desnaturalizada.
En pareja
Un matrimonio no tan joven platica:
— Amor, anoche hablaste dormido.
“¿Y qué dije?”.
— Que yo te tenía ¡haaarto!
“Entonces todavía no estaba dormido”.
Autor: Divorciado.
Problema matemático
La mamá de Jaimito le dice:
— A ver mi niño, te veo preocupado por la tarea.
“Es que no puedo resolver este problema matemático”.
— Tal vez pueda ayudarte, ¿cuál es tu duda?
“Si tengo cinco tamales y Pepito me quita tres, ¿cuántos fregazos tengo que darle?”.
Autor: Maestro de español.
Peligrosa lechuza
Empleados de Pineland Farms, un centro de actividades al aire libre en New Gloucester, Maine, han advertido al público de un peligro inminente. Resulta que ¡EN ZERIO! hay una “lechuza clavadista y agresiva” que ya atacó a un hombre y le abrió la cabeza.
La nota se dio a conocer vía Facebook. Los directivos del lugar piden al público mantenerse alertas porque, al parecer, el ave está cuidando su nido cercano a una pista de esquiar a campo traviesa.
La recomendación es que la gente que camine por la zona lo haga con los brazos en alto, meneándolos, o de plano, use un gorro muy grueso o casco cuando ande por ahí.
Esto es especialmente importante, según dicen, porque cuando las lechuzas enojonas agreden, lo hacen de manera silenciosa.