El empresario español Segismundo Díaz Martín, de 50 años de edad, fue asesinado en un supuesto intento de asalto, alrededor de las 15:30 horas del viernes pasado, frente a su domicilio, en el Municipio de Cuautlancingo, del estado de Puebla.
El hombre falleció minutos después, luego de recibir un disparo de arma de fuego en la pierna derecha. Según la carpeta de investigación 742/2018, de la Zona Centro de la Fiscalía estatal, la víctima y su esposa llegaron en un vehículo a su casa ubicada en la calle Constitución, en el Fraccionamiento Villa de Las Flores.
Debido a que el zaguán eléctrico se trabó, la esposa del empresario bajó de la unidad e ingresó por una puerta para tratar de abrirlo. En ese momento escuchó una detonación y al salir de su domicilio observó a su esposo tirado en el piso con una herida en la pierna derecha.
También vio a un hombre armado que escapó a pie del lugar del crimen, por lo que dio aviso a las corporaciones de emergencia. Medios locales, basados en reportes policiales, indicaron que el agresor se llevó una bolsa que contenía insulina que se suministraba Díaz Martín -quien era diabético-, presuntamente pensando que se trataba de dinero.
Personal del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA) arribaron al lugar de los hechos, sin embargo, el empresario ya no contaba con signos vitales, por lo que dieron aviso a personal de la Fiscalía General del Estado (FGE), dependencia que abrió una carpeta de investigación sobre el crimen.
Según el diario español El País, Díaz Martín era director general de la empresa Dimasa Grupo, productora de plásticos, fibra de vidrio y biogas, con sede en Barcelona, y fundada en 1986, cuya filial se encuentra en Tlaxcala.
Según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el estado de Puebla registró 851 homicidios dolosos durante 2017, aunque todavía fatla que se den a conocer los datos correspondientes al mes de diciembre del año pasado.
El diario local Cambio recordó que este es el segundo hecho delictivo que se presenta en Puebla en contra de empresarios españoles durante los últimos tres meses, ya que el pasado 30 de noviembre dos catalanes fueron rescatados, después de haber sido secuestrados a las afueras de Sonata, por un ex trabajador de su compañía, quien los mantuvo privados de su libertad en un rancho abandonado en el municipio de Atlixco.