De suyo es conocida la rivalidad institucional que suele haber entre las corporaciones policíacas todas, y de ello no escapan las de Baja California. Particularmente la rivalidad es histórica entre los agentes ministeriales y estatales preventivos. Los primeros en la Procuraduría General de Justicia del Estado, lo segundos en la Secretaría de Seguridad Pública del Estado. Pero ahora que un elemento de la procuraduría fue nombrado secretario de Seguridad, como es el caso de Gerardo Sosa Olachea, un policía ministerial será el jefe de los policías estatales preventivos. En efecto, el ministerial del Estado, Sergio Francisco Romero Jaime, además de ex comandante de la Ministerial en Tecate precisamente en tiempos de Sosa, y ex comandante también en Rosarito cuando Rafael González fue subprocurador, es el actual encargado de despacho de la Dirección de la PEP, y pronto será designado director de la corporación por parte de Sosa Olachea. Ahora sí que tendrán que hacer las paces los ministeriales con los preventivos, con todo y que acreditan la llegada de Romero al asesor de la procuradora, el señor Alberto Castellano González, a quien dicen, siempre ha servido el próximo titular de la PEP.