Para los dirigentes juveniles de PRD y MC, Sergio Leyva y Sergio Gil, es tiempo de que los jóvenes, metidos a políticos, dejen de ser meros “brigadistas de campaña” y pasen a constituir “un activo de causas” en la toma de decisiones que contribuyan a la transformación del país.
En ese tenor, ambos líderes se encuentran de gira nacional “estableciendo un diálogo con universitarios”, así como con “liderazgos locales” y “empresarios” emergentes, a efecto de “conformar la agenda política del Frente Ciudadano por México”, cuyos partidos en conjunto con el PAN, impulsan de cara a las elecciones de 2018.
Leyva Ramírez y Gil Rullán ya recorrieron Ciudad de México, Chihuahua, Guanajuato, Nayarit y Sinaloa. Para la organización de sus encuentros han tenido que recurrir a organizaciones de la sociedad civil, pues tal como dijo el representante de MC, “ahorita no tenemos dinero”. En ese sentido recordó que PRD y el partido naranja renunciaron a su financiamiento público en beneficio de los afectados por los sismos de septiembre, registrados en la república mexicana.
El 16 y el 17 de noviembre, los dos dirigentes estuvieron en Tijuana, donde se congregaron con militantes de sus respectivos partidos, así como de Acción Nacional. Fueron recibidos por los representantes juveniles estatales, Octavio Sánchez (PRD) y Ricardo Romero (MC).
Sobre el hecho de que el secretario del Acción Juvenil (PAN), Alan Ávila, no los haya acompañado, el representante perredista lo atribuyó a cuestiones de “agenda”. Refirió que en Guanajuato sí estuvo con ellos.
En entrevista con ZOOM POLÍTICO, los líderes partidistas mencionaron que, derivado de la experiencia de sus reuniones con el sector juvenil, prepararán un documento para presentarlo en “la mesa política” del Frente Ciudadano por México.
A pregunta expresa, aseguraron que en su carácter de jóvenes políticos, no se sienten “chamaqueados” por la viejas guardias perredista y de MC: “no nos vamos a permitir que nos chamaqueen en la agenda política, mucho menos en los espacios de representación; es nuestra responsabilidad pelearnos permanentemente”, arengó Leyva Ramírez, quien se asumió como “uno de los 25 tomadores de decisión” del partido del sol azteca.
En referencia a la coalición PRD-MC-PAN, manifestó que constituye una respuesta política “a un problema de representación en el país”. A propósito se refirió a “un presidencialismo que ya no responde a una mayoría política en un Congreso de la Unión”.
Sostuvo que “el antiguo régimen” instaurado por el Partido Revolucionario Institucional, no se liquidó con el modelo de alternancia que tuvo lugar con la llegada del PAN al poder (el cual retomó el PRI en 2012). Desde su punto de vista, la problemática radica en que actualmente “no se puede comunicar el Presidente con las Cámaras, porque no tiene mayoría”.
Ni siquiera el programa político del líder de Morena y aspirante presidencial, Andrés Manuel López Obrador, modificaría el esquema gubernamental imperante. “Te lo digo como ex filo-obradorista: Andrés es un autócrata total”; se distingue por “poner y quitar dirigencias estatales”, lo mismo que “candidatos”, y por purificar “gente de la noche a la mañana”, como “Manuel Bartlett, Alfonso Romo y René Bejarano (colaboradores de AMLO)”.
De manera que la apuesta por el “Frente”, según dijeron los entrevistados, se cifra en que apunta a “construir un gobierno de coalición con una figura de jefe de gabinete donde haya pluralidad (partidista)” y “que esa mayoría pueda poner el centro de las prioridades en el Congreso”, la agenda política.