A principios de año y antes de Semana Santa, son los períodos en que los paceños buscan bajar de peso de manera natural a través de gimnasios, sin embargo, algunos prefieren medidas menos complicadas, como son productos que ofrecen “milagros” sin que la persona mueva un solo dedo.
En algunos casos es un reto bajar de peso de manera exprés y sin complicaciones, principalmente para lucir un buen cuerpo para la playa, eventos especiales o simplemente por sentir una mejor autoestima, pero cientos de personas buscan en productos milagro una salvación, garantizándoles conseguir algo que no han podido lograr en años.
Sin embargo, con la intención de reducir las afectaciones que estos productos generan a quienes lo consumen, la Comisión Estatal para la Protección contra riesgos Sanitarios (Coepris) en Baja California Sur asegura que se tiene un monitoreo de venta a través de diferentes medios, pero los productos se siguen distribuyendo al por mayor.
“Aquí en el Estado ya llevamos varios aseguramientos de productos, tenemos aquí un líder nosotros de publicidad, el cual vigila todas las notificaciones que salen en Facebook y en páginas de redes sociales, la promoción y la venta de este tipo de productos, lo único que hacemos es tomar una impresión de pantalla y por medio de oficio notificarle a la Cofepris”, reveló Blanca Pulido Medrano, comisionada estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios en la entidad.
Aunque en meses pasados, tras el deceso de una joven que consumía productos milagro, se llevó a cabo un operativo nacional donde decomisaron cientos de estos en tiendas establecidas, las redes sociales se encuentran invadidas de vendedores autorizados y otros “patito” que ponen al alcance de cualquiera bajar de peso de manera rápida.
“Se están viendo esas páginas de dónde vienen, de dónde son los contactos y bueno, de manera directa están llegando con la empresa para decirles que ya fue suspendida la venta de su producto y por lo tanto están infringiendo en una instrucción que ellos ya dieron”, alertó Pulido Medrano.
Asimismo, tanto Cofepris como Coepris manifestaron que los productos “autorizados”, que tienen una procedencia legal, deben contar con evidencia científica, además de un registro sanitario.
“La gente a veces desconoce, se guía por todo lo que le refiere que reduce en una semana casi 15 o 10 kilos, cosas o situaciones que llegan a poner en peligro la vida de la población, por lo tanto, ese tipo de publicidad nosotros también la estamos vigilando”, informó.
Las dependencias invitan a la ciudadanía a denunciar la venta de productos milagro y en caso de buscar alguno que favorezca la salud, verificarlo en la página de Cofepris para asegurar un registro sanitario correcto. De entrada los riesgos al consumir productos milagro pueden ser leves o fatales; sin embargo, cada vez es mayor el mercado de personas buscando adquirirlos con la intención de bajar de peso sin ningún esfuerzo.
“Definitivamente estos productos causan impacto en la reducción de grasa corporal de las personas, sin embargo, no es un proceso muy saludable, se ha popularizado normalmente porque las personas optan por consumir este tipo de productos por tratar de disminuir el esfuerzo en el cambio de disminuir sus esfuerzos en algunas prácticas en su alimentación”, expuso Carlos Higuera, entrenador físico.
Al consumir este tipo de productos que prometen milagros, se obliga al cuerpo a acelerar el metabolismo y con ello reducir grasa de manera más rápida, pero descompensado el organismo. De ahí que se recomiende la prescripción médica.
“Las afectaciones puedes ser el ritmo cardíaco, las personas en ocasiones ya padecen de hipertensión, se puede ver alguna vinculación con las mismas cardiopatías, problemas renales, pienso que debemos tener la madurez y prudencia de tomar algún tipo de recomendación médica previamente”, exhortó Higuera.
La idea de bajar de peso sin mover un dedo suena muy atractiva. Por ello se invita a la población a concientizar y hacer cambios positivos en el estilo de vida. La buena alimentación y el ejercicio siempre serán parte fundamental de ese proceso. Es recomendable hacer por lo menos 30 minutos de activación física al día y acercarse a expertos para una atención personalizada.