México sufre por varios desastres naturales, tan fuertes y destructivos como los de 1985, pero el pueblo, igual que siempre en los momentos de dolor, une sus manos y con todas sus fuerzas levanta al caído para que no muera tirado; así, el que tenga fuerzas se pondrá a salvo y se unirá a las brigadas de rescate. Siguen juntos, auxiliando a los más débiles y a los caídos. De igual forma se unieron para brindar ayuda al pueblo de México casi todos los países de América y enviaron sus brigadas de rescatistas y apoyo económico.
Como es tiempo de renovar las instituciones de gobierno en todo México, los candidatos contendientes se negaron a ofrecer como ayuda, parte del dinero que los partidos políticos recibieron para gastos de campañas, pero un partido aceptó cooperar, después, todos decidieron apoyar, ¡felicidades! El pueblo que los elija con su voto bien habido o comprado, se los agradecerá.
El pueblo de México se encuentra muy dolido y herido, pudiera no estar de humos para depositar su confianza en equis candidato. Por eso, no será un año de muchos votos. Los candidatos que obtengan su mayoría relativa, ganarán con muy pocos votos; será igual con los de representación proporcional. Esperemos que todo salga mejor de lo que pensamos. El pueblo siempre cumple.
Vicente Martínez M.
Tijuana, B. C.