Casi 7 días después del sismo de 8.2 grados en la escala de Richter que afectó a México y dejó casi 100 personas fallecidas, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llamó este jueves a las 13:00 horas a su homólogo Enrique Peña Nieto para expresar condolencias, y culpó del retraso de la comunicación a una supuesta “mala recepción” del teléfono móvil del mandatario mexicano.
“Hablé con el Presidente de México para dar condolencias por el terrible terremoto. No pude localizarlo por tres días por la recepción de su teléfono celular en el sitio”, señaló este jueves el republicano, después de aterrizar en Washington, tras realizar una gira por el estado de Florida, que sufrió los embates del huracán “Irma”.
El martes, la Casa Blanca anunció que ese día ambos presidentes sostendrían una llamada telefónica para que Trump expresara condolencias por los daños del sismo en México. Sin embargo, la comunicación se postergó hasta en dos ocasiones.
Según registros públicos, más de 40 jefes de Estado y de Gobierno expresaron condolencias de manera oficial a México antes que Estados Unidos.
Por su parte, la oficina de la Presidencia de la República afirmó que durante su conversación telefónica, el presidente Peña Nieto pidió a su homólogo estadounidense, una solución permanente para los “dreamers”.
“El presidente Peña expresó la importancia que tiene para México el que se tenga una solución permanente para los beneficiarios del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que en su mayoría son de origen mexicano […] El Presidente Trump se mostró optimista en que el Congreso norteamericano alcance una solución para los jóvenes que hoy están al amparo de este programa”, señalaron en Los Pinos.
“El Presidente Trump expresó sus condolencias y solidaridad a México por los daños causados por el terremoto y el huracán Katia que ocurrieron en días pasados en nuestro País […] En tanto, el Presidente Peña expresó también su solidaridad por la afectación que sufrió el estado de Florida por el paso del huracán Irma”, indicó la Presidencia mexicana.
Este mismo jueves, más temprano, Trump desmintió haber alcanzado un acuerdo con los líderes demócratas en el Congreso estadounidense para brindar protección legal a los 800 mil jóvenes indocumentados, tal y como los legisladores lo habían asegurado.
“No se hizo ningún trato anoche sobre el DACA. Debería acordarse una seguridad fronteriza importante para lograr el consentimiento. Debería estar sujeto a votación”, afirmó Trump a través de su cuenta en la red social Twitter.
“El muro, que ya está siendo construido a través de la renovación de vallas y muros antiguos y ya existentes, seguirá siendo edificado”, añadió Trump, quien luego se preguntó: 2¿Alguien realmente quiere echar a jóvenes buenos, educados y dotados que tienen trabajo, algunos sirviendo en el Ejército? ¡De Verdad!…”.
“Ellos han estado en nuestro país durante muchos años sin tener la culpa -traídos por los padres a una edad temprana. Mayor seguridad fronteriza”, añadió el mandatario estadounidense en otro tuit.
“Tuvimos un encuentro muy productivo en la Casa Blanca con el Presidente. La conversación se centró en DACA. Acordamos consagrar rápidamente las protecciones de DACA en una ley”, afirmaron la noche de ayer miércoles, los líderes demócratas en el Senado, Chuck Schumer, y en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, que cenaron con Trump.
Más tarde, a su llegada a Ft. Myers, en la costa suroeste de Florida, para examinar los daños causados por el huracán “Irma”, Trump enfatizó que “Tenemos que tener un muro”, y sin éste, afirmó “no hacemos nada”.
