San Diego, CA.- A días de concluir el año fiscal 2017 (del 1 de octubre de 2016 al 30 de septiembre de 2017), el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions visitó esta frontera para anunciar que en este periodo, la Guardia Costera decomisó poco más de 206 toneladas de cocaína en el Océano Pacífico, las cuales tienen un valor de 6 billones de dólares según cálculos del Departamento de Justicia.
Sessions al frente de elementos de la Guardia Costera
Desde el puerto de San Diego, acompañado del comandante de la Guardia Costera, Paul Zukunft y de decenas de elementos de esta corporación y otras agencias, Sessions declaró “cuando me recién me nombraron fiscal, me quedó muy claro que la parte más vulnerable de la red de narcotráfico es su habilidad en el mar. Muchas de sus drogas llegan de esta forma y hemos podido responder eficientemente”.
La cifra de este año supera ligeramente a la del año fiscal 2016, durante el cual se decomisaron 201 toneladas de esta misma droga. No obstante, representa 30 por ciento más de la cantidad asegurada en el año fiscal 2016.
“Las drogas tienen más valor que hace años porque son más baratas y puras”, expresó el funcionario federal, quien añadió que se han registrado niveles extraordinariamente altos en los decomisos de cocaína y heroína.
Tras la conferencia de prensa, sobre la plataforma de un buque de la Guardia Costera, se exhibieron 22 toneladas de cocaína, decomisadas en los últimos 45 días, principalmente en aguas internacionales a la altura de Costa Rica y Ecuador.
Daniel Monarrez, subteniente de la Guardia Costera, precisó que 50 toneladas de esta droga se decomisaron de 11 barcos en un periodo de 45 días después de recorrer el Océano Pacífico desde Los Galápagos hasta Centroamérica.
Droga escondida en sacos de fertilizante
Detalló que, en la mayoría de los casos, se trafica en lanchas con una longitud no mayor a 10 metros y típicamente hay un promedio de tres personas por embarcación. Monarrez también precisó que la droga que más se traslada por mar es la cocaína, seguida de la heroína.
Paul Zukunft, comandante de la Guardia Costera, recordó que, en 2016, se registraron 60 mil muertes en la Unión Americana por sobredosis de drogas, mientras que este año se pronostica que aumente esta cifra.
También abordó el problema que el consumo, producción y tráfico de drogas genera en los países centroamericanos. “Los presidentes de Centroamérica nos dicen que son víctimas de la geografía, viven al norte de los principales productores en el mundo y viven al sur del país que consume más cocaína en el mundo, que es Estados Unidos”.
Zukunft recordó que el narcotráfico genera violencia en muchos países centroamericanos, que a su vez ocasiona fenómenos sociales como la migración de menores no acompañados, cuyos padres “gastan sus ahorros de vida en sacar a los niños de esos países llenos de crimen para enviarlos a Estados Unidos, donde todo empieza, nuestro consumo de drogas está causando esa violencia e inestabilidad social”.
Los paquetes de cocaína, algunos solamente empaquetados en bolsas negras de plástico y otros ocultos en costales de fertilizantes, aseguró no son solamente la muestra de las drogas que logran decomisar, “es el origen de la inestabilidad de esta parte del mundo”.
El fiscal Jeff Sessions
