— Mi marido es un bombón.
“¿Es lindo?”.
— No. Es negro, redondo y lleno de licor.
***
Una gallega pregunta a otra:
— ¿Qué queda más lejos, Brasil o la Luna?
“¡Ay, taradaaa! ¿Acaso puedes ver Brasil desde aquí?
***
Le preguntan a la gallega modelo:
— ¿Qué verdura o vegetal te gusta más?
“La habichuela”.
— ¿Podrías deletrearla?
“¡Ay no, mentiras! Me gusta la papa”.
***
— ¿Cómo se dice puerta en inglés?
“Fácil; se dice door”.
— Y ¿cómo se le dice al que vende puertas?
“Vendedoor”.
***
Después de una pelea, la mujer le dice al marido, llorando:
— ¡A este matrimonio le falta magia!
“Tienes razón; desaparécete viernes, sábado y domingo”.
***
Pregunta la profesora a Jaimito:
— ¿En qué trabaja tu mamá?
“Señorita, mi mamá trabaja de sustituta”.
— Pero Jaimito, sustituta no es una profesión, ¿no habrás querido decir prostituta?
“No señorita, la prostituta es mi tía y, cuando ella no puede ir, la sustituta es mi mama”.
***
Un viejito pregunta a otro qué está leyendo.
— Estoy leyendo historia.
“Pero si ese es un libro de sexualidad”.
— Por eso, porque para mí ese tema ya es historia.
***
Una mujer encuentra una lámpara de Aladino en el desván de sus abuelos.
Inmediatamente la frota y, como es usual, sale un genio.
Enamorada, la dama mira al genio y le pide un deseo:
“Quiero que mi marido me mire solo a mí. Que yo sea la única. Que desayune, coma y duerma siempre a mi lado. Que cuando se levante, sea yo lo primero que agarre. Que no me deje ni para ir al baño. Que viaje siempre conmigo. Que me cuide, me contemple. Que si me pierdo un segundo, se desespere y me diga la falta que le hago. Que nunca me deje sola y me lleve a todas partes con él”.
Y ¡zas! El genio la convirtió en celular.
Autor: Conocido sanluisino.
Perros guardianes en el parque
Dos perros guardianes coinciden en un parque. Al primero se le ve muy cansado, mientras que el otro tiene un aspecto fantástico. El que tiene buena pinta le dice al otro:
— La verdad es que haces muy mala cara, ¿qué te pasa?
“Ufff, un desastre. Verás, mi ama es tan miedosa que apenas oye un ruido se despierta, me despierta a mí y despierta a todos los de la casa, y hasta que no se tranquiliza, nadie puede pegar ojo”.
— ¿Y no le has explicado que eres un profesional, y que tu trabajo consiste en saber identificar los ruidos?
“Claro que lo he hecho, pero al parecer no se fía”.
— ¿Y le has dicho que los ladrones no hacen ruido?
“Naturalmente. ¡Por eso ahora la muy paranoica también me despierta, aunque no oiga ningún ruido!”
Autor: Paranoica, claro.
Koalas en excursión
Durante una excursión a una reserva natural australiana, la guía turística describe los distintos animales que van viendo.
— Ese de ahí es un koala, el animal que simboliza a Australia.
Un turista comenta:
“¿Eso es un koala? ¡En mi país tenemos koalas que miden cuatro metros de altura!”.
La guía sigue explicando:
— A su derecha, un avestruz.
Y otra vez el turista:
“¿Eso es un avestruz? ¡En mi país hay avestruces de tres metros de altura!”.
De pronto, unos canguros pasan por delante del grupo.
“¿Qué son esos animales? -pregunta el turista y la guía responde:
— Son grillos.
Autor: Un chilango.
Cheetos en Nueva York
La semana entrante, y solo por tres días, Frito-Lay abrirá un restaurant improvisado en la parte baja en Manhattan, donde ¡EN ZERIO! ofrecerá platillos preparados con Cheetos.
Con el nombre de The Spotted Cheetah, el lugar ofrecerá de martes a jueves, recetas especiales creadas por la chef Anne Burrell. El menú incluirá inventos como pastel de queso con costra de Cheetos, macarrones y Cheetos, pepinos fritos empanizados con Cheetos… lo peor del caso es que ya no hay reservaciones disponibles.
Los precios de los platillos van de 8 a 22 dólares.