* Operan sin permiso y transan a turistas
Un nuevo incidente con las calandrias turísticas que operan en el Bulevar Costero de Ensenada se registró el pasado día martes.
Al parecer, hubo una colisión entre dos calandrias, pero se presume que el motivo pudo ser el cansancio o insolación de uno de los caballos que jalan estos vehículos. Residentes y visitantes atestiguaron otra vez la dramática escena de un animal derribado en medio de la calle, al parecer agotado tras las largas jornadas a las que son sometidas, sobre todo en esta temporada de calor extremo.
Daniela Salgado, vocera de la asociación civil “Ellos son la Razón”, lamentó que el Consejo Ciudadano para la Protección de los Animales llevan meses trabajando, sin recibir respuesta, para que se reglamente la actividad de las calandrias, o que se sustituya el uso de caballos por otros vehículos, tales como bicicletas o carritos de golf.
Los animalistas incluso han encontrado apoyo de la fundación internacional Franz Weber, en aras de buscar fondos para ofrecer otra opción a las personas que operan esta actividad, mientras que las instancias oficiales en México siguen ignorándolos.
“Conseguir el recurso para su sustitución no es fácil, y lamentablemente ninguna dependencia del Gobierno ha demostrado su apoyo, pero seguiremos trabajando hasta lograr que no exista crueldad e indiferencia hacia los animales”, planteó Salgado.
Al margen del abuso que padecen los equinos, los calandrieros, alrededor de 12 personas que son los dueños y que ofrecen este servicio, no cuentan con permisos para operar, son irregulares, además que cobran lo que quieren a los turistas, por lo que también son constantes las quejas de turistas que han sido atracados por los calandrieros a la hora de pagar el paseo.
No hay pues, quién los regule ni supervise: “El Gobierno Municipal sabe lo que debe hacer, pero como es costumbre no está haciendo lo que debe”.
Leer reportaje: http://zetatijuana.com/2017/07/10/atraccion-turistica-cruel-e-irregular/