Desde las 3:00 horas del sábado 23 al mediodía del lunes 25 de septiembre, se cerrará el acceso vehicular a Tijuana por la Garita de San Ysidro, como parte de las obras de remodelación del cruce fronterizo.
Esto implicará que el único punto de entrada desde Estados Unidos será la Garita de Otay, la cual cuenta solo con cuatro carriles de acceso que se reducen a dos con las recientes modificaciones a las instalaciones de la Aduana mexicana.
Por este motivo, autoridades estadounidenses recomiendan no cruzar la frontera en estos tres días, con el fin de evitar mayor caos vial. Mientras que, en Tijuana, la Policía Municipal prepara una serie de operativos para redirigir y agilizar el paso de los vehículos.
Se contempla que el proyecto de ampliación de la Garita de San Ysidro finalice en mayo de 2018, cuando la actual curva que conecta a la autopista 5 con El Chaparral se reemplace con carriles de acceso directo desde la autopista.
Ramón Riesgo, director general de la Frontera Sur para la Administración de Servicios Generales (GSA, por sus siglas en inglés) consideró que este cierre “es un mal necesario”, ya que ayudan a terminar una obra que facilitará el cruce en ambas direcciones.
Esto porque, además de la conexión directa de carriles hacia México, los diez carriles que integraban la “Puerta México”, el anterior punto de entrada de San Ysidro a Tijuana y que se encuentra actualmente cerrado, se adecuarán para el cruce hacia Estados Unidos, lo cual dará un total de 33 carriles con doble caseta.
Para desviar el tránsito vehicular de lado estadounidense, quienes transiten sobre las autopistas 805 y 5, con dirección sur, serán re direccionados a la autopista 905.
Si bien, después de esto se reducirán a tres carriles los que den acceso a México, se contempla que para mediados de noviembre, se agregue uno más y se modifique la actual curva para volverla menos abrupta y, por lo tanto, más segura.