Jared Kushner, yerno y asesor del presidente estadounidense Donald Trump, difundió a través de un comunicado antes de testificar a puerta cerrada ante el Comité de Inteligencia del Senado, que se reunió cuatro veces con funcionarios rusos durante la campaña electoral de 2016. Sin embargo, negó colusión alguna con estos extranjeros.
“No coludí, ni sé de nadie en la campaña que coludiera, con ningún gobierno extranjero […] No mantuve ningún contacto inadecuado”, aseguró el también empresario, de 36 años de edad, afirmando, también, que no empleó fondos rusos para financiar sus actividades empresariales en el sector privado.
En el comunicado por escrito de Kushner, de 11 páginas de extensión, “apenas hubo” contactos con representantes rusos, entre numerosas comunicaciones que estableció con personas de aproximadamente 15 países que querían acercarse a la campaña de Trump.
Entre otros, el yerno de Trump reveló que habló con el embajador ruso en EU, Sergei Kislyak, durante un evento en un hotel de Washington en abril de 2016, durante un discurso que el entonces candidato republicano daría sobre política exterior, “así que había muchos embajadores que el organizador del evento le presentó y expresaron su interés en crear una relación positiva con el magnate si ganaba las elecciones”.
“Cada intercambio duró menos de un minuto […] algunos me dieron sus tarjetas y me invitaron a comer en las embajadas. Nunca tomé ninguna de esas invitaciones”, aseveró Kushner. Sin embargo, sí hubo una reunión personal con el embajador ruso meses después, cuando Trump ya había ganado las elecciones, a la que acudió también el general Michael Flynn, exasesor de seguridad nacional.
En dicha reunión que duró 23 minutos, ambos dijeron que esperaban un nuevo comienzo en las relaciones entre ambos países y Kislyak expuso que quería compartir información sobre la guerra en Siria, pero como en ese momento no tenían un canal seguro para hacerlo, acordaron que lo buscarían después del nombramiento oficial de Trump. Todo según Kushner.
Además, el yerno del presidente de EU también reconoció que estuvo en el encuentro del hijo del presidente, Donald Trump Jr. con la abogada rusa Natalia Veselnitskaya, en junio del año pasado. El hijo del magnate explicó anteriormente, que la letrada prometió entregar material que “dañaría” a la demócrata Hillary Clinton, sin embargo, aseguró que no recibieron ninguna información de interés.
Según Kushner, él ni siquiera recordaba el encuentro, ni el nombre de la persona, y revisando sus correos electrónicos y mensajes pudo identificar que Trump Jr. le había pedido que lo acompañara a una reunión. Su versión es que llegó tarde, y como la mujer estaba hablando de un tema que no le pareció importante, se excusó para marcharse unos minutos después.
Otra reunión que reconoció fue con el jefe de un banco estatal ruso. Kushner explicó que la Embajada de Rusia lo había estado contactando, pero él rechazaba las invitaciones “porque estaba muy ocupado preparando la transición”. Ante la insistencia, aceptó un encuentro que el embajador le propuso con el banquero Sergey Gorkov, quien tenía una relación directa con Vladímir Putin.
Según el yerno de Trump, Gorkov le dio dos regalos -mismos que registró en la oficina de transición-, le habló brevemente de su banco y la economía rusa, pero no discutieron sobre políticas específicas. Por su parte, el presidente se defendió en su cuenta de la red social Twitter durante el fin de semana, y reiteró sus críticas a las investigaciones.
Ayer domingo, Adam Schiff, el demócrata de más alto rango en la Comisión de Inteligencia de la Cámara, dijo que Kushner estará a disposición de los investigadores durante dos horas solamente, y teniendo en cuenta la cantidad de preguntas que esperan hacerle, prevé “que esta solo sea la primera entrevista” al yerno del presidente.
