Este viernes 30 de junio, el Secretario de Gobierno Municipal, Raúl Felipe Luévano, entregará el oficio que de manera formal notifica al Encargado de Despacho de la Delegación La Presa Este, Ignacio Acosta de su destitución, informó este último a ZETA.
La destitución obedece a cuestiones políticas y no a razones administrativas, aseguró Acosta, añadiendo que desde el inicio de su gestión se le solicitó su renuncia al cargo. Manifestó que si bien la participación de Antorcha Campesina, organización a la que pertenece, fue útil para la victoria electoral del Alcalde Juan Manuel Gastélum Buenrostro, ahora se ha tornado incómoda para la administración municipal.
Fue a través de un comunicado de Antorcha Campesina que ayer 29 de junio se dio a conocer la presunción de dicha destitución, para lo que se informó de una manifestación encabezada por diputados federales y de miembros del Comité Ejecutivo Nacional de la organización en la explanada de Palacio Municipal, para el próximo lunes 3 de julio.
Acosta declaró que dicha destitución es un acto de restricción política, al no querer el Presidente Municipal el acuerdo logrado por Antorcha Campesina para que permitiera trabajar a esta organización en la parte más pobre de la ciudad. Afirmó que lejos de buscar una permanencia forzosa en el cargo, ya que reconoce la facultad del alcalde para destituirlo, se quiere evidenciar el fondo de esta decisión.
Señaló que son erróneas las acusaciones en su contra de propiciar u organizar invasiones en la Delegación a su cargo, señalando se encuentran ya detenidos quienes fomentaron la ocupación reciente a predios cercanos a los fraccionamiento Ke Casas y Hacienda Las Delicias, sin que estos tengan relación con Antorcha Campesina.
Asimismo, hizo hincapié en la agresión sufrida por una colonia antorchista en terrenos del Ejido Ojo de Agua, de las cuales aseguró el mismo comisariado así como autoridades federales en la materia pueden dar fe de que las mismas no fueron ocupadas ilegalmente, sino que la instalación de las familias antorchistas contó con el beneplácito de los ejidatarios.