Un camión de una empresa refresquera que se enredó con cableado de telecomunicaciones que se encontraba a una altura inconveniente, provocó el derribamiento de tres postes de concreto, uno de ellos cayó sobre una mujer que caminaba por la zona, matándola al instante. Se inició la investigación por homicidio culposo.
Sucedió la tarde del sábado 13 de mayo, el conductor de la empresa Coca Cola, Roberto González Hernández, manejaba la unidad por la calle Camino Guadalupe Victoria de la colonia Mariano Matamoros, se enredó con los cables al doblar por la calle Lacandones. El poste le cayó a Esther Hernández Quiroz, de 56 años de edad.
Roberto fue detenido y puesto a disposición de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), que abrió el Número Único de Caso (NUC) 0204-2017-22101 por homicidio culposo en contra del susodicho, que fue puesto en libertad ya que el delito no requiere prisión preventiva. El abogado penalista Hipólito Pérez Jiménez explicó que de acuerdo al Código Penal del Estado, el homicidio culposo equivale a una pena de cárcel que oscila entre tres días a cinco años de cárcel, aunque puede ser sustituida por una multa según la determinación de un juez.
David Jeshiel Romanillo Hernández, hijo de Esther, señaló que en un primer momento se asesoró con el abogado Gabriel González Celestino, a quien acusó de engañarlo, diciéndole que la PGJE absolvió a Roberto y determinó que su madre era responsable de su propia muerte, lo que resultó ser incierto.
González Celestino incluso afirmó, en entrevista con ZETA, que el agente ministerial Emilio Alejandro Pérez Tovar era responsable de esa determinación, que posteriormente fue aclarada por la PGJE.
El Ministerio Público también arrancó una investigación en contra de la empresa de telecomunicaciones por la altura del cableado. Información extraoficial arroja que Izzi estaba haciendo reparaciones en la zona.
Alejandro Lomelín Clapera, secretario de Desarrollo Urbano y Ecología (SDUE), señaló que el Ayuntamiento ya entregó oficios a las diferentes instancias públicas y privadas como la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para que revisen la altura y el estado de su cableado. La altura mínima reglamentaria es de 2.4 metros.
Sobre el caso de Esther, el funcionario ponderó que “si hay sanción la vamos a establecer”, aunque no especificó cuándo y la ruta que seguiría la investigación.