El Comité para la Protección de los Periodistas presentó el informe “Sin Excusa: México debe quebrar el ciclo de impunidad en asesinatos de periodistas”. Urgió a Enrique Peña Nieto en Los Pinos “comprometerse públicamente a abordar la impunidad en los delitos contra la libertad de expresión, comprometerse a resolver estos delitos y dar prioridad a la seguridad y la protección de los periodistas en la agenda de su gobierno durante el período restante de su mandato”
La ausencia de justicia en el asesinato de periodistas en México es una de las conclusiones en las que insistió el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), al presentar el 3 de mayo de 2017 en el puerto de Veracruz, el informe titulado “Sin Excusa: México debe quebrar el ciclo de impunidad en asesinatos de periodistas”.
“La impunidad es la norma”, refirió Carlos Lauría, coordinador sénior del programa de las Américas del CPJ en entrevista con ZETA el jueves 4 de mayo.
“El informe revela algunas de las carencias del sistema de justicia penal, en realidad no ha podido dar respuesta ante el creciente volumen de casos de asesinatos”, agregó.
86 por ciento de impunidad
El CPJ inicia su informe “Sin Excusa: México debe quebrar el ciclo de impunidad en asesinatos de periodistas” con tres casos particulares de asesinatos de comunicadores que reflejan la impunidad en general en el país; entre ellos el homicidio de José Moisés Sánchez Cerezo, encontrado decapitado el 24 de enero de 2015, a 25 kilómetros al Este de Medellín de Bravo en el Estado de Veracruz; era editor del diario La Unión y había sido secuestrado el l 2 de enero del mismo año en su casa de Medellín de Bravo.
Luego, el caso de Gregorio Jiménez de la Cruz, freelance que colaboraba para los periódicos locales Liberal del Sur, La Red y Notisur, de Villa Allende, localidad cercana a la ciudad de Coatzacoalcos, Veracruz; fue secuestrado el 5 de febrero de 2014 y asesinado entre el 6 y el 12 de febrero de ese año.
Y también el CPJ documenta el caso de Marcos Hernández Bautista, quien murió el 21 de enero de 2016 a causa de disparos recibidos en la cabeza; desde 2008 comenzó a colaborar con Noticias, Voz e Imagen de Oaxaca.
“Un ex jefe de la Policía de Santiago Jamiltepec fue condenado y, en marzo de 2017, fue sentenciado a una pena de 30 años de cárcel por el asesinato. Pero, al igual que la mayoría de los homicidios de periodistas en México, no se ha detenido al autor intelectual del asesinato y, luego de haber transcurrido más de un año, el caso de Hernández no ha sido resuelto plenamente”, informa el CPJ.
“Ninguno de los casos se resolvió en su totalidad”, advirtió Carlos Lauría.
“El título del informe es claro. Tomamos tres casos donde hay identificados sospechosos, donde hay detenidos, supuestos autores y no hay una condena; no se explicó claramente de los motivos, es un patrón en todos estos casos de asesinatos de periodistas en México”, complementó.
Estos tres casos son emblemáticos, ya que Oaxaca y Veracruz son “los estados mexicanos más letales”: en el primero fueron asesinados cinco periodistas y cuatro en el segundo, solo de enero de 2010 al 15 de abril de 2017, de acuerdo siempre a la investigación del CPJ.
El Comité, con sede en Nueva York, concluye que entre 1992 y el 15 de abril de 2017, por lo menos 40 periodistas han sido asesinados en el ejercicio de su labor informativa, destacando el hecho de que el 86 por ciento de comunicadores muertos prevalece en “absoluta impunidad”, además de que 13 comunicadores continúan desaparecidos.
— ¿Cómo ha variado el porcentaje de impunidad en el asesinato de periodistas en los sexenios de Fox, Calderón y Peña Nieto?, o en todo caso ¿hay alguna diferencia o mejora?, inquirió ZETA.
“De acuerdo al índice de impunidad, cuando el CPJ empezó a publicarlo según los casos que contábamos en el índice de impunidad digamos que ha aumentado en realidad en México; y eso es producto tal vez de una espiral de casos en los últimos tiempos; en 45 días, este año, asesinaron a cuatro periodistas (Cecilio Pineda Brito, Ricardo Monlui Cabrera, Miroslava Breach y Maximino Rodríguez Palacios).
“Es decir, la violencia contra periodistas en México es un problema endémico, que se mantiene constante; la mayoría de los casos, incluso aquellos donde se han producido progresos, chocan con este patrón de impunidad y de falta de justicia”.
Asimismo, el CPJ detalla que en el 63% de los 40 periodistas asesinados documentados por el Comité, “se sospecha que bandas criminales fueron los autores del crimen”, y el 95% de periodistas muertos por su labor informativa “son locales”.
Además de los 40 comunicadores acribillados, el documento también concluye que en 50 casos adicionales el CPJ investiga para determinar si la labor periodística fue el motivo:
“Hay ahí más de un posible motivo, pero la falta de investigaciones exhaustivas, creíbles, oportunas, rigurosas, hace que muchos de estos casos queden en la impunidad, en la sombra”, indicó Carlos Lauría a ZETA.
“La lucha contra la impunidad debe ser prioridad para el gobierno mexicano”
En el informe, Carlos Lauría, coordinador sénior del programa de las Américas del CPJ, también señaló que la lucha contra la impunidad debe ser prioridad para el gobierno de Enrique Peña Nieto, por lo menos para lo que resta de su cruento sexenio:
“La violencia vinculada con el narcotráfico y el crimen organizado ha convertido a México en uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo. Desde 2010, el CPJ ha documentado más de 50 casos de periodistas y trabajadores de medios asesinados o desaparecidos. En prácticamente todos los casos de periodistas asesinados en represalia directa por su labor informativa, la justicia sigue ausente y la impunidad continúa siendo la norma.
“El puntaje de impunidad de México ha aumentado en más del doble desde 2008, cuando el CPJ divulgó la primera edición del índice de impunidad. Pero pese a condenar públicamente la violencia contra la prensa, el Presidente Peña Nieto, cuyo mandato concluirá en poco más de un año, ha hecho poco para asegurar que su legado incluya erradicar este problema endémico”.
Lauría lamentó la ausencia no solo de investigación, sino de condenas en el caso de asesinato de periodistas, a pesar de la creación de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE):
“Las condenas en los casos de asesinato de periodistas son inusuales y, cuando se dictan -como en el caso de un ex jefe de la policía sentenciado en marzo a una pena de cárcel de 30 años por asesinar al periodista Marcos Hernández Bautista, de Oaxaca, cuyo caso se analiza en este informe-, con frecuencia se limitan al autor material, y las autoridades no logran determinar el motivo del crimen.
“Al no determinar un vínculo claro con la actividad periodística ni proporcionar ningún motivo de los asesinatos, la mayoría de las investigaciones continúan rodeadas de opacidad. Esta ausencia de rendición de cuentas perpetúa un clima de impunidad que deja a los periodistas en una situación de vulnerabilidad ante los ataques”, concluyó Carlos Lauría.
Recomendaciones del CPJ a EPN
Finalmente, el informe “Sin Excusa: México debe quebrar el ciclo de impunidad en asesinatos de periodistas” fue entregado al Presidente Enrique Peña Nieto el jueves 4 de mayo de 2017 en Los Pinos, en presencia del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y el procurador general de la República, Raúl Cervantes.
Cabe destacar que el informe incluye un apartado de “Recomendaciones”, dirigido específicamente a Enrique Peña Nieto:
- “Comprometerse públicamente a abordar la impunidad en los delitos contra la libertad de expresión, comprometerse a resolver estos delitos y dar prioridad a la seguridad y la protección de los periodistas en la agenda de su gobierno durante el período restante de su mandato”.
- “Utilizar las plenas facultades del cargo para asegurar que todos los ciudadanos, entre ellos los integrantes de los medios de comunicación, puedan ejercer el derecho a la libertad de expresión conforme está garantizado en los Artículos 6 y 7 de la Constitución”.
- “Asegurar que los funcionarios federales encargados del cumplimiento de la ley se hagan cargo con responsabilidad de todos los ataques contra la prensa que ocurran en sus respectivas jurisdicciones y ordenar a los funcionarios federales investigar estos casos exhaustivamente, enjuiciar a los autores y hacer que recaiga sobre ellos todo el peso de la ley”.
- “Utilizar su influencia para asegurar que la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) tenga suficiente autoridad y recursos para aplicar la ley con efectividad”.
- “Asegurar que el mecanismo de protección proporcione asistencia efectiva a los periodistas en riesgo y fortalezca la prevención para evitar ataques letales”.
— ¿Cuál es la expectativa del CPJ para lo que resta del sexenio de Enrique Peña Nieto, 20 meses, en cuanto a que el Gobierno Federal por lo menos investigue y se combata la impunidad del asesinato de periodistas?
“Justamente es una de las cosas que se comprometió el Presidente y nosotros obviamente vamos a continuar monitoreando que se cumpla el seguimiento de los casos de asesinatos y las investigaciones, y la posibilidad que se produzcan condenas en estos casos. El Presidente prometió priorizar la impunidad en los casos de asesinatos de periodistas, a priorizar el tema de la protección de los periodistas. Queremos expresar que esto es algo sobre lo que venimos insistiendo hace mucho tiempo, por eso el título del informe, ‘quebrar el ciclo de impunidad’, y bueno, eso es algo que esperamos monitorear y obviamente se pueda cumplir”.