Entre la inseguridad, un adeudo de 2 mil millones de pesos en el Ayuntamiento de Ensenada y el rezago generalizado, residentes de San Quintín urgen a las autoridades para que este año puedan pasar a ser el sexto municipio de Baja California. “En esas condiciones estamos condenados a otros 50 o 100 años de abandono, eso ya no es posible”: Martiniano Hernández, presidente del Comité Pro Municipalización de San Quintín
En medio de la peor crisis de inseguridad, y el rezago de toda la vida agravado, a los residentes del Valle de San Quintín les urge que durante este año los conviertan en el sexto municipio de Baja California, tras varios intentos fallidos donde ha predominado el interés político por encima del beneficio colectivo.
Además, con un adeudo que supera los 2 mil millones de pesos que enfrenta el actual Ayuntamiento de Ensenada, y un presupuesto anual de mil 400 millones cuyo 90 por ciento se va en pago de nómina, los sanquintinenses no ven un futuro promisorio mientras sigan dependiendo del gobierno encabezado por Marco Antonio Novelo.
“En esas condiciones estamos condenados a otros 50 o 100 años de abandono, eso ya no es posible”, sentenció Martiniano Hernández, presidente del Comité Pro Municipalización de San Quintín.
El también empresario de origen indígena, argumenta que esa es una zona productiva, de muchos negocios y comercios, profesionistas y ciudadanos que aportan trabajo y contribuyen con sus impuestos; en su opinión, es ilógico que no se les permita ser responsables de su propio desarrollo. “Este 2017 tiene que ser el año mágico para región”, externó ilusionado.
Esperan pronto se concrete el Primer Consejo Municipal Fundacional en San Quintín, para que la ahora delegación -y las que la circundan: Colonet, Vicente Guerrero, Camalú, San Vicente, Santo Tomás, El Rosario y otras- goce del presupuesto que les toca oficialmente, pues aglutinan el 25% de población del municipio más grande del país: “No estamos pidiendo nada que no nos corresponda, no estamos pidiendo nada que rompa con las leyes de Baja California o México”.
Apenas hace algunos meses, tras las elecciones pasadas de 2016, San Quintín debía haberse estrenado como municipio, con sus propias autoridades y partidas presupuestales. Pero no sucedió.
Tragos amargos
El 28 de octubre de 2012 se llevó a cabo el plebiscito para decidir sobre la municipalización de la zona de San Quintín. De un listado nominal de 350 mil habitantes de Ensenada, se requería votara al menos el 10%. De ese porcentaje, necesitaban más de la mitad con el voto a favor. Votaron apenas más de 25 mil personas (7%), 17 mil 580 a favor y 7 mil 548 en contra. No votó el porcentaje de personas total requerido, pero la suma de los votos les permitió el alegato.
Finalmente, un año después, la XX Legislatura del Congreso del Estado -con una votación de 23 a favor y 2 en contra- aprobó el decreto para que San Quintín fuera declarado municipio y por lo pronto empezara a funcionar como consejo municipal a partir de enero de 2014. Pero el gozo se les fue al pozo cuando en sus últimas semanas en el poder, el gobernador José Guadalupe Osuna Millán vetó el acuerdo legislativo, alegando que hacía falta un análisis más minucioso, documental y cartográfico, y vaticinó conflicto dado a las irregularidades con la tenencia de la tierra.
El trasfondo político se vio reforzado con la presión económica, ya que los ensenadenses de la zona urbana, encabezados por las cúpulas empresariales, emprendieron una campaña en contra justificando su oposición a la insuficiencia económica de la región de San Quintín, así como la escasa recaudación de impuestos, Predial y Catastro, que representan la mayor fuente de ingresos y que no tendrían por la irregularidad en la tenencia de las propiedades.
Fueron puros pretextos, y mero capricho por parte del entonces gobernador, “no le gustó que otro partido lo sacara”, consideró Neftalí Mendoza, coordinador del Grupo Madrugadores de Ensenada, quien ahora en el nuevo intento de la municipalización advirtió que no aceptarán el argumento de la insuficiencia financiera: “Todos los municipios de la República Mexicana nacen por necesidad, si fuera porque todo está bien bonito y cuentan con todo, pues ni nos preocupamos”.
En el Valle de San Quintín se contabilizan 100 mil habitantes, los defensores de la municipalización necesitan 20 mil firmas, de las cuales ya llevan 5 mil, para presentarlas al Congreso del Estado. Pero no quieren un plebiscito como el anterior, de entrada diseñado para perder, dicen. Tampoco desean que participen los ensenadenses de la zona urbana, quienes en 2012, con su baja participación, evidenciaron desinterés: “Esos votos no los queremos”. Que voten nada más los sanquintenses.
Los miembros del Comité Pro Municipalización piden que esta vez, por encima del interés político, prevalezca el sentido humano. Expone Mendoza: “No podemos seguir rogándole a los políticos, pero como todos, tenemos conciencia de los límites de tolerancia. Curiosamente ya vimos cómo se consigue más, jaloneándo a las autoridades. Nuestra convicción no es recurrir a otros caminos, que parecieran que es lo que quieren los políticos, ya estamos viendo que les gustan las protestas masivas y agresivas. Hasta el momento estamos solicitando las cosas tranquila, pero fuertemente”.
“Nosotros queremos ser muy institucionales, primero, pero sí tenemos ‘Plan B’ y ‘Plan C’, ya sabemos los métodos con los que a veces se logra más rápidamente darle reversa a algunas leyes”, secundó Hernández, presidente del Comité.
En busca de aliados
En su nuevo peregrinar, los integrantes de Comité Pro Municipalización ya han acudido al Congreso local, donde todo parece indicar que será el diputado priista Alejandro Arregui, quien algún momento presentará la iniciativa para iniciar el proceso.
El legislador electo por el Distrito XV, correspondiente precisamente a la zona rural de Ensenada, refirió que ha empezado a “socializar” el tema con el resto de los diputados de su partido y las diferentes fracciones, y aseguró, la mayoría de ellos se ha manifestado a favor de la municipalización.
“Estamos ante un momento diferente, donde podemos proceder de manera distinta. Un primer planteamiento es que no se tenga que repetir la situación que se dio en aquel momento, sino que se aborde de manera responsable, para no agotar ni politizar el tema”, dijo.
Indicó que se da la coyuntura para buscar la vía jurídica más eficaz que implica también subsanar el tema de las limitaciones territoriales de los cinco municipios, donde se inscribe el conflicto entre Ensenada con Rosarito, “y podamos definir de una vez por todas a través de la Ley del Régimen Territorial Municipal, la creación o actualización del estatuto de límites territoriales.
“Hay que recordar que Tecate, Rosarito, Tijuana y Ensenada forman parte de una zona metropolitana, y nos llevará en mediano o largo plazo a tener que instrumentar políticas públicas conjuntas para la prestación de servicios públicos y demás”, acotó. “Hay que verlo como una gran oportunidad para darle claridad, certeza jurídica, transparencia al proceso, y, sobre todo, solidez”.
Se ha propuesto un plazo de dos meses para definir una “ruta”, pues argumenta, la voluntad política de los partidos políticos será fundamental, sobre todo atendiendo que el Gobierno del Estado está encabezado por un panista y el municipal por un priista, y donde si la actual Legislatura puede lograr parte del impulso al desarrollo de la zona sur del Estado, estarán cumpliendo con su momento y una encomienda histórica.
Enumeró las condiciones a enfrentar: la regularización de la tenencia de la tierra, la infraestructura para desarrollarse como Ayuntamiento y el alcance que territorialmente tendría el sexto municipio, toda vez que abarca delegaciones como Villa Jesús María, en los límites con Baja California Sur.
— ¿Será un largo camino entonces?, pregunta ZETA.
“Pero ya está muy andado”, responde. “Los habitantes de aquella zona ya están muy familiarizados con los argumentos a favor o en contra, y creo que hay condiciones para poder sacar adelante el proyecto”.
El hasta hace poco funcionario priista y ahora diputado por Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), Catalino Zavala, es otro que ha dado luz verde a los anhelos del Comité Pro Municipalización, y de entrada les advirtió habría que cambiar las formas del anterior plebiscito para no tener el mismo fracaso. Aseguró que la fracción parlamentaria que encabeza no solamente reivindica, sino que defiende el legítimo derecho de los sanquintinenses a autogobernarse y elegir a sus propias autoridades.
“No es un tema sencillo, no es un tema de capricho, ni tampoco representa una intención insana de buscar algún beneficio particular, es una causa justa”, les dijo empático. “Siempre hay resistencia a los cambios, y Baja California histórica y políticamente no generó sus municipios con la mejor distribución”, recordó.
Zavala planteó que como sucedió en Rosarito, donde los propios ciudadanos decidieron su municipalización, así deberá ser con San Quintín, y al margen de argumentos insostenibles como los que tuvo el ex gobernador Osuna Millán cuando le dio palo al decreto. Habrá que trabajarse en una propuesta de reforma.
Indicó el camaleónico político que a las firmas que se lograron en su momento “sin duda, hay que darle valor en el contexto actual. Ahora hay una nueva administración, nuevo gobernador, un nuevo Congreso, habrá un nuevo debate seguramente, habrá que consensuar con el Comité Pro Municipalización un mecanismo que sea apoyado por todos, sin generar el celo político”.
El morenista resaltó que Ensenada cuenta con tres diputados, uno del PRI, otra del PRD en alianza con el PAN, otra del PT adherida a los priistas, y con dos de MORENA que se suman, lo que es un buen augurio. Les prometió “arrastrar el lápiz” y establecer una ruta de trabajo: “Que el regidor de nuestro partido en Ensenada plantee de manera muy precisa la parte del presupuesto que le corresponde a San Quintín, en función de los recursos que genera y demás”.
El gobierno municipal encabezado por Novelo, quien fuera también diputado por el Distrito XV en la anterior Legislatura, le manifestó al Comité que está de acuerdo y apoya la municipalización, sin embargo, “en el actual Ayuntamiento no se ha platicado el tema, ni en privado ni a nivel colegiado, no se ha tocado el asunto por ninguno de los regidores ni el presidente municipal, ni la síndico”, reveló Jorge Camargo, regidor por el Partido Acción Nacional.
Considera que es un proceso que debe cumplir muchos pasos “y no iniciarlo así por decreto nada más”. Además de la situación de la tierra, resaltó el aspecto financiero, “para que no nazca un municipio ya con déficit”.
En cuanto a la factibilidad ahora, resume: “Yo siento que sí, algo se debe haber hecho en ese lapso en que no se autorizó la municipalización”.
El regidor de MORENA, Teodoro Araiza Castaños, es el único miembro del actual Cabildo que se ha reunido con el Comité Pro Municipalización, quien les expresó su respaldo a la Ley Estatal de Participación Ciudadana para que un nuevo plebiscito sea realizado únicamente con los habitantes de tal territorio, “pues de haberse celebrado el plebiscito como en Playas de Rosarito en 1992, el día de hoy San Quintín sería el sexto municipio del Estado”.
“En principio esta administración es amiga de la municipalización”, externó por su parte Pablo Alejo López Núñez, subsecretario del gobierno estatal en Ensenada.
Mencionó que el gobernador Francisco Vega de Lamadrid ya acordó sostener una reunión con el Comité Pro Municipalización, pero acotó que el tema es complejo por todos los factores a tomar en cuenta, así como conocer las posturas de todas las partes, ser muy respetuosos de la prioridad que el asunto tenga para las diferentes fracciones parlamentarias del Congreso y la visión de la actual autoridad municipal.
“Hay que hacerlo de la manera más pulcra, con mucha planeación, que sea un proyecto integral y no hacerlo con improvisaciones, que no acepte confrontaciones, sino que por el contrario sea benéfico y provechoso tanto para los que se quedarían en la jurisdicción de Ensenada, como para los habitantes del nuevo municipio”, planteó López Núñez para concluir:
“Entre más tiempo ha pasado, la idea ha ido madurando. Creo que hoy tenemos circunstancias que operan mucho más a favor que antes para culminar con el propósito de contar con un nuevo municipio”.