El sacerdote católico Óscar López Navarro fue secuestrado la noche del martes afuera del seminario en Tampico, Tamaulipas, según lo informó el obispo José Luis Dibildox Martínez y lo confirmó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), quienes reclamaron al Gobierno del estado -que encabeza Francisco García Cabeza de Vaca-, que regresen al cura con vida.
Después de que lo siguieron por aproximadamente 15 kilómetros, los presuntos secuestradores interceptaron al religioso a bordo de su automóvil, al llegar al seminario, ubicado en la colonia El Charro, al salir de la parroquia San José Obrero, en la colonia Miramar en Altamira. Esto aproximadamente a las 22:30 horas.
“A pesar de que tenemos cambio de nuevo Gobierno no ha sido posible abatir la inseguridad, tengo yo la triste noticia de que un sacerdote ha sido secuestrado el día de ayer […] El padre está secuestrado. Ha habido alguna comunicación con los secuestradores con parte de esta comunidad”, dijo Dibildox en conferencia de prensa en Tampico.
Dibildox dijo que, aunque se ha notificado a las autoridades, aún no se ha presentado una denuncia por temor: “Le pedimos a nuestro señor que los secuestradores lo liberen y lo traten humanamente”, declaró.
Confirma diócesis de #Tampico el secuestro del sacerdote Oscar López Navarro de la parroquia San José Obrero ubicada en #Altamira, #Tamps pic.twitter.com/PzXxsbt4YC
— PautaMx (@pauta_mx) 29 de marzo de 2017
“Ya ha habido alguna comunicación con los secuestradores. Están en plan de negociación. Los padres de esa comunidad han sido muy discretos. Normalmente los secuestradores les piden que no hablen, que no digan, que no denuncien. La gente tiene el temor por la vida de este sacerdote”, dijo el obispo en conferencia de prensa.
A pesar de que del hecho delictivo no hay denuncia, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de tamaulipeca tomó conocimiento del secuestro del prelado de 40 años de edad, que pertenece a la orden religiosa “Misioneros de Cristo Mediador”, en el sur de Tamaulipas.
El obispo recordó sobre un hecho similar ocurrió el 3 de noviembre de 2013, cuando el cura Carlos Órnelas Puga fue secuestrado en la parroquia Los Cinco Señores del municipio de Jiménez. La familia del sacerdote denunció el hecho delictivo a la PGJ estatal, quien nunca dio con el paradero del hombre.
“Nosotros le pedimos a la gente su oración para que todo termine pacíficamente. Ojalá le puedan dar la libertad al sacerdote para que pueda seguir con sus responsabilidades. El anhelo se seguridad, de paz, de tranquilidad de toda la población es una exigencia de nuestra sociedad, sin embargo a pesar de que tenemos un nuevo gobierno no ha sido posible abatir la inseguridad”, expresó el obispo Dibildox.
En otra rueda de prensa, el padre Ángel Vargas Uribe, párroco y decanato de Santiago Apóstol, afirmó que tenían hasta las tres de la tarde de ayer para pagar por el rescate del clérigo: “[…] es bastante dinero el que nos piden, no revelamos la cantidad”, señaló.
“Ha habido comunicación con el padre Óscar, dijo que está secuestrado y que estaba bien dentro de lo posible. Todos estamos expuestos, lo que nosotros pedimos es que nos unamos en oración para que regresen a nuestro hermano con bien”, declaró Vargas Uribe.
Junto a otros doce sacerdotes que lo acompañaron, el padre Vargas agregó que este “es el primer caso de un sacerdote secuestrado que tenemos en esta zona, en el sexenio no sabemos cuantos llevamos aquí”.
Vargas Uribe afirmó que los raptores del sacerdote López Navarro -originario de la zona Sur de Altamira- se comunicaron con los integrantes del Decanato y les pidieron “mucho dinero, una cantidad estratosférica que tenemos que pagarla a las tres de la tarde, lo cual se nos hace imposible”, abundó.
