El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso este lunes un aumento “histórico” de 54 mil millones de dólares al presupuesto destinado a las fuerzas armadas de su país -el más elevado del mundo-, además de recortes en ayuda internacional.
“Vamos a hacer más con menos, y a hacer un Gobierno austero y responsable”, dijo Trump al finalizar una reunión con la Asociación Nacional de Gobernadores en la Casa Blanca, en la que señaló que planea proponer un incremento importante en el gasto en seguridad pública.
“Este presupuesto es la expresión de mi promesa de mantener seguro a Estados Unidos. Incluirá un aumento histórico en gastos de defensa”, señaló el mandatario a periodistas. Trump dijo que presentará un presupuesto federal centrado en “la seguridad pública y la seguridad nacional”.
El gobierno del magnate prevé mandar este lunes a todas las agencias federales sus metas de gasto para el nuevo año fiscal, con el objetivo de que cada una de ellas elabore sus planes para enviar el borrador presupuestario al Congreso durante el mes de marzo, donde dará un discurso mañana.
De hecho, Trump también dijo que hablará sobre sus planes de gasto en infraestructura durante el discurso: “Vamos a empezar a gastar en grande en infraestructura”, prometió.
Ayer, el diario La Jornada dio a conocer -con información del propio gobierno estadunidense- que los recursos otorgados por ese país a México han registrado un decrecimiento durante los últimos siete años.
Para 2017 se tiene presupuestada una aportación de 133.5 millones de dólares, 80 por ciento menos que en 2010, cuando alcanzó el máximo de 657.6 millones de dólares, según lo muestran cifras del Departamento de Estado y del Congreso de ese país.
Según el diario de circulación nacional, los recursos asignados a lo largo de este periodo se destinaron principalmente a paz y seguridad, democracia, derechos humanos y gobernanza, con énfasis en el adiestramiento y equipamiento de los militares, la lucha contra el narcotráfico y el reforzamiento del estado de derecho.
Pero en temas como asistencia para el desarrollo, las aportaciones han sido mínimas y en algunos años no han existido, dice el medio.
“Los datos gubernamentales muestran que México recibió más recursos en los primeros años de operación de la Iniciativa Mérida, surgida en 2009. Pero a partir de 2011 comenzó el descenso. Para 2012, las aportaciones ya habían bajado a 329 millones de dólares; en 2013 fueron de 265 millones; en 2014 de 206 millones, y el año pasado solamente 161 millones de dólares.”, señala la información.
