Por primera vez en su historia, la ex empresa paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) -ahora Productiva del Estado- firmó un contrato de licencia para la exploración y extracción de hidrocarburos en aguas profundas con la estadounidense Chevron y con la japonesa Inpex.
Esto dentro de la Ronda Uno, para un campo que no les fue asignado a las petroleras extranjeras de la iniciativa privada, sino que ganaron mediante una licitación para el área contractual 3 del Cinturón Plegado Perdido en el Golfo de México.
Este es un contrato por el que se compitió en la cuarta licitación de la Ronda Uno, para la exploración y extracción de hidrocarburos en campos de aguas profundas. La asociación tendrá una vigencia de 35 años y generará una inversión de 2 mil millones de dólares.
Por otra parte, Pemex atraviesa también la peor crisis económica de su historia, ya que el año pasado reportó pérdidas por 296 mil millones de pesos, según publicó ayer en su informe del último trimestre de 2016.
Con estas pérdidas se extendió una mala racha de más de cuatro años en números rojos, aunque la empresa Productiva del Estado dijo que era muy inferior a la del año anterior, gracias, explicó, a sus políticas de “austeridad” y “eficiencia” en el gasto.
En enero pasado, el presidente Enrique Peña Nieto reiteró que el aumento en los precios de la gasolina era un tema inaplazable y reconoció que “la gallina de los huevos de oro [Pemex]” se secó en México.
“La gallina de los huevos de oro [Pemex] se secó. Cantarell se nos fue secando. Mantener un precio artificial en 2017 habría significado un gasto adicional de más de 200 mil millones de pesos”, expuso el Ejecutivo federal en un mensaje en el marco de la ceremonia sobre Prestaciones Sociales para el blindaje de la Economía Familiar.
Luego agregó: “Hemos disminuido nuestra plataforma de producción, hoy producimos menos petróleo que antes, se acabó la gran plataforma”, por ello Pemex busca acuerdos con empresas extranjeras para revertir el declive de su producción.
De acuerdo con el informe del el cuarto trimestre de 2016, enviado hoy a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la Empresa Productiva del Estado registró una pérdida de 296 mil millones de pesos, 58.5 por ciento menos que en 2015, que fue de 712 mil 600 millones
El resultado se suma a los más de 1.4 billones de pesos -alrededor de 77 mil millones de dólares, según el tipo de cambio en ese entonces- de pérdidas ininterrumpidas desde el último trimestre de 2012.
También tuvo una disminución en pago de impuestos, los cuales fueron de 306 mil 514 millones de pesos, mientras que en 2015 fueron de 331 mil 500 millones. “Principalmente como consecuencia de una disminución de 10.2 por ciento en las ventas nacionales, y en menor medida, una disminución de 3 por ciento en las ventas de exportación”, detalló la petrolera.
Esta disminución en las ventas, dijo, está relacionada con el decremento de 34.9 por ciento en las ventas de gas licuado de petróleo (GLP), debido a la pérdida de mercado derivada de la competencia por apertura en las importaciones en 2016.
En el reporte señala también que su deuda financiera total ascendió a 95.972 millones de dólares, superior en un 32.8 por ciento a la registrada a finales de 2015, de la cual el 91 por ciento es de largo plazo.