La zona turística de la Delegación Playas de Tijuana enfrenta un fuerte desgaste de sus avenidas, lo que deriva en baches, que, además de dar mala imagen de uno de los puntos más visitados de la ciudad, representan un riesgo para los automovilistas que las transitan todos los días.
Arterias como la calle de la Nieve y la Avenida del Farallón, localizadas en las inmediaciones del malecón y recorridas por ZETA, dan cuenta de grietas, agujeros y otro tipo de deformaciones que se extienden por gran parte del pavimento.
Llama la atención que incluso en la intersección del Paseo Ensenada y Paseo Playas de Tijuana –principal acceso a la demarcación– son visibles las fisuras en la vialidad, por la que confluyen la mayoría de quienes radican, trabajan o visitan el sector.
Pero la problemática no se circunscribe solamente a las cercanías de la costa, Elena García, residente de la colonia El Mirador, declaró que desde hace más de una década la avenida Punta San Juanico –donde reside– “está totalmente deshecha, toda la calle”.
De acuerdo a la mujer, desde que comenzaron los desperfectos en la vialidad en 2006, durante la administración de Jorge Hank como presidente municipal se han hecho peticiones de reparación, pero cuatro administraciones después, ninguna autoridad ha ejecutado acción alguna.
En una visita que Elena hizo a las oficinas de la Delegación para exigir atención a la delegada Juana Suzuki Villegas Torres, proporcionó a este semanario la documentación que los vecinos hicieron llegar al Ayuntamiento a lo largo de diez años.
La delegada la recibió e instó a presentar otra vez la solicitud el próximo 11 de febrero en esas oficinas, cuando el gobierno de la ciudad organizará un foro de consulta ciudadana en la demarcación, para que los residentes hagan peticiones y externen inconformidades. Sobre el largo lapso de desatención, la funcionaria solicitó paciencia, bajo el argumento de tener pocas semanas en el cargo.
“Yo también caigo en los baches”, dijo Villegas Torres en entrevista para ZETA; y contó que si bien no pueden realizarse obras de bacheo durante la temporada de lluvias, por representan un “doble gasto”; no obstante, las cuadrillas de la delegación han colocado “triturado” –residuos de concreto– para aminorar las afectaciones.
Explicó que el Ayuntamiento anterior dejó por lo menos 60 solicitudes sin atender en la materia, y señaló que espera que desde el gobierno municipal central sean proporcionados entre 1.6 y 1.9 millones de pesos para ejecutar acciones de bacheo, que arrancarían tentativamente después del 15 de febrero. Aún no hay fecha definida pese a que el actual gobierno ya cumplió dos meses de haber arrancado.
Por su parte, el secretario de Desarrollo Urbano y Ecología, Alejandro Lomelín Clapera, sostuvo que actualmente se están haciendo adecuaciones al presupuesto de egresos de la municipalidad para contemplar acciones de bacheo que arrancarían a finales de febrero; no obstante, admitió que ese programa sigue “en valoración”.
Una vez que ese análisis termine en alrededor de dos semanas, se gestionarán los recursos necesarios con el Gobierno del Estado y la Federación; según él, responsable de las obras públicas de la ciudad, todavía no tiene un estimado de cuánto dinero necesitará para bachear Tijuana.