El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, prometió este martes a los directivos de las automotrices General Motors (Mary Barra), Fiat Chrysler (Sergio Marchionne) y Ford (Mark Fields), que reducirá regulaciones medioambientales e impuestos para que las empresas regresen a Estados Unidos, construyan nuevas plantas e impulsen empleo en aquel país.
El republicano inició su reunión en la Casa Blanca con los máximos directivos de los tres principales fabricantes estadounidenses de automóviles, al afirmar que no se había ensañado con el sector a pesar de sus constantes críticas y amenazas a los fabricantes.
“Tenemos un gran impulso para tener plantas de automóviles y otras plantas”, dijo a periodistas el mandatario estadounidense quien asumió el cargo el viernes pasado, sucediendo en el cargo al demócrata Barack Obama, antes de la reunión a puerta cerrada con los directivos.
“¡Quiero que se construyan plantas nuevas para automóviles vendidos aquí!”, señaló el republicano en su cuenta de la red social Twitter, antes del desayuno con los ejecutivos de las automotrices. “Estamos haciendo el proceso más simple para la industria automotriz, para todos los demás que quieran hacer negocios en Estados Unidos”, dijo durante la reunión.
Trump prometió a los directivos que con estos cambios, “ustedes van a encontrar esto, de ser bastante inhospitalario a extremadamente hospitalario. Creo que vamos a pasar ser uno de los países más amigables [para la inversión], y ahora no lo es” precisó.
El mandatario afirmó que existen inversionistas que quieren construir en Estados Unidos y han esperado muchos años para obtener los permisos ambientales “por algo que nadie ha escuchado antes, es absolutamente una locura”.
“Yo soy en gran medida un ambientalista, créanme, pero [las regulaciones] es algo fuera de control y vamos a hacer que el proceso sea muy corto, ya sea que obtengan los permisos y no los obtenga, pero lo van a saber pronto”, abundó Trump.
El republicano aseguró, además, que su administración hará que la obtención de estos permisos sean algo seguro en la mayoría de los casos, “de manera que vamos a ser bastante amigables”.
Trump ha venido criticado a las automotrices, en especial a Ford y a GM, por construir vehículos en México y en otros países y ha amenazado con imponer aranceles de 35 por ciento sobre los autos importados.
-Con información de agencias.
