Hasta la tarde del 31 de enero han sido asesinadas 102 personas en Tijuana, gran parte de ellas involucradas en el crimen organizado, según datos de la Procuraduría General de Justicia en el Estado.
Sin embargo, mientras que durante las últimas crisis de violencia quienes perpetraban los asesinatos eran sicarios a sueldo, ahora “son los mismos narcomenudistas los que se están matando entre ellos”, señaló el coordinador de la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales, Miguel Ángel Guerrero Castro.
“Ya no hay un pago como el que resultaba para ellos (los criminales) el ir a matar a una persona; ya ahorita ya están por órdenes de sus mismos patrones pagándoles inclusive con droga para eliminar a grupos rivales y de los mismos grupos de ellos”, contó la tarde de este martes 31 de enero.
En entrevista, el funcionario relató que en la Delegación Sánchez Taboada “hay una pugna entre lo que era la gente de ´El Gross´, que sabemos que es Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) asociado con el CAF (Cartel Arellano Félix), contra lo que era la célula de ´El Güero Chompas´ y “Los Aquiles´; ahí en Sánchez Taboada están a tres fuegos”.
Ese tipo de conflictos entre quienes se disputan los puntos de venta de droga se han extendido a la Zona Este de la ciudad, principalmente al fraccionamiento Villas del Campo y Parajes del Valle. Guerrero Castro explicó que incluso han sido asesinados miembros del mismo cártel, pero de diferente célula.
“Por pelearse una esquina: un punto en el cual se vende más droga, lo van a pelear y están ejecutando al rival contrario”, apuntó. Del centenar de cadáveres que el crimen ha dejado, alrededor de 60 por ciento son reclamados, “son mucho deportado y tatuado los que hemos visto en los eventos de violencia”, dijo
A cuestionamiento expreso de ZETA, el funcionario anotó que gran parte de las víctimas “son gente que no tiene oficio ni beneficio, que no trabaja y que se dedica a la venta de la droga”, y enfatizó que no ha habido agredidos de manera colateral en los hechos violentos.
