La asociación civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), aseguró que el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, “manipula la verdad” al decir que no dejará endeudada a la entidad, ya que sus obras “comprometieron a varias generaciones” con un pasivo de 47 mil millones de pesos.
A pesar de que en su último informe de gobierno, el domingo pasado, el mandatario local aseguró que durante su administración no pidió “ni un solo peso prestado”, no quiere decir que no haya encontrado maneras de comprometer los ingresos estatales a futuro, señaló MCCI.
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Tras una verificación que realizó la organización de las afirmaciones de Moreno Valle en torno a los pasivos que su administración, la organización aseguró que es “más que cuestionable” la aseveración del mandatario en el sentido de que diversas obras se hicieron sin recurrir a deuda.
En primer lugar, sostuvo MCCI, el gobernador tomó como respaldo solo a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), a la que reportó, al cierre de 2015, una deuda de 8 mil 608 millones de pesos. Sin embargo, como cualquier otro mandatario estatal, sólo está obligado a inscribir en la dependencia federal la deuda que se debe pagar con aportaciones de la Federación, por tanto, dejó fuera de ese registro todo tipo de pasivo adquirido bajo cualquier otra modalidad.
Por ello, Moreno Valle “manipula la verdad”, ya que en el documento de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) titulado Análisis del Informe de Avance de Gestión Financiera 2016, publicado en agosto del año pasado, el organismo hizo “un ejercicio revelador”, al comparar las cifras que los estados reportan en sus cuentas públicas, con lo que informan de manera trimestral a la SHCP.
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Con ello se demostró, afirmó MCCI, que al cierre de 2015, la cuenta pública de Puebla reportó una deuda de 24 mil 655 millones, es decir, 16 mil millones más de lo que el Ejecutivo poblano le reportó a la SHCP.
Esos 24 mil 655 millones, detalló la organización, se componen de la siguiente manera: 93 millones 700 mil por deuda de corto plazo; 5 mil 522 millones 300 mil por deuda de largo plazo y 19 mil 39 millones 200 mil, por “otros pasivos”.
Sin embargo, el acumulado no termina ahí, afirmó la investigación del MCCI, ya que en los últimos años Puebla contrajo otras obligaciones financieras, y citando al Centro de Estudios Económicos Espinosa Yglesias (CEEY), señaló que los ingresos del estado están comprometidos por el mecanismo que se utilizó para la construcción del Centro Integral de Servicios (CIS), con el cual se contrajeron pasivos por 4 mil 500 millones de pesos a pagar en los próximos 25 años.
De la misma forma, la edificación del Museo Internacional del Barroco (MIB), que significó deuda por 7 mil 176 millones de pesos pagaderos a 23 años, y por los pasivos para financiar el apoyo a la instalación de la planta armadora de automóviles Audi -inscrita como APP- que ascienden a 10 mil 800 millones de pesos, a liquidar en los próximos 15 años.
Esas tres obras, que suman pasivos por 22 mil 476 millones de pesos, se financiaron bajo el fideicomiso 0144, firmado con la empresa Evercore, propiedad de Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, puntualizó Dulce Ramos, la autora de la investigación.
El objeto del fideicomiso es pagar a proveedores y contratistas del estado mediante Proyectos de Prestación de Servicios (PPS) o Proyectos de Inversión (PI), abundó MCCI, por lo que Evercore recibirá todos los ingresos que el gobierno estatal obtenga por el Impuesto Sobre Nómina (ISN) por los próximos 50 años, mecanismo del que no hay manera de transparentar.
Por ello, insistió MCCI en que la suma de los compromisos financieros para pagar las obras del fideicomiso, agregada a lo que reportó la ASF permitirían estimar que lo que el estado ha de pagar asciende a, por lo menos, 47 mil 131 millones de pesos.
