Se trata del mismo Videgaray, el ex secretario de Hacienda; con la única diferencia de que ahora luce barbado. Se reincorpora al gabinete luego de cuatro meses de retiro. El pasado miércoles, quedó al frente de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Apelando a la retórica de humildad, admitió “no ser diplomático” y que está a dispuesto a aprender del personal de la dependencia, listo para “hacer equipo”. Habló del momento actual, “las amenazas ahí están”. Incluso alertó: “México nos necesita a todos más que nunca”.
Lo cierto es que su designación, como titular de la SRE, se dio en un contexto de adversidad a nivel nacional, habida cuenta de los estragos que sufrieron distintos sectores, el martes 03, con la cancelación de una inversión de Ford Motor Company, consistente en mil 600 millones de dólares para construir una planta en San Luis Potosí, el aumento de más del 40 por ciento en la gasolina y el “máximo histórico” que alcanzó el valor de la moneda americana en México, cotizándose en 21.40 pesos en instituciones bancarias; algunos de éstos, producto de las reformas hechas por el propio Videgaray .
Videgaray fue uno de los maquinadores de las “reformas estructurales” del Presidente Peña Nieto, quien en un acto se refirió al estado de cosas que guarda la nación como “escenarios a lo mejor complejos” y reconoció que existen “desafíos que superar”.
Hizo referencia al tema de los gasolinazos, después de que el alza en el precio del combustible implementado el primero de enero, levantara protestas en buena parte del territorio.
En su mensaje oficial, “el primero que tengo este inicio de año”, hizo hincapié, y el cual se dio en el marco oficial de designación del nuevo canciller, Peña Nieto aseguró que “el ajuste en el precio de la gasolina no es resultado de la reforma energética ni de la hacendaria”. Según él: “refleja más bien…el aumento en los precios internacionales de la gasolina”.
A propósito, el diputado federal panista Wenceslao Martínez Santos, en entrevista con ZETA sostuvo que “la decisión del incremento” recayó en “el Ejecutivo federal por medio de la Secretaría de Hacienda, donde ellos establecen los precios de referencia básicamente combinados con lo que tenemos de los precios internacionales”. Y recalcó: “no han incrementado los precios internacionales”.
Sobre la encomienda que tiene Videgaray, a cargo de la relación de México con otros países, en su momento, Enrique Peña Nieto tocó el tema de la próxima toma de posesión, como 45° presidente estadounidense, de Donald Trump, quien se ha distinguido por manejar un discurso antimexicano. Los objetivos en el ámbito de la relación bilateral, mencionó el priista mexiquense, “deberán alcanzarse en todo momento, promoviendo los intereses de México y sin menoscabo de nuestra soberanía y de la dignidad de los mexicanos”.
En la antesala del relevo, en el que la figura saliente fue Claudia Ruiz Massieu, el nombre de Donald Trump ya había salido a relucir. Según un reporte de Notimex, una institución financiera (Banco Base) señala que la Ford pudo haber reculado en su pretensión de invertir en el país por amenazas de Trump de “imponer aranceles” en detrimento de la Inversión Extranjera Directa en México. El asunto no quedaría ahí, según cita la agencia informativa, la depreciación del peso de 1.66 por ciento, vino tras el anuncio que la compañía automotriz hizo de la cancelación del proyecto en S.L.P.
Luis Videgaray se reestrena como Secretario, en un entorno marcado por los condicionamientos arancelarios de Trump, el supuesto acatamiento de Ford Motor Company y la repercusión en la paridad peso-dólar; cuando el magnate estadounidense aún no toma posesión. Por lo visto, solo se trata del preámbulo de lo que Videgaray Caso habrá de enfrentar una vez que Trump asuma la presidencia de su país.
