La Diócesis de Saltillo confirmó a través de un comunicado firmado por el obispo Raúl Vera López, y emitido la tarde de este jueves, el hallazgo sin vida del cuerpo del sacerdote desaparecido, Joaquín Hernández Sifuentes, junto a otras dos personas muertas, dentro de un automóvil de su propiedad, modelo Derby, marca Volkswagen, con placas FKM-3200 de Coahuila, en la colonia Residencial Cuauhtémoc, en el municipio de Santa Catarina, en Nuevo León.
“Un abrazo lleno de cariño para la señora Juanita, madre del padre Joaquín y a cada una de sus hermanas y hermanos, pues compartimos con ella y ellos el dolor y consternación que hechos violentos como este provocan. A nosotros también nos ha arrebatado a un hermano y a un hijo. Descanse en paz, el presbítero Joaquín Hernández Sifuentes”, se lee en el comunicado también firmado por Gerardo Escareño Arciniega, vicario general.
Agradecieron a los integrantes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJE) las investigaciones que realizaron para dar con el paradero del religioso. Además, indicó que la velación del religioso será el domingo 15 de enero en la capilla del Seminario Diocesano desde las 12:00 hasta las 24:00 horas.
Esto también lo aseguró, por su parte, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), en un comunicado en el que señaló que: “En estos momentos de temor y sufrimiento los cristianos, con esperanza en Cristo resucitado, estamos ciertos que el mal no vencerá y que la muerte no es el final del mensaje de amor y esperanza que trajo nuestro Señor Jesucristo y que encarnó en su vida ministerial el padre Joaquín”.
“Pedimos a Dios por su eterno descanso y también pedimos para que el Señor conceda a sus familiares y amigos la fortaleza, la esperanza y el consuelo de la fe”, señaló en su comunicación firmada por el cardenal Francisco Robles Ortega, presidente de la CEM y Alfonso Miranda Guardiola, secretario general del organismo episcopal.
El pasado 7 de enero la Diócesis de Saltillo reportó la desaparición del sacerdote Hernández Sifuentes, del que se desconocía su paradero desde el 3 de enero, cuando se le vio por última vez en su domicilio contiguo al templo que está ubicado en la colonia La Aurora, en Saltillo.
Según el propio escrito firmado por el Obispo de Saltillo, Hernández Sifuentes tomaría vacaciones tras celebrar la misa de Año Nuevo. Sin embargo, el religioso tuvo que realizar un viaje a Monclova, por lo que su periodo vacacional inició a partir del martes, por lo que estaba contemplada la reincorporación a su labor pastoral para el 7 de enero.
Por lo menos 31 sacerdotes han sido asesinados en México desde el año 2006. A finales del año pasado, tres sacerdotes fueron secuestrados en el estado de Veracruz. Uno apareció con vida y los otros dos muertos a tiros. Otro sacerdote fue asesinado en Michoacán en septiembre.