La agencia de noticias Amaq, afiliada al grupo extremista yihadistas Estado Islámico (EI), aseguró este martes, que el hombre que perpetró el ataque contra un mercadillo de Navidad en Berlín, Alemania, es un “soldado” del grupo terrorista.
A través de un breve comunicado publicado en su página web, la agencia señaló que la operación responde a “los llamamientos a atacar a los ciudadanos de los países [que integran] la coalición internacional” que actúa contra el EI en Siria y en Irak.
Horas antes, la Fiscalía alemana tuvo que dejar libre a uno de los sospechosos detenido anoche después de que un camión arrollara a los visitantes de un mercadillo navideño, por no contar con suficientes pruebas incriminatorias sobre su responsabilidad en la muerte de 12 personas.
“Los resultados de las investigaciones llevadas a cabo hasta el momento indican que no hay sospechas fundamentadas contra el acusado”, manifestó el organismo en un comunicado.
El hombre, un joven de 23 años que residía en el albergue de refugiados instalado en uno de los hangares del antiguo aeropuerto de Tempelhof, dio mucha información durante los interrogatorios a los que fue sometido, pero negó haber participado en el atentado.
Testigos oculares vieron cómo el conductor del camión que arrolló a los visitantes del mercadillo huía del lugar de los hechos, pero en su persecución hubo lagunas, destacó la Fiscalía.
Las pruebas y análisis llevadas a cabo para comprobar si el detenido estuvo en la cabina del camión no han dado hasta ahora resultados, añadió para justificar la puesta en libertad.
El joven paquistaní, fichado por la policía por delitos menores pero en ninguna base de datos de presuntos terroristas, fue detenido por un coche patrulla a unos dos kilómetros del lugar del atentado, junto a la Columna de la Victoria, situada en el céntrico Tiergarten.
Según habían explicado el ministro de Interior, Thomas de Maizière, el hombre entró en Alemania el 31 de diciembre de 2015 en Alemania tras haber supuestamente atravesado la ruta de los Balcanes y llegó a Berlín en febrero.
Antes, en una declaración institucional, la canciller alemana, Angela Merkel, cuestionada por su política de acogida de refugiados, había reconocido que sería “especialmente repugnante” si se confirmara que el autor del atentado en el que murieron doce personas era una persona que había pedido asilo en Alemania.