Con 22 votos a favor, uno en contra y cuatro abstenciones, la LIII Legislatura del Congreso de Morelos avaló este viernes destituir a Cuauhtémoc Blanco Bravo como alcalde de Cuernavaca, luego de la petición de la revocación de mandato hecha por 17 diputados locales, por supuestamente no contar con los requisitos de elegibilidad para el cargo.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) había ordenado que el Congreso se abstuviera de ejecutar lo que se llegara a resolver en el procedimiento, pero la resolución no impedía que el Poder Ejecutivo estatal continuara el procedimiento de revocación del mandato hasta su conclusión.
Por ello, el Legislativo morelense informó a través de un comunicado, que la Comisión de Gobernación, Gran Jurado y Ética parlamentaria continuará en el procedimiento de revocación, esto con el fin de no caer en ninguna omisión y hasta donde la suspensión se lo permita.
Blanco Bravo seguirá en funciones como alcalde hasta que la Suprema Corte resuelva la Controversia Constitucional 214/2016 de fondo, que añade que los legisladores vulneran “la legitimidad, integración democrática y la autonomía” municipal, interpuesta por el exfutbolista para evitar su destitución.
“Lo anterior, con el fin de preservar la materia del juicio, salvaguardar la autonomía del Municipio, el adecuado ejercicio de las funciones que corresponden a su Ayuntamiento y evitar que se le cause un daño irreparable, sin que ello implique, en modo alguno, prorrogar el mandato de su Presidente Municipal”, explicó el ministro Alberto Pérez Dayan, quien presentó el recurso el pasado martes 6 de diciembre.
El ex futbolista reclamó la constitucionalidad de los artículos 41, fracción IV, de la Constitución del Estado de Morelos; así como de los artículos 182 y 183 de la Ley Orgánica Municipal.
Además de la controversia constitucional, Blanco obtuvo ayer un segundo recurso en contra de la revocación de su mandato, ya que ayer un juez le otorgó una suspensión provisional para que no sea removido de su cargo.
“El efecto de la medida cautelar es para que, sin suspender el procedimiento de revocación de mandato, de emitirse resolución que declare procedente el mismo, no se ejecute esa determinación, esto es, el quejoso no sea separado del cargo”, resolvió la juez cuarta de distrito de Morelos en el amparo 2078/2016.
En su resolución, la juez citó para el 14 de diciembre a las partes para desahogar la audiencia incidental, en la cual la autoridad analizará las pruebas y decidirá si la suspensión provisional se retira o queda permanente, mientras que el 6 de enero se analizará el fondo del amparo, donde se determinará si Blanco puede o no ser revocado de su cargo.
De acuerdo con Cipriano Sotelo, abogado de Cuauhtémoc Blanco, la suspensión provisional ya fue notificada tanto al alcalde como al Congreso de Morelos. El defensor detalló que este recurso legal es paralelo a la controversia que analiza la Suprema Corte, indica un reporte del diario Reforma.
“La controversia es porque el Congreso estatal no puede dejar al municipio sin alcalde y el amparo lo presenta Blanco como ciudadano, diciendo que a él no lo pueden destituir de su cargo”, señaló.
Los diputados fundaron la revocación en que el ex futbolista supuestamente carecía de los requisitos de elegibilidad para el cargo de alcalde [de por lo menos 10 años de residencia], por mostrar una credencial de elector falsa al momento de su registro.
En diciembre de 2015 un particular presentó denuncia ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE) de la PGR contra Blanco Bravo por la presunta “falsificación de documentos, proporcionar información falsa para alterar el Registro Nacional de Ciudadanos, para obtener el documento que acreditó la falsa ciudadanía, en perjuicio del Ayuntamiento de Cuernavaca y por ende de sus gobernados”.
Según el denunciante, Blanco incumple con los 10 años de residencia exigidos por la ley para contender por una presidencia municipal en Morelos, debido a que conforme con su profesión, cita el denunciante, el ex futbolista radicó de 1973 al 2000 en el DF; de 2000 al 2001 en Valladolid, España; del año 2002 hasta junio de 2004 nuevamente tiene residencia en DF; del mes de julio de 2004 a febrero de 2005 en Veracruz, Veracruz.
Luego, del mes de marzo de 2005 al 2 de abril de 2007 nuevamente en el DF; del 1 de abril de 2007 al 2010 ubicó su residencia en la ciudad de Chicago, Estados Unidos; del año 2010 al 2013 sostenía residencia en los estados de Veracruz, Guanajuato y Sinaloa; y finalmente del año 2013 a la fecha en el estado de Puebla.
Los diputados usaron pruebas presentadas en contra de Blanco, las cuales suman más de 8 mil, que fueron aportadas principalmente por los hermanos Julio y Roberto Yáñez Moreno y la dirigencia del Partido Social Demócrata (PSD).
Blanco Bravo acusó a el hijastro del gobernador perredista Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, y actual dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) estatal, de pagar hasta 2 millones de pesos a cada uno de los 30 diputados locales, para que lleven a cabo este procedimiento de destitución en “fast track”.
El presidente municipal de Cuernavaca pidió a sus detractores “que lo dejen trabajar”, al tiempo que aseguró que está preparado para responder al proceso de revocación de mandato que se ha iniciado en el Congreso del estado.
El pasado domingo, el gobernador de Morelos rechazó formar parte de un complot para destituir a Cuauhtémoc Blanco como alcalde de Cuernavaca.
“Yo en absoluto. Te puedo decir que no he hecho ningún acuerdo. Yo he tratado con respeto al señor Cuauhtémoc Blanco. Yo no voy a utilizar mi cargo ni para dañarlo ni para protegerlo. Respeto la convicción de los diputados, y no sólo son los diputados del Partido de la Revolución Democrática, sino todos los diputados o casi todos. No es el PRD ni Rodrigo Gayosso [Cepeda, hijo de la esposa del gobernador]”, afirmó el mandatario estatal.
Graco Ramírez respondió así luego de que su nombre fue mencionado en una conversación telefónica entre Julio Yáñez Moreno, diputado local por el PSD, y un hombre, cuyo audio fue filtrado a la prensa, en donde supuestamente planearon la salida de Blanco de la Alcaldía de Cuernavaca.
El gobernador dijo que el alcalde debe ser escuchado porque tiene la garantía de presunción de inocencia, “aunque todos sabemos cómo llegó falsificando documentos de residencia, todos los sabemos, el que diga que no, está mintiendo”.
Por su parte, Cuauhtémoc Blanco dijo que el proceso que han iniciado los diputados para destituirlo “son chingaderas”, y advirtió que no dejará el cargo: “A mí me gustan los trancazos. Esto es de orgullo, mi hermano, vamos a ver quién puede más”, subrayó.
En breve entrevista con distintos medios de comunicación, Blanco Bravo aseguró que actualmente no piensa en la gubernatura, sino en hacer un papel honroso con la gente de Cuernavaca. “Primero lo primero, ya después veremos el futuro. Ahorita pienso en la alcaldía nomás”.
Además, destacó que detrás de la campaña en su contra se encuentra el temor que tiene el grupo en el poder, encabezado por el gobernador perredista y su hijastro Gayosso Cepeda, actual presidente del PRD en Morelos, quienes lo ven como “un peligro” para disputarle al segundo la gubernatura en la elección de 2018.
“Ellos son 40 personas, nosotros somos un chingo, ¿eh? ¡Aguas! ¡Aguas con la gente! ¡Aguas porque somos un chingo! No se metan con la gente, la gente se ha dado cuenta de lo que quieren hacer. La gente está cansada. Somos un buen. La gente está fastidiada”, amenazó el alcalde.
