“Solo en cuarenta días le pegaron como a diez negocios”, dice Rafael Chávez Montaño, presidente de la CANACO en Ensenada, sobre ola de atracos que enfrentan propietarios de tiendas en la Calle Primera, desde la segunda mitad de 2016
A los comerciantes de la turística calle Primera los traen de encargo. Los eventuales “cristalazos” a sus locales y la suciedad que les dejan borrachos y locos en sus fachadas, ahora se ven agravados con una racha de robos con particular modus operandi.
De unos meses para acá -algunos refieren desde octubre, otros desde junio de este año- curios, farmacias, restaurantes y otros giros turísticos de esa calle, príncipalmente en sus cruces con las calles Ruiz, Miramar y Gastélum, han padecido la afrenta de “coscorroneros”, que es como se le llama a los ladrones que actuán por la madrugada y que hacen agujeros en los techos para introducirse a los establecimientos.
La situación se agravó en los meses de octubre y noviembre, coincidentemente en el período de transición del gobierno municipal, y durante el conflicto de intereses al interior de la Policía Muncipal por la cuestión de los ascensos. Los afectados presumen que se relajó la vigilancia.
“Solo en cuarenta días le pegaron como a diez negocios”, contabiliza Rafael Chávez Montaño, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CANACO) local y propietario de la óptica Piwi, ubicada sobre la misma calle. “No, nunca habían ocurrido este tipo de robos, es una banda”, agrega.
Lo común, dice, eran los simples “critalazos”, “hubo uno, pero fue un pinche loco, de esos que hay un montón”. Refiere que tienen “clientes” habituales como “La Pichirila” o “El Hediondo”, vagos que causan vergüenza y mal aspecto, pero de ahí no pasa: “Pero ahí no puedes decir que son robos”.
Locatarios consultados por ZETA contabilizan de 12 a 15 robos, incluyendo tres farmacias, la Happy y American Farms entre ellas. A locales como Casa Ramírez, Plaza Mauina que alberga varios locales, Plaza Adobe, y a un restaurante en la esquina de Primera y Gastélum, entre otros.
Plaza Mauina alberga una docena de locales, curios en la planta baja y oficinas de varios giros en el segundo piso. “Afortunadamente no nos robaron a nosotros”, expresa el propietario de Curios Rule’s Place, pero sí atacaron cuatro locales de la planta alta.
En un local de tattoos robaron una laptop y una máquina para hacer tatuajes, y de la oficina de una cooperativa sacaron herramientas y computadoras. Los ladrones hasta dejaron tirados los martillos con los que derribaron las puertas. Entraron por el estacionamiento subterráneo: “Se supone que aquí en la plaza debe haber guardia, pero dicen que el señor se sale al bar de enseguida a echarse unas cervezas”, narra Alonso, locatario.
Respecto a la seguridad policíaca, externa: “Pues según dicen que vigilan, mientras está uno aquí pues ahí andan los policías, ahorita como hay barco se les ve seguido, pero ya que nos vamos nosotros, no sabemos si andan en la noche”.
Entre los comercios de “la Primera” sobresale por sus finos acabados Plaza Adobe, donde predominan los cristales, piedra y madera. Alberga varios locales sin separación entre ellos. Artesanías, cerámica, joyería y demás artículos, algunos de alto valor, se ofrecen en el espacio.
Al centro de la plaza hay un domo y una palmera que crece hacia al exterior y sale por un agujero, por ahí se metieron los ladrones, “se bajaron trepando por la palmera, como changos”, afirma Iván Bautista, uno de los locatorios.
La plaza tiene entrada por la calle Primera y por la Gastélum, hay una cámara de video viglancia en la contraesquina, y un taquero que se instala afuera a las cinco de la mañana. Ni uno ni otro sirvieron de testimonio. “Le pegaron duro a la joyería, hay mucha lana ahí invertida”, se lamentan.
Fue un domingo en la madrugada, igualmente se metieron por el estacionamiento, cortaron cables, se dieron vuelo llevándose relojes, artículos de piel, joyas y dinero en efectivo. Como en el resto de los casos, se puso la denuncia ante el Ministerio Público.
“No se ha resuelto nada, no han dicho nada, si ya van tras alguien, se nos hace raro porque hay cámaras, supuestamente aquella de allá tuvo que haber visto cuando salieron. Además el alumbrado de aquí vale para pura madre, está bien oscuro, la Policía anda durante el día, pero en la noche nomás quedan dos o tres patrullas”.
A los comerciantes les queda claro que se trata de los mismos rateros, que conocen la zona y operan igual: “Pasa mucho malandro por aquí, y pues la verdad no se ve que la Policía haga su trabajo”.
Y aún hay más…
Los empleados de la farmacia Happy no pueden ocultar su indignación y enojo. Por un lado porque con el hurto también se afectan sus comisiones por venta, y por otro, porque no ven interés de la autoridad en atrapar a los rateros.
Aseguran que le entregaron a los policías ministeriales videos grabados por sus propias cámaras dentro del establecimiento, de donde los ladrones se llevaron una fuerte inversión de lentes para el sol, televisión, computadoras, 80 dólares en efectivo y gran cantidad del medicamento Ibuprofeno.
“Sabemos quiénes fueron, aquí los vemos caminando libremente, ya les dijimos a los ministeriales, les enseñamos fotos, qué más, les dijimos: ‘Mira, ahí están en el callejón Chamula, en el cuarto 19”. Los afectados le mandan decir a la autoridad que se trata del “Tamarindo”, un hombre de entre 25 y 30 años, con aspecto de drogadicto y que lidera una bandita que se resguarda en el callejón aledaño al tugurio París de Noche, table de travestís muy socorrido por gringos y funcionarios del gobierno.
Al “Tamarindo” lo ven seguido, y lo reconocen como llegado a la zona de un año a la fecha, “no es de los malandros viejos, porque esos de perdida se quedan en su área”. Cuentan que aunque los policías lo ven, no pueden hacer nada por los lineamientos que les impone el Nuevo Sistema de Justicia Penal, pero los ministeriales, que acudieron varias veces, tampoco le han dado seguimiento.
El empleado de la farmacia dice que su patrón ya ni insiste y mejor se resigna ante la inutilidad de haber puesto la denuncia al Ministerio Público: “¿Para qué?, si no han hecho nada en todos estos meses, ¿la impotencia a qué te lleva? O sigues teniendo ese mal sabor, o lo superas y sigues adelante, porque como todo mexicano pues le sacas el humor, ¿qué nos toca?, más que aguantar. Si es un delito contra uno, ¿qué haces? Agarrar un arma y darle seguimiento uno mismo… pero no tenemos armas, pues”.
El mismo sinsabor comparten en la farmacia American Farms, ubicada a unos cuantos metros del famoso antro Papas & Beer y la cantina Hussong’s, donde los cacos rompieron un vidrio con la intención de llevarse un cajero ATM cargado de dólares, instalado en el interior del local.
No pudieron lograr su objetivo porque el cajero está anclado al suelo, pero arremetieron contra unos telefonos celulares de los empleados y el dinero en cajas, 650 dólares y 2 mil 500 pesos.
“Sí hicimos la denuncia y todo, vinieron los ministeriales, tomaron huellas, hay una cámara en la calle pero dicen que no llega hasta allá la imagen, nosotros tenemos cámaras en el local pero cortaron la corriente. Ha habido bastantes robos en este pedazo de la calle, aquí pasa mucho malandro, muchos que trabajan en los bares”, repite la historia David Manríquez, empleado del local.
Pese a no saberse del avance de las investigaciones, el presidente de la CANACO refiere que el hasta hace poco subprocurador de Justicia en el Estado, Marco Antonio Chavarría, fue muy diligente para atender los casos: “Él personalmente vino, estuvo atendiendo todo, no se ha aclarado nada, no se ha agarrado a los responsables, pero hay videos, hay huellas, el licenciado Chavarría se dio cuenta de las pisadas, cosa que nadie había notado. Podrás decir que ese es su trabajo, pero tenemos muchos procuradores y subprocuradores que no lo hacen”.
Policía siempre en vigilia
“Debe haberse enterado”, comenta el representante de los comerciantes respecto a si el anterior director de Seguridad Pública Municipal tenía conocimiento de los robos. Mientras que el nuevo titular, Emilio Camarena Castillo, se mostró “descanchado” a la hora de ser cuestionado al respecto.
“Con las estadística que tenemos, estamos analizando para ver los horarios, la zona, los lugares donde mayormente nos ocasionan los problemas. Ya lo estamos atendiendo, se inició el operativo ‘Diciembre Seguro’, traigo 150 elementos operando, adicionales a la vigilancia normal”, declaró Camarena.
Se le insistió sobre una estrategia aplicada en concreto para los hurtos en la calle Primera y recurrió a la generalidad, que los mismos les aporten la información: “Tenemos la estructura, que los vecinos se acerquen, todos los comerciantes conocen a sus clientes, los vecinos en las colonias saben, conocen a ‘Juan’ a ‘Pedro’, al ‘Tuercas’, al ‘Rondanas’. Si ellos nos dicen, ya tenemos herramientas para combatirlos más rápido”.
La subprocuradora Norma Alica Velázquez, quien asumió ese cargo apenas el 5 de diciembre pasado, contabiliza un total de 15 robos en la zona. Enumera siete atracos a lugar cerrrado, cinco asaltos con violencia a traúsentes y tres robos simples.
“Se van a implementar operativos por parte de los comandantes, para tratar de inhibir, sobre todo en estas épocas donde tenemos más turistas, se van a hacer los operativos más frecuentes…”.
Del estatus de las investigaciones informa: “Ahorita se están integrando las carpetas de investigación, están en ese período, tenemos ya una orden de aprehensión contra una persona que se ha estado dedicando los robos en la Zona Centro. Lo traemos ahí ubicado por un robo, nada más es cuestión de poderlo detener…”.
— ¿Nada más uno?
“Sí, por lo pronto. Vamos a ver si está relacionado con otros, es lo que se está investigando ahorita, si está relacionado con otras denuncias”.
Los agentes ministeriales encargados del caso explican que los robos se dieron de marzo a noviembre, y aunque solo tienen identificado a un caco, por el modo de operar pudiera estar relacionado con otros casos, pero con el nuevo sistema de justicia necesitan allegarse más pruebas para poder vincularlo con otros robos.
— ¿Cuál es el modus operandi?
“Pues esos detalles es mejor resguardarlos, por lo que es la investigación, este sujeto todavía anda en la calle, no queremos que diga ‘ah, ya me identificaron’, a lo mejor se nos va, pero sí, hay una orden de aprehensión, lo elementos que andan en la zona ya lo andan buscando, no podría decirles, pero sí, ya es muy probable que en estos días…”.
Los agentes indican que lo más frecuente han sido “cristalazos” y asalto a ciudadanos, mientras que los robos de los “coscorroneros”, “sí se han dado pero muy pocos, los comercios han tenido la precaución de tener sus alarmas y no se ha dado mucho”.
— ¿Proporcionan video los comerciantes?
“Por lo regular el video de la cámara de afuera no graba,y los videos que tienen los comerciantes no nos proporcionan mucha información, porque no están grabando, nomás lo usan como inhibidor, es nomás para vigilar a sus empleados para que no les roben, pero les comentamos que si ponen el sistema a grabar, nosotros mandamos a unos peritos a que extraigan el video y nos sirve a nosotros como prueba plena.
“Ese tema lo tratamos con Proturismo, les comentamos que ahora bajo el Nuevo Sistema de Justicia Penal el video ya nos sirve como prueba, antes no nos servía, entonces quedamos en que ellos van a instalar un sistema que esté grabando continuamente”.
Y en efecto, ahora sobre la calle Primera se ve constantemente pasar unidades tanto de la Policía Municipal como de la Estatal Preventiva, pero los comerciantes están temerosos que una vez concluido el operativo “Diciembre Seguro”, los maleantes vuelvan a hacer de las suyas.