El presidente nacional del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, afirmó este miércoles, que ante una amenaza a la soberanía nacional y a “grandes agravios”, se pondría del lado del Presidente Enrique Peña Nieto “para defender a los mexicanos”.
En entrevista con el periodista Carlos Loret de Mola, en la cadena Televisa, López Obrador dijo que ante cualquier interés promovido por Trump, México debe defender el principio de convivencia armónica y cooperación bilateral, ya que manifestó que cerrar filas no derivará en soluciones.
“Si hubiese una amenaza a los intereses de los mexicanos, a los derechos de los migrantes, ahí estaré al lado de Peña Nieto y de quien fuese, para defender al pueblo y los intereses de la soberanía de la Nación”.
Al hablar sobre cómo se manejó la relación con el republicano Donald Trump, dijo que la clase política mexicana y la prensa cometieron un error al meterse en el tema de las elecciones en Estados Unidos, con lo que violaron el principio internacional de la “no intervención”.
Señaló que el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens Carstens, no debió comparar al presidente electo de Estados Unidos con un huracán de categoría 5, ya que “fueron declaraciones irresponsables”, aseguró.
El tabasqueño dijo que de ganar las elecciones presidenciales del 2018, debe existir una relación respetuosa con el gobierno de Estados Unidos y que “convencerán” al gobierno de Donald Trump de que lo mejor “es la cooperación”.
Señaló que si en México hay empleos, economía estable y desarrollo, el problema migratorio se acabaría.
Por otra parte, el líder nacional de Morena señaló que convocarán a un acuerdo entre todos, “estamos convocando, a decir ¡basta a la corrupción! vamos todos los mexicanos a poner por delante la honestidad y vamos a hacer de la honestidad una forma de vida y una forma de gobierno”.
“Lo que voy a proponer es que haya honestidad, y quiero, queremos, en Morena, gobernar con el ejemplo, es decir, ya no habrá un Presidente corrupto, vamos a acabar con la corrupción, ya se acabó la ratería”.
En cuanto a sus diferencias con Felipe Calderón Hinojosa y con el presidente Peña Nieto, AMLO dijo que, cuando triunfe en las próximas elecciones presidenciales, no asumirá una política persecutoria contra los mandatarios para meterlos a la cárcel, ya que su prioridad es hacer valer la separación efectiva de los poderes, de modo que el Ejecutivo deje de influir en las decisiones del Legislativo o Judicial.
Además, aseguró que el actual titular del Ejecutivo federal pasa por un momento complicado de popularidad, pues sociedad y políticos de todo le echan la culpa.
“Ya se volvió deporte nacional cuestionar a Peña Nieto, lo traen como el payaso de las cachetadas, de todo le echan la culpa, pero se olvidan que lo impulsaron, lo inflaron”, apuntó López Obrador.
El tabasqueño dijo que es “una persona feliz”, y que no odia a nadie porque asimila a sus opuestos como adversarios, mas no como enemigos.
“No odio, soy feliz. Soy feliz, porque se puede ser feliz buscando la felicidad del prójimo, qué voy yo a estar amargándome la vida. Hablamos de Salinas, del presidente del PAN, de Enrique Peña Nieto, pero se los puedo garantizar, soy sincero, no los odio. No tengo enemigos ni quiero tenerlos, tengo adversarios”.