El Tercer Informe de Gobierno de Francisco Vega de Lamadrid dista mucho del contexto que viven los bajacalifornianos. Obras sin siquiera una primera piedra, el incremento en la violencia producto del crimen organizado y acusaciones de corrupción contra sus funcionarios, son parte de la realidad de la que el mandatario no habla
En la presentación de su Tercer Informe, el gobernador Francisco Vega de Lamadrid aplicó la misma estrategia que el año pasado: ser fotografiado mientras volanteaba sonriente en los principales cruceros de la capital del Estado; como es de suponerse, lo acompañaron su esposa y un séquito de subordinados.
El que sí dio la cara al Congreso fue el secretario general de Gobierno, Francisco Rueda, que después de enfrentar los reclamos de presupuesto por parte del magisterio educativo, se presentó ante los nuevos diputados locales para entregarles el documento. Afuera los maestros enardecidos golpearon los cristales del recinto legislativo, exigiendo que los dejaran entrar, pero no lo consiguieron. Esto ocurrió el primer día de octubre.
“En BC vamos por buen camino”, expresa el folleto con el que el empresario inmobiliario resume y presume los supuestos avances de su administración, pero no es necesario un gran análisis para encontrar que el mandatario recicla logros del Segundo Informe de Gobierno, además de que varios de los puntos han sido sujetos de críticas por parte de la sociedad bajacaliforniana. Lo del “buen camino” no es más que una estrategia publicitaria.
Una curiosidad: en uno de los puntos del volanteo, un automovilista aprovechó la luz verde del semáforo para no detenerse y exclamó a los funcionarios y empleados del gobierno presentes: “¡Pónganse a trabajar!”, luego continuó su marcha.
Quien se interese por leer el volante, encontrará que Vega dividió su Informe en los siete ejes -incluidos en el Plan de Desarrollo Estatal – que para él cubren la totalidad de las necesidades del Estado. En la portada verá la estampa de un gobernador contento, que recibe un sueldo de 110 mil pesos mensuales por administrar una entidad que ha visto incrementados sus índices en la pobreza, la inseguridad y el crimen, entre otros indicadores.
VIOLENCIA Y NARCOTRÁFICO, FUERA DEL INFORME
Lo que el cuadríptico de “Kiko” Vega le presenta a los bajacalifornianos en materia de seguridad es escaso. Dice haber desarticulado a “124 bandas involucradas en delitos como robo de vehículo, secuestro, privación de libertad, extorsión”, pero no detalla quiénes son los líderes capturados ni si pertenecen a alguno de los cárteles de la droga. No han capturado a las cabecillas principales de las tres mafias de narcontraficantes que delinquen en la entidad pero sí algunos mandos como Francisco Javier Mendoza Uriarte “El Chapito”, Marco Tulio Carillo Grande “El Marlon” y Carlos Garmiño González “El Karateka”.
Destaca que más de 5 mil policías estatales y municipales han sido capacitados para respetar los Derechos Humanos, pero la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Baja California ha señalado en reiteradas ocasiones que la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) encabeza las quejas y recomendaciones por violaciones a esos derechos; van mil 652 quejas y 16 recomendaciones en este gobierno. Los tratos crueles e inhumanos se encuentran entre las principales causas.
El incremento en los homicidios, que superan los 800 tan solo en lo que va de 2016 a nivel estatal, pasó de noche en el Informe. El combate a los cárteles del narcotráfico que se disputan la plaza fronteriza fue un tema que no interesó al gobernador; la realidad es que las balaceras han vuelto a sitios concurridos, como la Zona Centro de Tijuana, inmediaciones de escuelas y de puntos de venta de comestibles. Policías son, como en los peores años, víctimas de los ataques.
En la plataforma digital “Monitor de Seguimiento Ciudadano”, que opera la Secretaría de Planeación y Finanzas y que está incluida en el sitio de internet del Gobierno del Estado, es posible revisar los avances porcentuales de cumplimiento de los ejes del Plan de Desarrollo.
Para seguridad, hay 26 indicadores que van desde la respuesta a emergencias, la incidencia delictiva y la procuración de justicia. Si se toma como base ese sistema estadístico, nuestro Estado tiene un avance de apenas el 43 por ciento global en el rubro.
De acuerdo al “Monitor”, los avances los registra el servicio de emergencias, tanto en la percepción ciudadana como el tiempo de respuesta. En contraste, temas como la eficacia de la Policía Ministerial han ido a la baja, ya que el índice de investigaciones concluidas está por debajo de lo esperado, lo mismo sucede con la procuración de justicia en el Estado en general.
Si bien el Informe plantea un escenario donde los policías se capacitan e incautan altas cantidades de droga, las ejecuciones y el derramamiento de sangre son una constante; altos jefes policiacos como Bartolomé Lam en Tecate, están siendo amenazados por el crimen organizado, aparecen cabezas cercenadas para infundir terror. Una realidad opuesta a la sonrisa de Vega en su volante.
GOBERNADOR PRESUME EMPLEOS DE HAMBRE
En un vídeo que publicó en su cuenta de Facebook con motivo del Informe¸ el gobernador de Baja California apuntó que “atraer inversiones es una de las prioridades” de su administración, con el fin de generar nuevos empleos, ahí se jactó de haber creado 47 mil de ellos, con lo que se logró reducir la tasa de desempleo del 5.9 por ciento al 2.4% en la actualidad. La inversión privada en 2016 asciende a 40 mil 700 millones de pesos.
Para alcanzar esa inversión, el gobernador ha viajado a por lo menos ocho países como parte de “dos giras de trabajo”, a costa de los recursos públicos: Bélgica, Holanda, Reino Unido, Estados Unidos, China, Taiwán, Corea y Japón, han sido algunos de sus destinos.
Sin embargo, según el economista Luis Contreras, el gobierno estatal ha sido omiso en una política que presione a los empleadores a ofrecer salarios dignos. Entrevistado por ZETA, el ex vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA) en Tijuana explicó que la industria maquiladora se lleva gran parte de los trabajadores, a los que paga en promedio mil 380 pesos semanales, inútiles para enfrentar el alza en los precios de la canasta básica, fenómeno que afecta a la mayoría de los mexicanos. Así el gobernador que se autocalifica como empresario exitoso, se congratula de crear empleos de hambre.
Por otro lado, mientras el titular del Ejecutivo estatal resalta en su Informe los 111 millones de pesos de inversión al sector agrícola, principalmente en el Valle de Mexicali, algunos agricultores se han quejado de que su administración favorece a la empresa cervecera estadunidense Constellation Brands, ofreciéndole el agua de la siembra y la cosecha. Además, dicen ser presionados a vender sus concesiones a la compañía sin que el gobernador responda; sospechan actos de corrupción.
El secretario de Desarrollo Económico, Carlo Bonfante, ha sido señalado por sendas irregularidades en su gestión, que van desde el desvío de recursos federales para favorecer a empresas de su familia, hasta defraudar al Servicio de Administración Tributaria (SAT) por millones de pesos mediante devoluciones del Impuesto al Valor Agregado. Pero Francisco Vega de Lamadrid, que en su Informe dice gobernar “con rumbo, orden y transparencia”, lo ha encubierto todo, incluso negó rotundamente que el SAT esté investigando a su subordinado y amigo. La evidencia de ZETA lo desmiente.
RECICLA “KIKO” LOGROS EN EDUCACIÓN
La preparatoria gratuita fue un logro reciclado entre el Segundo y Tercer Informe. No obstante que los recursos de administración que dejan de entrar por las cuotas de los padres de familia a las escuelas no son solventados por el gobierno.
Continuó con que más de 100 mil niños han recibido uniformes escolares, y que otros 13 mil recibieron becas educativas. Lo que evadió explicar fue cómo su administración fue incapaz de pagar a maestros interinos durante varios meses, paralizando las clases en las zonas más vulnerables de Tijuana.
Omitió el rezago en el pago de jubilaciones que requirió que el gobierno se endeudara por 2 mil millones de pesos bajo aprobación expresa de los diputados. No habló de los 342 millones de la Beca Progreso que no llegaron a las escuelas para sostener su administración.
Como detalle, destacó la inversión de más de 300 millones de pesos en cinco obras para el área cultural, entre ellas el Zócalo 11 de Julio en Tijuana: así que en papel, siguen gastando dinero del erario en una obra detenida por orden del Tribunal de lo Contencioso Administrativo.
A MEDIO GOBIERNO, OBRAS TODAVÍA EN EL PIZARRÓN
En febrero de este año el secretario de Infraestructura, Manuel Guevara, dijo que el Nodo 20 de Noviembre, que consiste en un paso a desnivel entre el Bulevar Salinas, Benítez y Prolongación Paseo de los Héroes estará listo el próximo diciembre, y aunque todavía están a tiempo, no se ven grandes avances en la obra.
Es más, las afectaciones viales que esa obra ha generado en Zona Río, en conjunto con la Ruta Troncal del Ayuntamiento de Tijuana, son notorias y tienen a las vialidades de la ciudad en un constante atascamiento: la ciudad no fluye. No es muy diferente la situación en el otro nodo del Gobierno del Estado, el Express Aeropuerto, ambos programados para inaugurarse a finales de año, es fácil identificar el rezago en el desarrollo de los proyectos.
Respecto a las Asociaciones Público Privadas, el gobernador destacó la construcción de la desalinizadora de Playas de Rosarito y el Valle de San Quintín, pero todavía faltan redes para conducir el agua a la que se le sustraiga la sal. A la mitad de su gobierno todavía no se empieza la construcción del tren Tecate-El Sauzal, apenas consiguieron los terrenos donde se instalarán las vías. Lo mismo pasa con la construcción del Aeropuerto de Ensenada: apenas están haciendo los estudios urbanos y comprando los predios.
HOSPITALES AÚN INEXISTENTES SON REALIDAD PARA VEGA
Llama la atención que en el Tercer Informe se presuman “logros” que se concretarán en el futuro. En el cuadríptico se enuncia a los bajacalifornianos que gracias a “la exitosa gestión de recursos” se construirá -sin especificar cuándo- un nuevo Hospital de Especialidades en Mexicali, y se equipará el Hospital Materno Infantil en Tijuana, también se construirán Unidades de Especialidades Médicas en ambas ciudades, que en conjunto costarán 857 millones de pesos.
El gobernador considera un logro que 3.5 millones de residentes del Estado estén afiliados a instituciones de salud, pero omite el hecho que las instalaciones de la Secretaría de Salud del Estado no cuentan con los insumos suficientes. Por cierto, Salud ha cambiado de secretario cuatro veces en tres años de gobierno. Un descontrol.
Guillermo Peñúñuri, director del Hospital General de Tijuana, ha señalado en varias ocasiones el déficit de camas del área de urgencias. ZETA documentó cómo en el principal hospital público de la ciudad más habitada del Estado, los empleados reportaban la falta de insumos tan básicos como gasas y alcohol. El ex secretario de Salud del Estado, Francisco Vera, aceptó que la autoridad sanitaria es incompetente para atender a una población que crece aceleradamente.
Ha transcurrido la mitad del sexenio de Francisco Vega de Lamadrid y, con un índice de inseguridad que pone a municipios como Tijuana y Playas de Rosarito en la esfera más alta del peligro en México, un sistema de salud saturado, proyectos de infraestructura que están más en el discurso del gobernador que en una realidad tangible para millones de bajacalifornianos y evidentes actos de corrupción e impunidad de parte de funcionarios estatales de alto nivel, resulta difícil secundar al mandatario estatal cuando dice que vamos por “buen camino”.